Musica Para el Alma

martes, 22 de octubre de 2019

VÍSPERAS ORACIÓN AL FINAL DEL DIA

TIEMPO ORDINARIO
MIÉRCOLES DE LA SEMANA XXIX
De la Feria. Salterio I

23 de octubre
VÍSPERAS
(Oración de la tarde)

INVOCACIÓN INICIAL

V. 
Dios mío, ven en mi auxilioR. Señor, date prisa en socorrerme. Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.
Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén. Aleluya.
Himno: HORA DE LA TARDE.
Hora de la tarde,
fin de las labores.
Amo de las viñas,
paga los trabajos
de tus viñadores.

Al romper el día
nos apalabraste.
Cuidamos tu viña
del alba a la tarde.

Ahora que nos pagas,
nos lo das de balde,
que a jornal de gloria
no hay trabajo grande.

Das al de la tarde
lo que al mañanero.
Son tuyas las horas
y tuyo el viñedo.

A lo que sembramos
dale crecimiento.
Tú que eres la viña,
cuida los sarmientos. Amén.
SALMODIA

Ant 1. 
El Señor es mi luz y mi salvación, ¿a quién temeré?
Salmo 26 I - CONFIANZA ANTE EL PELIGRO
El Señor es mi luz y mi salvación,
¿a quién temeré?
El Señor es la defensa de mi vida,
¿quién me hará temblar?

Cuando me asaltan los malvados
para devorar mi carne,
ellos, enemigos y adversarios,
tropiezan y caen.

Si un ejército acampa contra mí,
mi corazón no tiembla;
si me declaran la guerra,
me siento tranquilo.

Una cosa pido al Señor,
eso buscaré:
habitar en la casa del Señor
por los días de mi vida;
gozar de la dulzura del Señor
contemplando su templo.

Él me protegerá en su tienda
el día del peligro;
me esconderá en lo escondido de su morada,
me alzará sobre la roca;

y así levantaré la cabeza
sobre el enemigo que me cerca;
en su tienda sacrificaré
sacrificios de aclamación:
cantaré y tocaré para el Señor.

Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.
Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.
Ant. El Señor es mi luz y mi salvación, ¿a quién temeré?
Ant 2. Tu rostro buscaré Señor, no me escondas tu rostro.
Salmo 26 II
Escúchame, Señor, que te llamo;
ten piedad, respóndeme.

Oigo en mi corazón: «Buscad mi rostro.»
Tu rostro buscaré, Señor,
no me escondas tu rostro.

No rechaces con ira a tu siervo,
que tú eres mi auxilio;
no me deseches, no me abandones,
Dios de mi salvación.

Si mi padre y mi madre me abandonan,
el Señor me recogerá.

Señor, enséñame tu camino,
guíame por la senda llana,
porque tengo enemigos.

No me entregues a la saña de mi adversario,
porque se levantan contra mí testigos falsos,
que respiran violencia.

Espero gozar de la dicha del Señor
en el país de la vida.

Espera en el Señor, sé valiente,
ten ánimo, espera en el Señor.

Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.
Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.
Ant. Tu rostro buscaré Señor, no me escondas tu rostro.
Ant 3. Él es el primogénito de toda creatura, es el primero en todo.
Cántico: HIMNO A CRISTO, PRIMOGÉNITO DE TODA CREATURA Y PRIMER RESUCITADO DE ENTRE LOS MUERTOS. Cf. Col 1, 12-20
Damos gracias a Dios Padre,
que nos ha hecho capaces de compartir
la herencia del pueblo santo en la luz.

Él nos ha sacado del dominio de las tinieblas,
y nos ha trasladado al reino de su Hijo querido,
por cuya sangre hemos recibido la redención,
el perdón de los pecados.

Él es imagen de Dios invisible,
primogénito de toda creatura;
pues por medio de él fueron creadas todas las cosas:
celestes y terrestres, visibles e invisibles,
Tronos, Dominaciones, Principados, Potestades;
todo fue creado por él y para él.

Él es anterior a todo, y todo se mantiene en él.
Él es también la cabeza del cuerpo de la Iglesia.
Él es el principio, el primogénito de entre los muertos,
y así es el primero en todo.

Porque en él quiso Dios que residiera toda plenitud.
Y por él quiso reconciliar consigo todas las cosas:
haciendo la paz por la sangre de su cruz
con todos los seres, así del cielo como de la tierra.

Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.
Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.
Ant. Él es el primogénito de toda creatura, es el primero en todo.
LECTURA BREVE St 1, 22. 25
Llevad a la práctica la palabra y no os limitéis a escucharla, engañándoos a vosotros mismos. El que se concentra en el estudio de la ley perfecta (la que hace libre) y es constante no como oyente olvidadizo, sino para ponerla por obra, éste encontrará la felicidad en practicarla.
RESPONSORIO BREVE

V. 
Sálvame, Señor, y ten misericordia de mí.R. Sálvame, Señor, y ten misericordia de mí.
V. No arrebates mi alma con los pecadores.R. Ten misericordia de mí.
V. Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.R. Sálvame, Señor, y ten misericordia de mí.
CÁNTICO EVANGÉLICO

Ant. 
El Poderoso ha hecho obras grandes por mí: su nombre es santo.
Cántico de María. ALEGRÍA DEL ALMA EN EL SEÑOR Lc 1, 46-55
Proclama mi alma la grandeza del Señor,
se alegra mi espíritu en Dios, mi salvador;
porque ha mirado la humillación de su esclava.

Desde ahora me felicitarán todas las generaciones,
porque el Poderoso ha hecho obras grandes por mí:
su nombre es santo,
y su misericordia llega a sus fieles
de generación en generación.

El hace proezas con su brazo:
dispersa a los soberbios de corazón,
derriba del trono a los poderosos
y enaltece a los humildes,
a los hambrientos los colma de bienes
y a los ricos los despide vacíos.

Auxilia a Israel, su siervo,
acordándose de su misericordia
-como lo había prometido a nuestros padres-
en favor de Abraham y su descendencia por siempre.

Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.
Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.
Ant. El Poderoso ha hecho obras grandes por mí: su nombre es santo.
PRECES
Oremos, hermanos, a Dios Padre, que en su amor nos mira como hijos, y digámosle:

Muéstranos, Señor, la abundancia de tu amor.

Acuérdate, Señor, de tu Iglesia: guárdala de todo mal
y haz que crezca en tu amor.

Que todos los pueblos, Señor, te reconozcan como al único Dios verdadero,
y a Jesucristo como al Salvador que tú has enviado.

A nuestros parientes y bienhechores concédeles tus bienes
y que tu bondad les dé la vida eterna.

Te pedimos, Señor, por los trabajadores que sufren: alivia sus dificultades
y haz que todos los hombres reconozcan su dignidad.
Se pueden añadir algunas intenciones libres

En tu misericordia acoge a los que hoy han muerto
y dales posesión de tu reino.

Unidos fraternalmente como hermanos de una misma familia, invoquemos a nuestro Padre común:
Padre nuestro...

ORACION
Escucha, Señor, nuestras súplicas y protégenos durante el día y durante la noche: tú que eres siempre inmutable, da firmeza a los que vivimos sujetos a la sucesión de los tiempos y de las horas. Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo y es Dios, por los siglos de los siglos. Amén.
CONCLUSIÓN

V. 
El Señor nos bendiga, nos guarde de todo mal y nos lleve a la vida eterna.R. Amén.

EL ÁNGELUS


El Ángelus

V/. El ángel del Señor anunció a María.
R/. Y concibió por obra y gracia del Espíritu Santo.
Dios te salve, María…

V/. He aquí la esclava del Señor.
R/. Hágase en mí según tu palabra.
Dios te salve, María…

V/. Y el Verbo de Dios se hizo carne.
R/. Y habitó entre nosotros.
Dios te salve, María…

V/. Ruega por nosotros, Santa Madre de Dios.
R/. Para que seamos dignos de alcanzar las promesas de nuestro Señor Jesucristo.

Oración

Te suplicamos, Señor, que derrames tu gracia en nuestras almas, para que los que, por el anuncio del Ángel, hemos conocido la Encarnación de tu Hijo Jesucristo, por su Pasión y Cruz, seamos llevados a la gloria de su re­su­rrección. Por Jesucristo nuestro Señor.
R/. Amén.

Bajo tu amparo nos acogemos, Santa Madre de Dios: no desprecies las súplicas que te dirigimos en nuestras necesidades, antes bien, líbranos siempre de todos los peligros, Virgen gloriosa y bendita.


