Musica Para el Alma
martes, 11 de julio de 2023
MATEO 10,1-7 CICLO A
*Lecturas del Miércoles de
la 14ª semana del Tiempo Ordinario*
Miércoles,
12 de julio de 2023
Evangelio
*Lectura del santo evangelio según san Mateo
(10,1-7)*
En aquel tiempo, Jesús, llamando a sus doce discípulos, les dio autoridad para
expulsar espíritus inmundos y curar toda enfermedad y dolencia. Éstos son los
nombres de los doce apóstoles: el primero, Simón, llamado Pedro, y su hermano
Andrés; Santiago el Zebedeo, y su hermano Juan; Felipe y Bartolomé, Tomás y
Mateo, el publicano; Santiago el Alfeo, y Tadeo; Simón el Celote, y Judas
Iscariote, el que lo entregó.
A estos doce los envió Jesús con estas instrucciones: «No vayáis a tierra de
gentiles, ni entréis en las ciudades de Samaria, sino id a las ovejas
descarriadas de Israel. Id y proclamad que el reino de los cielos está cerca.»
Palabra del Señor
*Que la Paz del Señor llegue primero
a vuestros corazones antes que mis palabras*
«No
vayáis a tierra de gentiles, ni entréis en las ciudades de Samaria, sino id a
las ovejas descarriadas de Israel. Id y proclamad que el reino de los cielos
está cerca.»
*El mismo que dijo: Alumbre
vuestra luz a los hombres, dijo también en la misma ocasión: No hagáis vuestra
justicia delante de los hombres. Y del mismo modo que estas palabras te
parecían contradictorias en boca del Apóstol, así también en el Evangelio. Pero
si no enturbias el agua de tu corazón, también en ellas reconocerás la paz de
las Escrituras, y participarás tú también de su misma paz*
*El que desea y quiere amar, con el corazón
según el Señor: llegará a ser, Santo*
V. El
Señor nos bendiga, nos guarde de todo mal y nos lleve a la vida eterna.
R. Amén.
LAS LAUDES Y LAS VISPERAS DEL MIERCOLES 12
*LAS LAUDES Y
LAS VISPERAS*
Abre, Señor, mi boca para bendecir tu santo nombre; limpia mi corazón de
todos los pensamientos vanos, perversos y ajenos; ilumina mi entendimiento y
enciende mi sentimiento para que, digna, atenta y devotamente pueda recitar este
Oficio, y merezca ser escuchado en la presencia de tu divina majestad. Por
Cristo nuestro Señor. Amén
*MIERCOLES
SEMANA II*
*LAUDES*
(Oración de la mañana)
INVITATORIO
V. Señor abre mis labios
R. Y mi boca proclamará tu alabanza
Gloria al
Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.
Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén
Ant. Aclama al Señor, tierra entera,
servid al Señor con alegría.
Salmo 94 INVITACIÓN A LA ALABANZA DIVINA
Venid, aclamemos al Señor,
demos vítores a la Roca que nos salva;
entremos a su presencia dándole gracias,
aclamándolo con cantos.
Porque el Señor es un Dios grande,
soberano de todos los dioses:
tiene en su mano las simas de la tierra,
son suyas las cumbres de los montes;
suyo es el mar, porque él lo hizo,
la tierra firme que modelaron sus manos.
Venid, postrémonos por tierra,
bendiciendo al Señor, creador nuestro.
Porque él es nuestro Dios,
y nosotros su pueblo,
el rebaño que él guía.
Ojalá escuchéis hoy su voz:
«No endurezcáis el corazón como en Meribá,
como el día de Masá en el desierto;
cuando vuestros padres me pusieron a prueba
y dudaron de mí, aunque habían visto mis obras.
Durante cuarenta años
aquella generación me repugnó, y dije:
Es un pueblo de corazón extraviado,
que no reconoce mi camino;
por eso he jurado en mi cólera
que no entrarán en mi descanso»
Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.
Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.
Ant. Aclama al Señor, tierra entera,
servid al Señor con alegría.
Himno: NACIDOS DE LA LUZ, HIJOS DEL DÍA.
Nacidos de la luz, hijos del día,
Vamos hacia el Señor de la mañana.
Su claridad disipa nuestras sombras
y alegra y regocija nuestras almas.
