*Lecturas
de la 5ª Semana del Tiempo Ordinario - Ciclo B*
Jueves, 11 de febrero de 2021
Primera lectura
Lectura del
libro del Génesis (2,18-25):
EL Señor Dios se dijo:
«No es bueno que el hombre esté solo; voy a hacerle a alguien como él, que le
ayude».
Entonces el Señor Dios modeló de la tierra todas las bestias del campo y todos
los pájaros del cielo, y se los presentó a Adán, para ver qué nombre les ponía.
Y cada ser vivo llevaría el nombre que Adán le pusiera.
Así Adán puso nombre a todos los ganados, a los pájaros del cielo y a las
bestias del campo; pero no encontró ninguno como él, que le ayudase.
Entonces el Señor Dios hizo caer un letargo sobre Adán, que se durmió; le sacó
una costilla, y le cerró el sitio con carne.
Y el Señor Dios formó, de la costilla que había sacado de Adán, una mujer, y se
la presentó a Adán.
Adán dijo:
«Esta sí que es hueso de mis huesos y carne de mi carne! Su nombre será mujer
,, porque ha salido del varón».
Por eso abandonará el varón a su padre y a su madre, se unirá a su mujer y
serán los dos una sola carne.
Los dos estaban desnudos, Adán y su mujer, pero no sentían vergüenza uno de
otro.
Palabra de Dios
Salmo
Sal
127,1-2.3.4-5
R/. Dichosos los que
temen al Señor
V/. Dichoso el que teme al Señor
y sigue sus caminos.
Comerás del fruto de tu trabajo,
serás dichoso, te irá bien. R/.
V/. Tu mujer, como parra fecunda,
en medio de tu casa;
tus hijos, como renuevos de olivo,
alrededor de tu mesa. R/.
V/. Esta es la bendición del hombre
que teme al Señor.
Que el Señor te bendiga desde Sión,
que veas la prosperidad de Jerusalén
todos los días de tu vida. R/.
Jueves, 11 de febrero de 2021
Evangelio
*Lectura
del santo evangelio según san Marcos (7,24-30)*
24 Y partiendo de allí, se fue a la
región de Tiro, y entrando en una casa quería que nadie lo supiese, pero no
logró pasar inadvertido,
25 sino que, en seguida, habiendo oído
hablar de él una mujer, cuya hija estaba poseída de un espíritu inmundo, vino y
se postró a sus pies.
26 Esta mujer era pagana, sirofenicia de
nacimiento, y le rogaba que expulsara de su hija al demonio.
27 El le decía: «Espera que primero se
sacien los hijos, pues no está bien tomar el pan de los hijos y echárselo a los
perritos.»
28 Pero ella le respondió: «Sí, Señor; que
también los perritos comen bajo la mesa migajas de los niños.»
29 El, entonces, le dijo: «Por lo que has
dicho, vete; el demonio ha salido de tu hija.»
30 Volvió a su casa y encontró que la niña
estaba echada en la cama y que el demonio se había ido.
Palabra del Señor
(«Tienes
razón, Señor; pero también los perros, debajo de la mesa, comen las migajas que
tiran los niños.»)
*Este lenguaje
del Señor parece duro y fuerte, como que no se corresponde a la misión sanadora
del Señor. Pero para mí en el fondo es todo un lenguaje cargado de amor, de
ternura, y de solidaridad, puedo ver que el amor del Señor no tiene distancia,
ni barrera, ni color, ni raza, ni frontera, está diseñado, especialmente para
mí. La buena noticia para mi es que el Señor se coloca en un lugar donde lo
pueda ver, y me dice que lo más importante es la sinceridad, que el punto débil
del Señor es la sinceridad, y me invita a ser sincero primero con él, hacer
sincero con migo y con los demás*
*El
que desea y quiere amar, con el corazón según el Señor: llegará a ser, Santo*
V. El Señor
nos bendiga, nos guarde de todo mal y nos lleve a la vida eterna.
R. Amén.