EL SANTO ROSARIO
.Misterios Gloriosos (MIERCOLES Y DOMINGOS)
.
Por la señal de la Santa Cruz, de nuestros enemigos…
.1º La Resurrección del Señor (MATEO  28,1-10)
.2º La Ascensión de Nuestro Señor a los cielos (HECHOS 1,3-11)
.3º La Venida del Espíritu Santo (HECHOS  2,1-13)
4º La Asunción de Nuestra Señora (De la Constitución Apostólica Deus del papa Pío XXII )
.5º La Coronación de Nuestra Señora, como Reina de cielo y tierra. (Constitución Dogmática Sobre la Iglesia. Lumen Gentium 59)
.
Oremos:
Oh Dios, que por la resurrección de tu Hijo, nuestro Señor Jesucristo, has llenado el mundo de alegría, concédenos, por intercesión de su Madre, la Virgen María, llegar a alcanzar los gozos eternos. Por el mismo Jesucristo, nuestro Señor. Amén.

Misterios Gozosos (LUNES Y SABADOS)

.Por la señal de la Santa Cruz, de nuestros enemigos…
.1º La Encarnación del Hijo de Dios. (Lc 1, 26-38)
 2º La Visitación de María a su prima Isabel. (Lc 1, 39-56)
 3º El Nacimiento del niño Dios.  (Lc 2, 1-20)
 4º Presentación del Niño en el Templo. (Lc 2,21-35)
 5º El niño perdido y hallado en el templo. (Lc 2,41-52)

.Oremos:  
Te pedimos, Señor, que nosotros, tus siervos, gocemos siempre de salud de alma y cuerpo; y por la intercesión de santa María, la Virgen, líbranos de las tristezas de este mundo y concédenos las alegrías del cielo. Por Jesucristo, nuestro Señor. Amén.


.Misterios Dolorosos (MARTES Y VIERNES)

.Por la señal de la Santa Cruz, de nuestros enemigos…
.1º La oración del huerto. (LUCAS  22,39-46)
.2º La Flagelación de nuestro Señor. (Jn 18,33-19,1)
.3º La Coronación de espinas. (MARCOS 15,16-20)
.4º Jesús con la Cruz a cuestas. (LUCAS  23,26-32)
.5º La Crucifixión y muerte. (MARCOS 15,22-39)

Oremos:
Señor, tú has querido que la Madre compartiera los dolores de tu Hijo al pie de la cruz; haz que la Iglesia, asociándose con María a la pasión de Cristo, merezca participar de su resurrección. Por Jesucristo, nuestro Señor. Amén
.Misterios Luminosos (JUEVES)
.
Por la señal de la Santa Cruz, de nuestros enemigos…
.1º El Bautismo del Señor (MATEO  3, 13-17)  
.2º La Boda de Caná (JUAN  2,1-11)
.3º La Proclamación del Reino de Dios (MARCOS  1, 14-15)
.4º La Transfiguración (MATEO  17,1-5)
.5º La Institución de la Eucaristía (MATEO  26, 26-28)
.
Oremos:  
Dios todopoderoso y eterno, luz de los que en ti creen, que la tierra se llene de tu gloria y que te reconozcan los pueblos por el esplendor de tu luz. Por Jesucristo, nuestro Señor. Amén.

La Coronilla de la Divina Misericordia

Se utiliza un rosario común de cinco decenas.
1 Comenzar con un Padre Nuestro, Avemaría, y Credo.

2 Al comenzar cada decena (cuentas grandes del Padre Nuestro) decir:
"Padre Eterno, te ofrezco el Cuerpo,
la Sangre, el Alma y la Divinidad
de Tu Amadísimo Hijo,
Nuestro Señor Jesucristo,
para el perdón de nuestros
pecados y los del mundo entero."
.
3. En las cuentas pequeñas del Ave María:
"Por Su dolorosa Pasión,
ten misericordia de nosotros
y del mundo entero."

Al finalizar las cinco decenas de la coronilla se repite tres
veces
:
"Santo Dios, Santo Fuerte,
Santo Inmortal, ten piedad de
nosotros y del mundo entero."