Que nuestro Dios, el Padre de la gloria,
nos libre para siempre del pecado,
y podamos así gozar la herencia
que nos legó en su Hijo muy amado.
Honor y gloria a Dios, Padre celeste,
por medio de su Hijo Jesucristo,
y al Don de toda luz, el Santo Espíritu,
que vive por los siglos de los siglos. Amén.
SALMODIA
Ant 1. Dios mío, tus caminos son santos: ¿qué dios es grande como nuestro
Dios?
Salmo 76 - RECUERDO DEL PASADO GLORIOSO DE ISRAEL.
Alzo mi voz a Dios gritando,
alzo mi voz a Dios para que me oiga.
En mi angustia te busco, Señor mío;
de noche extiendo las manos sin descanso,
y mi alma rehúsa el consuelo.
Cuando me acuerdo de Dios, gimo,
y meditando me siento desfallecer.
Sujetas los párpados de mis ojos,
y la agitación no me deja hablar.
Repaso los días antiguos,
recuerdo los años remotos;
de noche lo pienso en mis adentros,
y meditándolo me pregunto:
¿Es que el Señor nos rechaza para siempre
y ya no volverá a favorecernos?
¿Se ha agotado ya su misericordia,
se ha terminado para siempre su promesa?
¿Es que Dios se ha olvidado de su bondad,
o la cólera cierra sus entrañas?
Y me digo: ¡Qué pena la mía!
¡Se ha cambiado la diestra del Altísimo!
Recuerdo las proezas del Señor;
sí, recuerdo tus antiguos portentos,
medito todas tus obras
y considero tus hazañas.
Dios mío, tus caminos son santos:
¿qué dios es grande como nuestro Dios?
Tú, ¡oh Dios!, haciendo maravillas,
mostraste tu poder a los pueblos;
con tu brazo rescataste a tu pueblo,
a los hijos de Jacob y de José.
Te vio el mar, ¡oh Dios!,
te vio el mar y tembló,
las olas se estremecieron.
Las nubes descargaban sus aguas,
retumbaban los nubarrones,
tus saetas zigzagueaban.
Rodaba el fragor de tu trueno,
los relámpagos deslumbraban el orbe,
la tierra retembló estremecida.
Tú te abriste camino por las aguas,
un vado por las aguas caudalosas,
y no quedaba rastro de tus huellas:
mientras guiabas a tu pueblo, como a un rebaño,
por la mano de Moisés y de Aarón.
Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.
Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.
Ant. Dios mío, tus caminos son santos:
¿qué dios es grande como nuestro Dios?
Ant 2. Mi corazón se regocija por el
Señor, que humilla y enaltece.
Cántico: ALEGRIA DE LOS HUMILDES EN DIOS 1S 2,1-10
Mi corazón se regocija por el Señor,
mi poder se exalta por Dios;
mi boca se ríe de mis enemigos,
porque gozo con tu salvación.
No hay santo como el Señor,
no hay roca como nuestro Dios.
No multipliquéis discursos altivos,
no echéis por la boca arrogancias,
porque el Señor es un Dios que sabe;
él es quien pesa las acciones.
Se rompen los arcos de los valientes,
mientras los cobardes se ciñen de valor;
los hartos se contratan por el pan,
mientras los hambrientos no tienen ya que trabajar;
la mujer estéril da a luz siete hijos,
mientras la madre de muchos se marchita.
El Señor da la muerte y la vida,
hunde en el abismo y levanta;
da la pobreza y la riqueza,
humilla y enaltece.
Él levanta del polvo al desvalido,
alza de la basura al pobre,
para hacer que se siente entre príncipes
y que herede un trono de gloria;
pues del Señor son los pilares de la tierra,
y sobre ellos afianzó el orbe.
Él guarda los pasos de sus amigos,
mientras los malvados perecen en las tinieblas,
porque el hombre no triunfa por su fuerza.
El Señor desbarata a sus contrarios,
el Altísimo truena desde el cielo,
el Señor juzga hasta el confín de la tierra.
él da fuerza a su Rey,
exalta el poder de su Ungido.
Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.
Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.
Ant. Mi corazón se regocija por el
Señor, que humilla y enaltece.
Ant 3. El Señor reina, la tierra goza.
Salmo 96 - EL SEÑOR ES UN REY MAYOR QUE TODOS LOS DIOSES.