*El que DESEA y QUIERE amar, con el corazón según EL SEÑOR: llegará a ser, SANTO*

GOTAS DE MISERICORDIA


LUCAS 12,39-48. CICLO C LO QUE ME DICE EL EVANGELIO


Miércoles, 23 de octubre de 2019
Lo que me dice el Evangelio de Lucas 12,39-48. (Comprended que si supiera el dueño de casa a qué hora viene el ladrón, no le dejaría abrir un boquete.) *Es muy curioso porque pensar en un ladrón tratado de abrir un boquete, lo primero que me llega a la mente es la palabra (noche), pero el Señor en ningún momento ha mencionado la palabra noche. Soy yo quien asocia la palabra ladrón con la noche. Puedo ver que un ladrón ya entro en mí y me ha robado la oportunidad de hablar y escuchar a mis hijo, siento miedo de decirles a mis hijos: la importancia de la fidelidad, me cuesta decirle de lo importante de llegar virgen al matrimonio, tanto los varones como las hebras, como me cuesta explicarle que la sexualidad es algo Santo, porque es donde se produce una vida nueva y es gracias a una donación entre un hombre y una mujer que se aman) Como tengo miedo de hablarles de esto me he hecho a un lado y le he dado permiso a la TV para que sea ella quien eduque a mis hijos. Esta palabra me hace ver que alguien ha entrado a mi vida y me ha robado. Pero también me da una esperanza que todavía estoy a tiempo porque son mis y puedo romper con mi miedo y hablar con ellos*. 

*El que DESEA y QUIERE amar, con el corazón según EL SEÑOR: llegará a ser, SANTO*

EVANGELIO DE LUCAS


Miércoles, 23 de octubre de 2019
Evangelio
Lectura del santo evangelio según san Lucas (12,39-48):

En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: «Comprended que si supiera el dueño de casa a qué hora viene el ladrón, no le dejaría abrir un boquete. Lo mismo vosotros, estad preparados, porque a la hora que menos penséis viene el Hijo del hombre.»
Pedro le preguntó: «Señor, ¿has dicho esa parábola por nosotros o por todos?»
El Señor le respondió: « ¿Quién es el administrador fiel y solícito a quien el amo ha puesto al frente de su servidumbre para que les reparta la ración a sus horas? Dichoso el criado a quien su amo, al llegar, lo encuentre portándose así. Os aseguro que lo pondrá al frente de todos sus bienes. Pero si el empleado piensa: "Mi amo tarda en llegar", y empieza a pegarles a los mozos y a las muchachas, a comer y beber y emborracharse, llegará el amo de ese criado el día y a la hora que menos lo espera y lo despedirá, condenándolo a la pena de los que no son fieles. El criado que sabe lo que su amo quiere y no está dispuesto a ponerlo por obra recibirá muchos azotes; el que no lo sabe, pero hace algo digno de castigo, recibirá pocos. Al que mucho se le dio, mucho se le exigirá; al que mucho se le confió, más se le exigirá.»

Palabra del Señor

LAS LAUDES DEL MIÉRCOLES 23 ORACIÓN PARA INICIAR EL DÍA


Abre, Señor, mi boca para bendecir tu santo nombre; limpia mi corazón de todos los pensamientos vanos, perversos y ajenos; ilumina mi entendimiento y enciende mi sentimiento para que, digna, atenta y devotamente pueda recitar este Oficio, y merezca ser escuchado en la presencia de tu divina majestad. Por Cristo nuestro Señor. Amén

TIEMPO ORDINARIO
MIÉRCOLES DE LA SEMANA XXIX
De la Feria. Salterio I

23 de octubre

LAUDES
(Oración de la mañana)

INVITATORIO
(Si Laudes no es la primera oración del día
se sigue el esquema del Invitatorio explicado en el Oficio de Lectura)


V. 
Señor abre mis labios
R. Y mi boca proclamará tu alabanza

INVITATORIO

Ant. 
Adoremos a Dios, porque él nos ha creado.

Salmo 94 INVITACIÓN A LA ALABANZA DIVINA

Venid, aclamemos al Señor,
demos vítores a la Roca que nos salva;
entremos a su presencia dándole gracias,
aclamándolo con cantos.

Porque el Señor es un Dios grande,
soberano de todos los dioses:
tiene en su mano las simas de la tierra,
son suyas las cumbres de los montes;
suyo es el mar, porque él lo hizo,
la tierra firme que modelaron sus manos.

Venid, postrémonos por tierra,
bendiciendo al Señor, creador nuestro.
Porque él es nuestro Dios,
y nosotros su pueblo,
el rebaño que él guía.

Ojalá escuchéis hoy su voz:
«No endurezcáis el corazón como en Meribá,
como el día de Masá en el desierto;
cuando vuestros padres me pusieron a prueba
y dudaron de mí, aunque habían visto mis obras.