El Señor reina, la tierra goza,
se alegran las islas innumerables.
Tiniebla y nube lo rodean,
justicia y derecho sostienen su trono.
Delante de él avanza fuego
abrasando en torno a los enemigos;
sus relámpagos deslumbran el orbe,
y, viéndolos, la tierra se estremece.
Los montes se derriten como cera
ante el dueño de toda la tierra;
los cielos pregonan su justicia,
y todos los pueblos contemplan su gloria.
Los que adoran estatuas se sonrojan,
los que ponen su orgullo en los ídolos;
ante él se postran todos los dioses.
Lo oye Sión, y se alegra,
se regocijan las ciudades de Judá
por tus sentencias, Señor;
porque tú eres, Señor,
altísimo sobre toda la tierra,
encumbrado sobre todos los dioses.
El Señor ama al que aborrece el mal,
protege la vida de sus fieles
y los libra de los malvados.
Amanece la luz para el justo,
y la alegría para los rectos de corazón.
Alegraos, justos, con el Señor,
celebrad su santo nombre.
Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.
Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.
Ant. El Señor reina, la tierra goza.
LECTURA BREVE Rm 8, 35. 37
¿Quién podrá apartarnos del amor de Cristo? ¿La aflicción? ¿La angustia? ¿La
persecución? ¿El hambre? ¿La desnudez? ¿El peligro? ¿La espada? En todo esto
vencemos fácilmente por aquel que nos ha amado.
RESPONSORIO BREVE
V. Bendigo al Señor en todo momento.
R. Bendigo al Señor en todo momento.
V. Su alabanza está siempre en mi boca.
R. En todo momento.
V. Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu
Santo.
R. Bendigo al Señor en todo momento.
V. Mi
alma espera en el Señor.
R. Espera en su palabra.
PRIMERA LECTURA
Del primer libro de Samuel 21, 1-9; 22, 1-5
FUGA DE DAVID
En aquellos días, llegó David a Nob, donde estaba el sacerdote Ajimélec; vino
Ajimélec temblando al encuentro de David y le preguntó:
«¿Por qué vienes solo y no hay nadie contigo?»
Respondió David al sacerdote Ajimélec:
«El rey me ha dado una orden y me ha dicho: "Que nadie sepa el asunto a
que te mando y lo que te ordeno." A los muchachos los he citado en tal
lugar. Así, pues, ¿qué tienes a mano? Dame cinco panes o lo que haya.»
Respondió el sacerdote a David:
«No tengo a mano pan ordinario, no hay más que pan consagrado; si es que tus
hombres se han abstenido al menos del trato con mujer.»
Respondió David al sacerdote:
«Ciertamente que nos hemos abstenido de mujer, como siempre que salgo a
campaña, y los cuerpos de los muchachos están puros; aunque es un viaje
profano, cierto que hoy sus cuerpos están puros.»
Entonces el sacerdote le dio panes consagrados, porque no había allí otro pan
sino el pan de la presencia, el retirado de delante del Señor para colocar pan
reciente el día que tocaba retirarlo.
Estaba allí aquel día uno de los servidores de Saúl, detenido ante el Señor; se
llamaba Doeg, edomita, jefe de los corredores de Saúl.
Dijo David a Ajimélec:
«¿No tienes aquí a mano una lanza o una espada? Porque ni siquiera he cogido mi
espada, ni mis armas, pues urgía la orden del rey.»
Respondió el sacerdote:
«Ahí está la espada de Goliat, el filisteo que mataste en el valle del
Terebinto, envuelta en un paño detrás del efod; si la quieres, tómala; fuera de
ésta, no hay otra.»
Dijo David:
«Ninguna mejor que ella. Dámela.»
David partió de allí y se refugió en la caverna de Adul-lam. Lo supieron sus
hermanos y toda la casa de su padre, y bajaron allí, junto a él. Todo el que se
encontraba en apuro, todos los que tenían acreedores y los desesperados se
unieron a él, y fue jefe de ellos. Había con él unos cuatrocientos hombres.
De allí se fue David a Mispé de Moab, y dijo al rey de Moab:
«Permite que mi padre y mi madre se queden con vosotros hasta que yo sepa qué
va a hacer Dios conmigo.»
Los dejó con el rey de Moab, y se quedaron con él todo el tiempo que David
estuvo en el refugio.
El profeta Gad dijo a David:
«No te quedes en el refugio. Vete y penetra en las tierras de Judá.»
Partió, pues, David, y entró en el bosque de Jéret.
RESPONSORIO Rm 7, 6; Mc 2, 25. 26
R. Nos hemos desprendido de la ley, muriendo para
aquello en que estábamos presos; * sirvamos
a Dios en la novedad del espíritu y no en la vejez de la letra.
V. ¿No habéis leído lo que hizo David cuando
sintió hambre: cómo entró en la casa de Dios y comió de los panes de la
proposición?
R. Sirvamos a Dios en la novedad del espíritu y no
en la vejez de la letra.
SEGUNDA LECTURA
Del Comentario de Procopio de Gaza, obispo, sobre el libro de los
Proverbios.
(Cap. 9: PG 87, 1, 1299-1303)
LA SABIDURÍA DE DIOS NOS MEZCLÓ SU VINO Y PUSO SU MESA
La Sabiduría se ha construido su casa. La Potencia personal de Dios Padre se
preparó como casa propia todo el universo, en el que habita por su poder, y
también lo preparó para aquel que fue creado a imagen y semejanza de Dios y que
consta de una naturaleza en parte visible y en parte invisible.
Plantó siete columnas. Al hombre creado de nuevo en Cristo, para que crea en él
y observe sus mandamientos, le ha dado los siete dones del Espíritu Santo; con
ellos, estimulada la virtud por el conocimiento y recíprocamente manifestado el
conocimiento por la virtud, el hombre espiritual llega a su plenitud, afianzado
en la perfección de la fe por la participación de los bienes espirituales.
Y así, la natural nobleza del espíritu humano queda elevada por el don de
fortaleza, que nos predispone a buscar con fervor y a desear los designios
divinos, según los cuales ha sido hecho todo; por el don de consejo, que nos da
discernimiento para distinguir entre los falsos y los verdaderos designios de
Dios, increados e inmortales, y nos hace meditarlos y profesarlos de palabra al
darnos la capacidad de percibirlos; y por el don de entendimiento, que nos
ayuda a someternos de buen grado a los verdaderos designios de Dios y no a los
falsos.
Ha mezclado el vino en la copa y ha puesto la mesa. Y en el hombre que hemos
dicho, en el cual se hallan mezclados como en una copa lo espiritual y lo
corporal, la Potencia personal de Dios juntó a la ciencia natural de las cosas
el conocimiento de ella como creadora de todo; y este conocimiento es como un
vino que embriaga con las cosas que atañen a Dios. De este modo, alimentando a
las almas en la virtud por sí misma, que es el pan celestial, y embriagándolas
y deleitándolas con su instrucción, dispone todo esto a manera de alimentos
destinados al banquete espiritual, para todos los que desean participar del
mismo.
Ha despachado a sus criados para que anuncien el banquete. Envió a los
apóstoles, siervos de Dios, encargados de la proclamación evangélica, la cual,
por proceder del Espíritu, es superior a la ley escrita y natural, e invita a
todos a que acudan a aquel en el cual, como en una copa, por el misterio de la encarnación
tuvo lugar una mezcla admirable de la naturaleza divina y humana, unidas en una
sola persona, aunque sin confundirse entre sí. Y clama por boca de ellos: «El
insensato, que venga a mí. El insensato, que piensa en su interior que no hay
Dios, renunciando a su impiedad, acérquese a mí por la fe, y sepa que yo soy el
Creador y Señor de todas las cosas.»
Y dice: Quiero hablar a los faltos de juicio: Venid a comer de mi pan y a beber
el vino que he mezclado. Y, tanto a los faltos de obras de fe como a los que
tienen el deseo de una vida más perfecta, dice: «Venid, comed mi cuerpo, que es
el pan que os alimenta y fortalece; bebed mi sangre, que es el vino de la
doctrina celestial que os deleita y os diviniza; porque he mezclado de manera
admirable mi sangre con la divinidad, para vuestra salvación.»
RESPONSORIO Pr 9, 1-2; Jn 6, 57
R. La Sabiduría se ha construido su casa,
plantando siete columnas; * ha
preparado el banquete, ha mezclado el vino y puesto la mesa.
V. «El que come mi carne y bebe mi sangre
permanece en mí, y yo en él», dice el Señor.