Durante cuarenta años
aquella generación me repugnó, y dije:
Es un pueblo de corazón extraviado,
que no reconoce mi camino;
por eso he jurado en mi cólera
que no entrarán en mi descanso»

Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.
Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.

Himno: SENTENCIA DE DIOS AL HOMBRE

Sentencia de Dios al hombre
antes que el día comience:
«Que el pan no venga a tu mesa
sin el sudor de tu frente.

Ni el sol se te da de balde,
ni el aire por ser quien eres:
las cosas son herramientas
y buscan quien las maneje.

El mar les pone corazas
de sal amarga a los peces;
el hondo sol campesino
madura a fuego las mieses.

La piedra, con ser la piedra,
guarda una chispa caliente;
y en el rumor de la nube
combaten el rayo y la nieve.

A ti te inventé las manos
y un corazón que no duerme;
puse en tu boca palabras
y pensamiento en tu frente.

No basta con dar las gracias
sin dar lo que las merece:
a fuerza de gratitudes
se vuelve la tierra estéril.» Amén.

SALMODIA

Ant 1. 
Tu luz, Señor, nos hace ver la luz.

Salmo 35 - DEPRAVACIÓN DEL MALVADO Y BONDAD DE DIOS.

El malvado escucha en su interior
un oráculo del pecado:
«No tengo miedo a Dios,
ni en su presencia.»
Porque se hace la ilusión de que su culpa
no será descubierta ni aborrecida.

Las palabras de su boca son maldad y traición,
renuncia a ser sensato y a obrar bien;
acostado medita el crimen,
se obstina en el mal camino,
no rechaza la maldad.

Señor, tu misericordia llega al cielo,
tu fidelidad hasta las nubes,
tu justicia hasta las altas cordilleras;
tus sentencias son como el océano inmenso.

Tú socorres a hombres y animales;
¡qué inapreciable es tu misericordia, oh Dios!;
los humanos se acogen a la sombra de tus alas;

se nutren de lo sabroso de tu casa,
les das a beber del torrente de tus delicias,
porque en ti está la fuente viva
y tu luz nos hace ver la luz.

Prolonga tu misericordia con los que te reconocen,
tu justicia con los rectos de corazón;
que no me pisotee el pie del soberbio,
que no me eche fuera la mano del malvado.

Han fracasado los malhechores;
derribados, no se pueden levantar.

Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.
Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.

Ant. Tu luz, Señor, nos hace ver la luz.

Ant 2. Señor, tú eres grande, tu fuerza es invencible.

Cántico: HIMNO A DIOS CREADOR DEL MUNDO Y PROTECTOR DE SU PUEBLO Jdt 16, 2-3. 15-19

¡Alabad a mi Dios con tambores,
elevad cantos al Señor con cítaras,
ofrecedle los acordes de un salmo de alabanza,
ensalzad e invocad su nombre!
porque el Señor es un Dios quebrantador de guerras,
su nombre es el Señor.

Cantaré a mi Dios un cántico nuevo:
Señor, tú eres grande y glorioso,
admirable en tu fuerza, invencible.

Que te sirva toda la creación,
porque tú lo mandaste y existió;
enviaste tu aliento y la construiste,
nada puede resistir a tu voz.

Sacudirán las olas los cimientos de los montes,
las peñas en tu presencia se derretirán como cera,
pero tú serás propicio a tus fieles.

Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.
Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.

Ant. Señor, tú eres grande, tu fuerza es invencible.

Ant 3. Aclamad a Dios con gritos de júbilo.

Salmo 46 - ENTRONIZACIÓN DEL DIOS DE ISRAEL.

Pueblos todos, batid palmas,
aclamad a Dios con gritos de júbilo;
porque el Señor es sublime y terrible,
emperador de toda la tierra.

El nos somete los pueblos
y nos sojuzga las naciones;
El nos escogió por heredad suya:
gloria de Jacob, su amado.

Dios asciende entre aclamaciones;
el Señor, al son de trompetas:
tocad para Dios, tocad,
tocad para nuestro Rey, tocad.

Porque Dios es el rey del mundo:
tocad con maestría.
Dios reina sobre las naciones,
Dios se sienta en su trono sagrado.

Los príncipes de los gentiles se reúnen
con el pueblo del Dios de Abraham;
porque de Dios son los grandes de la tierra,
y él es excelso.

Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.
Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.

Ant. Aclamad a Dios con gritos de júbilo.

LECTURA BREVE Tb 4, 16-17. 19-20

No hagas a nadie lo que no quieras que te hagan. Da de tu pan al hambriento y da tus vestidos al desnudo. Busca el consejo de los prudentes. Bendice al Señor en toda circunstancia, pídele que sean rectos todos tus caminos y que lleguen a buen fin todas tus sendas y proyectos.

RESPONSORIO BREVE

V. 
Inclina, Señor, mi corazón a tus preceptos.
R. Inclina, Señor, mi corazón a tus preceptos.

V. Dame vida con tu palabra.
R. Inclina, Señor, mi corazón a tus preceptos.

V. Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.
R. Inclina, Señor, mi corazón a tus preceptos.

PRIMERA LECTURA

Comienza el libro del profeta Habacuc 1, 1--2, 4

ORACIÓN EN TIEMPO DE TRIBULACIÓN

Oráculo que vio el profeta Habacuc:

¿Hasta cuándo clamaré, Señor, sin que me escuches? ¿Te gritaré: «Violencia», sin que me salves? ¿Por qué me haces ver desgracias? Me muestras trabajos, violencias y catástrofes, surgen luchas, se alzan contiendas. Por eso cesa la ley, el derecho no se muestra jamás. El malvado elimina al justo, y se emite una sentencia al revés.

«Mirad a los pueblos, contemplad y quedaréis asombrados, porque en vuestros días va a realizarse una obra tal, que si os la contaran no la creeríais. Yo suscitaré a los caldeos, pueblo cruel y veloz, que recorrerá la anchura de la tierra para conquistar territorios ajenos. Es funesto y terrible, dicta sentencia y condenación. Sus caballos son más veloces que leopardos, más rápidos que lobos de la estepa; sus jinetes trotan, sus jinetes vienen de lejos, volarán como rauda águila sobre la presa. Cada cual está dispuesto a la violencia con las cabezas tendidas hacia adelante, junta prisioneros como arena. Se burla de los reyes, hace escarnio de los príncipes, se ríe de las plazas fuertes, levanta un terraplén y las conquista. Después toma aliento y continúa implacable. Su fuerza es su dios.»

¿No eres tú, Señor, desde antiguo mi santo Dios que no muere? ¿Lo has destinado para castigo, oh Roca, le has encomendado la sentencia? Tus ojos son demasiado puros para mirar el mal, no puedes contemplar la opresión. ¿Por qué contemplas en silencio a los bandidos, cuando el malvado devora al inocente? Tú tratas a los hombres como peces del mar, como reptiles que no tienen dueño: El invasor los saca a todos con el anzuelo, los apresa en la red, los reúne en su esparavel y después ríe de gozo; ofrece sacrificios al anzuelo, incienso a la red, porque con ellos cogió rica presa, comida abundante. ¿Seguirá vaciando sus redes, matando pueblos sin compasión?

Me pondré de centinela, me plantaré en la atalaya, velaré para escuchar lo que me dice, lo que responde a mis quejas. Y el Señor me respondió así:

«Escribe la visión, grábala en tablillas, de modo que se lea de corrido. La visión espera su momento, se acerca su término y no fallará; si tarda, espérala, porque ha de llegar sin falta. He aquí que sucumbe quien no tiene el alma recta, pero el justo vivirá por su fidelidad.»

RESPONSORIO Hb 10, 37-38. 39

R. Todavía un poco de tiempo, un poco nada más: y el que ha de venir vendrá y no tardará. * El justo vivirá por la fe.
V. Nosotros no somos de los que se vuelven atrás para su perdición, sino hombres de fe que vamos hacia la salvación de nuestras almas.
R. El justo vivirá por la fe.

SEGUNDA LECTURA

De los Sermones de san Bernardo, abad
(Sermón 5 sobre diversas materias, 1-4: Opera omnia, edición cisterciense, 6,1 [1970], 98-103)

ME PONDRÉ DE CENTINELA PARA ESCUCHAR LO QUE ME DICE EL SEÑOR

Leemos en el Evangelio que, predicando en cierta ocasión el Salvador y habiendo afirmado que daría a comer su carne sacramental para que así sus discípulos pudieran participar de su pasión, algunos exclamaron: ¡Duras son estas palabras! Y se alejaron de él. A vista de ello, preguntó el Señor a sus discípulos si también ellos querían dejarlo; ellos entonces respondieron: Señor, ¿a quién vamos a ir? Tú tienes palabras de vida eterna.