R. Ha preparado el banquete, ha mezclado el vino y
puesto la mesa.
*Lecturas del Miércoles de
la 14ª semana del Tiempo Ordinario*
Miércoles,
12 de julio de 2023
Evangelio
*Lectura del santo evangelio según san Mateo
(10,1-7)*
En aquel tiempo, Jesús, llamando a sus doce discípulos, les dio autoridad para
expulsar espíritus inmundos y curar toda enfermedad y dolencia. Éstos son los
nombres de los doce apóstoles: el primero, Simón, llamado Pedro, y su hermano
Andrés; Santiago el Zebedeo, y su hermano Juan; Felipe y Bartolomé, Tomás y
Mateo, el publicano; Santiago el Alfeo, y Tadeo; Simón el Celote, y Judas
Iscariote, el que lo entregó.
A estos doce los envió Jesús con estas instrucciones: «No vayáis a tierra de
gentiles, ni entréis en las ciudades de Samaria, sino id a las ovejas
descarriadas de Israel. Id y proclamad que el reino de los cielos está cerca.»
Palabra del Señor
CÁNTICO
EVANGÉLICO
Ant. Sirvamos al Señor con santidad todos nuestros días.
Cántico de Zacarías. EL MESÍAS Y SU PRECURSOR
Lc 1, 68-79
+Bendito sea el Señor, Dios de Israel,
porque ha visitado y redimido a su pueblo.
suscitándonos una fuerza de salvación
en la casa de David, su siervo,
según lo había predicho desde antiguo
por boca de sus santos profetas:
Es la salvación que nos libra de nuestros enemigos
y de la mano de todos los que nos odian;
ha realizado así la misericordia que tuvo con nuestros padres,
recordando su santa alianza
y el juramento que juró a nuestro padre Abraham.
Para concedernos que, libres de temor,
arrancados de la mano de los enemigos,
le sirvamos con santidad y justicia,
en su presencia, todos nuestros días.
Y a ti, niño, te llamarán Profeta del Altísimo,
porque irás delante del Señor
a preparar sus caminos,
anunciando a su pueblo la salvación,
el perdón de sus pecados.
Por la entrañable misericordia de nuestro Dios,
nos visitará el sol que nace de lo alto,
para iluminar a los que viven en tiniebla
y en sombra de muerte,
para guiar nuestros pasos
por el camino de la paz.
Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.
Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.
Ant. Sirvamos al Señor con santidad
todos nuestros días.
PRECES
Oremos a nuestro Señor Jesucristo, que prometió estar con nosotros
todos los días hasta el fin del mundo, y digámosle confiados:
Escúchanos, Señor.
Quédate con nosotros, Señor, durante todo el día:
que la luz de tu gracia no conozca nunca el anochecer en nuestras vidas.
Que el trabajo de este día sea como una oblación sin defecto,
y que sea agradable a tus ojos.
Que en todas nuestras palabras y acciones seamos hoy luz del mundo
y sal de la tierra para cuantos nos traten.
Que la gracia del Espíritu Santo habite en nuestros corazones y resplandezca en
nuestras obras
para que así permanezcamos en tu amor y en tu alabanza.
Se pueden añadir algunas intenciones libres
Terminemos nuestra oración diciendo juntos las palabras del Señor y pidiendo al
Padre que nos libre de todo mal:
Padre nuestro...
ORACION
Envía, Señor, a nuestros corazones la abundancia de tu luz, para
que, avanzando siempre por el camino de tus mandatos, nos veamos libres de todo
error. Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina contigo en la
unidad del Espíritu Santo y es Dios, por los siglos de los siglos. Amén.
CONCLUSIÓN
V. El Señor nos bendiga, nos guarde de todo mal y nos lleve a la vida
eterna.
R. Amén.
MIERCOLES
SEMANA II
VÍSPERAS
(Oración de la tarde)
INVOCACIÓN INICIAL
V. Dios mío, ven en mi auxilio
R. Señor, date prisa en socorrerme. Gloria al
Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.
Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.
Aleluya.
Himno: SEÑOR, TÚ ERES SANTO: YO ADORO, YO CREO.
Señor, tú eres santo: yo adoro, yo creo;
tu cielo es un libro de páginas bellas,
do en noches tranquilas mi símbolo leo,
que escribe tu mano con signos de estrellas.
En vano con sombras el caos se cierra:
tú miras al caos, la luz nace entonces;
tú mides las aguas que ciñen la tierra,
tú mides los siglos que muerden los bronces.
El mar a la tierra pregunta tu nombre,
la tierra a las aves que tienden su vuelo;
las aves lo ignoran; preguntan al hombre,
y el hombre lo ignora; pregúntanlo al cielo.
EI mar con sus ecos ha siglos que ensaya
formar ese nombre, y el mar no penetra
misterios tan hondos, muriendo en la playa,
sin que oigan los siglos o sílaba o letra.
Señor, tú eres santo: yo te amo, yo espero;
tus dulces bondades cautivan el alma;
mi pecho gastaron con diente de acero
los gustos del mundo, vacíos de calma.
Concede a mis penas la luz de bonanza,
la paz a mis noches, la paz a mis días;
tu amor a mi pecho, tu fe y tu esperanza,
que es bálsamo puro que al ánima envías. Amén.
SALMODIA
Ant 1. Aguardamos la alegre esperanza, la aparición gloriosa de nuestro
salvador.
Salmo 61 - DIOS, ÚNICA ESPERANZA DEL JUSTO.
Sólo en Dios descansa mi alma,
porque de él viene mi salvación;
sólo él es mi roca y mi salvación,
mi alcázar: no vacilaré.
¿Hasta cuándo arremeteréis contra un hombre
todos juntos, para derribarlo
como a una pared que cede
o a una tapia ruinosa?
Sólo piensan en derribarme de mi altura,
y se complacen en la mentira:
con la boca bendicen,
con el corazón maldicen.
Descansa sólo en Dios, alma mía,
porque él es mi esperanza;
sólo él es mi roca y mi salvación,
mi alcázar: no vacilaré.
De Dios viene mi salvación y mi gloria,
él es mi roca firme,
Dios es mi refugio.
Pueblo suyo, confiad en él,
desahogad ante él vuestro corazón,
que Dios es nuestro refugio.
Los hombres no son más que un soplo,
los nobles son apariencia:
todos juntos en la balanza subirían
más leves que un soplo.
No confiéis en la opresión,
no pongáis ilusiones en el robo;
y aunque crezcan vuestras riquezas,
no les deis el corazón.
Dios ha dicho una cosa,
y dos cosas que he escuchado:
«Que Dios tiene el poder
y el Señor tiene la gracia;
que tú pagas a cada uno
según sus obras.»
Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.
Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.
Ant. Aguardamos la alegre esperanza, la
aparición gloriosa de nuestro salvador.
Ant 2. Que Dios ilumine su rostro sobre
nosotros y nos bendiga.
Salmo 66 - QUE TODOS LOS PUEBLOS ALABEN AL SEÑOR.
El Señor tenga piedad y nos bendiga,
ilumine su rostro sobre nosotros;
conozca la tierra tus caminos,
todos los pueblos tu salvación.
¡Oh Dios!, que te alaben los pueblos,
que todos los pueblos te alaben.
Que canten de alegría las naciones,
porque riges el mundo con justicia,
riges los pueblos con rectitud
y gobiernas las naciones de la tierra.
¡Oh Dios!, que te alaben los pueblos,
que todos los pueblos te alaben.
La tierra ha dado su fruto,
nos bendice el Señor, nuestro Dios.
Que Dios nos bendiga; que le teman
hasta los confines del orbe.
Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.
Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.
Ant. Que Dios ilumine su rostro sobre
nosotros y nos bendiga.
Ant 3. Todo fue creado por él y para él.
Cántico: HIMNO A CRISTO, PRIMOGÉNITO DE TODA CREATURA Y PRIMER
RESUCITADO DE ENTRE LOS MUERTOS. Cf. Col 1, 12-20
Damos gracias a Dios Padre,
que nos ha hecho capaces de compartir
la herencia del pueblo santo en la luz.
Él nos ha sacado del dominio de las tinieblas,
y nos ha trasladado al reino de su Hijo querido,
por cuya sangre hemos recibido la redención,
el perdón de los pecados.
Él es imagen de Dios invisible,
primogénito de toda creatura;
pues por medio de él fueron creadas todas las cosas:
celestes y terrestres, visibles e invisibles,
Tronos, Dominaciones, Principados, Potestades;
todo fue creado por él y para él.