Pues bien, hermanos, es manifiesto que en nuestros días las palabras de Jesús son también espíritu y vida para algunos y, por ello, éstos lo siguen; pero, en cambio, a otros estas mismas palabras les parecen duras, por lo cual no faltan quienes van a buscar en otra parte un consuelo miserable. La sabiduría no deja de levantar su voz en las plazas, anunciando que el camino que conduce a la muerte es ancho y espacioso, a fin de que cuantos andan por él vuelvan sobre sus pasos.

Durante cuarenta años -dice- aquella generación me repugnó, y dije: «Es un pueblo de corazón extraviado.» Y en otro salmo añade: Una sola vez habló Dios; es cierto que Dios habló una sola vez, pues está hablando siempre, ya que su locución es continua y eterna, y nunca se interrumpe.

Esta voz invita sin cesar a los pecadores, exhortándoles a meditar en su corazón y reprendiendo los errores de este corazón, pues es la voz de aquel que habita en el corazón del hombre y habla en su interior, realizando así lo que ya dijo por boca del profeta: Hablad al corazón de Jerusalén.

Ya véis, hermanos, cuán saludablemente nos amonesta el profeta a fin de que si hoy escuchamos su voz no endurezcamos el corazón. Las palabras que leemos en el profeta son casi las mismas que hallamos también en el Evangelio. En efecto, en el Evangelio dice el Señor: Mis ovejas oyen mi voz, y en el salmo afirma el profeta: Nosotros, su pueblo (el del Señor, ciertamente), el rebaño que él guía, ojalá escuchemos hoy su voz y no endurezcamos el corazón.

Escucha, finalmente, al profeta Habacuc; él no disimula la increpación del Señor, sino que la medita asiduamente y por ello exclama: Me pondré de centinela, me plantaré en la atalaya, velaré para escuchar lo que me dice, lo que responde a mis quejas. Procuremos, hermanos, ponernos también nosotros de centinela, porque la vida presente es tiempo de lucha.

Que nuestra vida tenga su centro en nuestro interior, donde Cristo habita, y que nuestros actos sean reflexivos y nuestras obras según los dictados de la razón; pero de tal forma que no confiemos excesivamente en nuestros actos ni nos fiemos excesivamente de nuestras simples reflexiones.

RESPONSORIO Sal 17, 23; 18, 9; 1Jn 2, 5

R. Tuve presentes los mandamientos del Señor y no me aparté de sus preceptos. * Los mandatos del Señor son rectos y alegran el corazón; la norma del Señor es límpida y da luz a los ojos.
V. Quien guarda su palabra posee el perfecto amor de Dios.
R. Los mandatos del Señor son rectos y alegran el corazón; la norma del Señor es límpida y da luz a los ojos.

Miércoles, 23 de octubre de 2019
Evangelio
Lectura del santo evangelio según san Lucas (12,39-48):

En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: «Comprended que si supiera el dueño de casa a qué hora viene el ladrón, no le dejaría abrir un boquete. Lo mismo vosotros, estad preparados, porque a la hora que menos penséis viene el Hijo del hombre.»
Pedro le preguntó: «Señor, ¿has dicho esa parábola por nosotros o por todos?»
El Señor le respondió: « ¿Quién es el administrador fiel y solícito a quien el amo ha puesto al frente de su servidumbre para que les reparta la ración a sus horas? Dichoso el criado a quien su amo, al llegar, lo encuentre portándose así. Os aseguro que lo pondrá al frente de todos sus bienes. Pero si el empleado piensa: "Mi amo tarda en llegar", y empieza a pegarles a los mozos y a las muchachas, a comer y beber y emborracharse, llegará el amo de ese criado el día y a la hora que menos lo espera y lo despedirá, condenándolo a la pena de los que no son fieles. El criado que sabe lo que su amo quiere y no está dispuesto a ponerlo por obra recibirá muchos azotes; el que no lo sabe, pero hace algo digno de castigo, recibirá pocos. Al que mucho se le dio, mucho se le exigirá; al que mucho se le confió, más se le exigirá.»

Palabra del Señor


CÁNTICO EVANGÉLICO

Ant. 
Realiza, Señor, con nosotros la misericordia y recuerda tu santa alianza.