Él es anterior a todo, y todo se mantiene en él.
Él es también la cabeza del cuerpo de la Iglesia.
Él es el principio, el primogénito de entre los muertos,
y así es el primero en todo.
Porque en él quiso Dios que residiera toda plenitud.
Y por él quiso reconciliar consigo todas las cosas:
haciendo la paz por la sangre de su cruz
con todos los seres, así del cielo como de la tierra.
Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.
Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.
Ant. Todo fue creado por él y para él.
LECTURA BREVE 1Pe 5, 5b-7
Sed humildes unos con otros, porque Dios resiste a los soberbios, pero da su
gracia a los humildes. Inclinaos bajo la poderosa mano de Dios, para que a su
tiempo os eleve. Descargad en él todas vuestras preocupaciones, porque él se
interesa por vosotros.
RESPONSORIO BREVE
V. Guárdanos, Señor, como a las niñas de tus ojos.
R. Guárdanos, Señor, como a las niñas de tus ojos.
V. A las sombras de tus alas escóndenos.
R. Como a las niñas de tus ojos.
V. Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu
Santo.
R. Guárdanos, Señor, como a las niñas de tus ojos.
CÁNTICO EVANGÉLICO
Ant. Haz, Señor, proezas con tu brazo, dispersa a los soberbios y
enaltece a los humildes.
Cántico de María. ALEGRÍA DEL ALMA EN EL SEÑOR Lc 1, 46-55
+Proclama mi alma la grandeza del Señor,
se alegra mi espíritu en Dios, mi salvador;
porque ha mirado la humillación de su esclava.
Desde ahora me felicitarán todas las generaciones,
porque el Poderoso ha hecho obras grandes por mí:
su nombre es santo,
y su misericordia llega a sus fieles
de generación en generación.
El hace proezas con su brazo:
dispersa a los soberbios de corazón,
derriba del trono a los poderosos
y enaltece a los humildes,
a los hambrientos los colma de bienes
y a los ricos los despide vacíos.
Auxilia a Israel, su siervo,
acordándose de su misericordia
—como lo había prometido a nuestros padres—
en favor de Abraham y su descendencia por siempre.
Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.
Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.
Ant. Haz, Señor, proezas con tu brazo,
dispersa a los soberbios y enaltece a los humildes.
PRECES
Aclamemos, hermanos, a Dios, nuestro salvador, que se complace en
enriquecernos con sus dones, y digámosle con fe:
Muéstranos, Señor, tu amor y danos tu paz.
Dios eterno, mil años en tu presencia son como un ayer que pasó;
ayúdanos a recordar siempre que nuestra vida es como una hierba que se renueva
por la mañana y se seca por la tarde.
Alimenta a tu pueblo con el maná para que no perezca de hambre
y dale el agua viva para que nunca más tenga sed.
Que tus fieles busquen y saboreen los bienes de arriba
y te glorifiquen también con su descanso.
Concede, Señor, buen tiempo a las cosechas,
para que la tierra dé fruto abundante.
Se pueden añadir algunas intenciones libres
Que los difuntos puedan contemplar tu faz
y que nosotros tengamos un día parte en su felicidad.
Confiemos nuestras súplicas a Dios nuestro Padre, terminando nuestra oración
con las palabras que Cristo nos enseñó:
Padre nuestro...
ORACION
Dios nuestro, tu nombre es santo y tu misericordia llega a tus
fieles de generación en generación; atiende, pues, las súplicas de tu pueblo y
haz que pueda cantar eternamente tus alabanzas. Por nuestro Señor Jesucristo,
tu Hijo, que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo y es Dios,
por los siglos de los siglos. Amén.
CONCLUSIÓN
V. El Señor nos bendiga, nos guarde de todo mal y nos lleve a la vida
eterna.
R. Amén.
LAS LECTURAS DEL MIERCOLES 12 DE JULIO 2023
*Lecturas del Miércoles de
la 14ª semana del Tiempo Ordinario*
Miércoles, 12 de julio de 2023
Primera lectura
Lectura del libro del Génesis
(41,55-57;42,5-7.17-24a):
En aquellos días, llegó el hambre a todo Egipto, y el pueblo reclamaba pan al
Faraón; el Faraón decía a los egipcios: «Dirigíos a José y haced lo que él os
diga.»
Cuando el hambre cubrió toda la tierra, José abrió los graneros y repartió
raciones a los egipcios, mientras arreciaba el hambre en Egipto. Y de todos los
países venían a Egipto a comprarle a José, porque el hambre arreciaba en toda
la tierra. Los hijos de Jacob fueron entre otros a comprar grano, pues había
hambre en Canaán. José mandaba en el país y distribuía las raciones a todo el
mundo. Vinieron, pues, los hermanos de José y se postraron ante él, rostro en
tierra.
Al ver a sus hermanos, José los reconoció, pero él no se dio a conocer, sino
que les habló duramente: «¿De dónde venís?»
Contestaron: «De tierra de Canaán, a comprar provisiones.»
Y los hizo detener durante tres días.
Al tercer día, les dijo: «Yo temo a Dios, por eso haréis lo siguiente, y
salvaréis la vida: si sois gente honrada, uno de vosotros quedará aquí
encarcelado, y los demás irán a llevar víveres a vuestras familias hambrientas;
después me traeréis a vuestro hermano menor; así probaréis que habéis dicho la
verdad y no moriréis.»
Ellos aceptaron, y se decían: «Estamos pagando el delito contra nuestro
hermano, cuando le veíamos suplicarnos angustiado y no le hicimos caso; por eso
nos sucede esta desgracia.»
Intervino Rubén: «¿No os lo decía yo: "No pequéis contra el
muchacho", y no me hicisteis caso? Ahora nos piden cuentas de su sangre.»
Ellos no sabían que José les entendía, pues había usado intérprete. Él se
retiró y lloró; después volvió a ellos.
Palabra de Dios
Salmo
Sal 32,2-3.10-11.18-19
R/. Que tu misericordia, Señor, venga sobre nosotros,
como lo esperamos de ti
Dad gracias al Señor con la cítara,
tocad en su honor el arpa de diez cuerdas;
cantadle un cántico nuevo,
acompañando los vítores con bordones. R/.
El Señor deshace los planes de las naciones,
frustra los proyectos de los pueblos;
pero el plan del Señor subsiste por siempre,
los proyectos de su corazón, de edad en edad. R/.
Los ojos del Señor están puestos en sus fieles,
en los que esperan en su misericordia,
para librar sus vidas de la muerte
y reanimarlos en tiempo de hambre. R/.
*Lecturas del Miércoles de
la 14ª semana del Tiempo Ordinario*
Miércoles,
12 de julio de 2023
Evangelio
*Lectura del santo evangelio según san Mateo
(10,1-7)*
En aquel tiempo, Jesús, llamando a sus doce discípulos, les dio autoridad para
expulsar espíritus inmundos y curar toda enfermedad y dolencia. Éstos son los
nombres de los doce apóstoles: el primero, Simón, llamado Pedro, y su hermano
Andrés; Santiago el Zebedeo, y su hermano Juan; Felipe y Bartolomé, Tomás y
Mateo, el publicano; Santiago el Alfeo, y Tadeo; Simón el Celote, y Judas
Iscariote, el que lo entregó.
A estos doce los envió Jesús con estas instrucciones: «No vayáis a tierra de
gentiles, ni entréis en las ciudades de Samaria, sino id a las ovejas
descarriadas de Israel. Id y proclamad que el reino de los cielos está cerca.»
Palabra del Señor
*Que la Paz del Señor llegue primero
a vuestros corazones antes que mis palabras*
«No
vayáis a tierra de gentiles, ni entréis en las ciudades de Samaria, sino id a
las ovejas descarriadas de Israel. Id y proclamad que el reino de los cielos
está cerca.»
*El mismo que dijo: Alumbre
vuestra luz a los hombres, dijo también en la misma ocasión: No hagáis vuestra
justicia delante de los hombres. Y del mismo modo que estas palabras te
parecían contradictorias en boca del Apóstol, así también en el Evangelio. Pero
si no enturbias el agua de tu corazón, también en ellas reconocerás la paz de
las Escrituras, y participarás tú también de su misma paz*
*El que desea y quiere amar, con el corazón
según el Señor: llegará a ser, Santo*
V. El
Señor nos bendiga, nos guarde de todo mal y nos lleve a la vida eterna.
R. Amén.