Cántico de Zacarías. EL MESÍAS Y SU PRECURSOR Lc 1, 68-79

Bendito sea el Señor, Dios de Israel,
porque ha visitado y redimido a su pueblo.
suscitándonos una fuerza de salvación
en la casa de David, su siervo,
según lo había predicho desde antiguo
por boca de sus santos profetas:

Es la salvación que nos libra de nuestros enemigos
y de la mano de todos los que nos odian;
ha realizado así la misericordia que tuvo con nuestros padres,
recordando su santa alianza
y el juramento que juró a nuestro padre Abraham.

Para concedernos que, libres de temor,
arrancados de la mano de los enemigos,
le sirvamos con santidad y justicia,
en su presencia, todos nuestros días.

Y a ti, niño, te llamarán Profeta del Altísimo,
porque irás delante del Señor
a preparar sus caminos,
anunciando a su pueblo la salvación,
el perdón de sus pecados.

Por la entrañable misericordia de nuestro Dios,
nos visitará el sol que nace de lo alto,
para iluminar a los que viven en tiniebla
y en sombra de muerte,
para guiar nuestros pasos
por el camino de la paz.

Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.
Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.

Ant. Realiza, Señor, con nosotros la misericordia y recuerda tu santa alianza.

PRECES

Demos gracias a Cristo y alabémoslo porque ha querido santificarnos y llamarnos hermanos suyos; digámosle, pues, confiados:

Santifica, Señor, a tus hermanos.

Concédenos, Señor, consagrar el principio de este día en honor de tu resurrección
y haz que todos los trabajos que realicemos durante esta jornada te sean agradables.

Haz que sepamos descubrirte a ti en todos nuestros hermanos,
sobre todo en los tristes, en los más pobres y en los que son menos útiles a los ojos del mundo.

Tú que para aumentar nuestra alegría y afianzar nuestra salvación nos das el nuevo dia, signo de tu amor,
renuévanos hoy y siempre para gloria de tu nombre.

Haz que durante este dia estemos en paz con todo el mundo
y que a nadie devolvamos mal por mal.

Se pueden añadir algunas intenciones libres

Tal como Cristo nos enseñó, terminemos nuestra oración diciendo:

Padre nuestro...

ORACION

Señor Dios, salvador nuestro, danos tu ayuda para que siempre deseemos las obras de la luz y realicemos la verdad: así, los que de ti hemos nacido en el bautismo, seremos tus testigos ante los hombres. Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo y es Dios, por los siglos de los siglos. Amén.

CONCLUSIÓN

V. 
El Señor nos bendiga, nos guarde de todo mal y nos lleve a la vida eterna.
R. Amén.

San Juan de Capistrano
23 de Octubre
Nace en Capistrano, pueblo de los Abruzzos, reino de Nápoles, el año 1386. Ingresa en la Orden franciscana a los treinta años de edad. Ocupa dos veces el cargo de vicario general de la Orden. Sucumbe a los estragos de la peste, en el campamento de los cruzados de Eslovenia, el 23 de octubre de 1456. Ha sido llamado, "El Santo de Europa".
1453 es un año clave en la Historia Universal y consta como tal en todos los manuales. Los turcos, capitaneados por el Sultán Mahomed II, tras un siglo de ocupación de tierra europea en los Balcanes, conquistan Constantinopla, afianzando así el imperio del Islam en el Asia Menor, sobre las ruinas del Oriente cristiano, y amenazando a toda la cristiandad de Occidente. Se presiente un trágico fin para la catolicidad medieval. Roma y los pueblos tiemblan ante la impotencia de los príncipes cristianos, divididos entre sí. Pero Dios, eterno Señor de la Historia, tiene preparados sus instrumentos: el Soldado, el Pontífice y el Santo. El caudillo húngaro Huniades, el Papa Calixto III, que sucede en la sede de Pedro a Nicolás V en el mismo año 1453, y Juan de Capistrano, fraile minovita, gran reformador de los pueblos cristianos y de sus hermanos religiosos.
La actividad apostólica de Juan se inicia paralelamente a los principios del siglo xv, el siglo del difícil tránsito entre dos edades tan distintas de la historia humana. Quedaban atrás en su vida las solicitudes por lo terreno, lo falaz. Tomó parte en conjuraciones políticas y, derrotado, había sido hecho prisionero, encerrado en unos sótanos inmundos, de los que creyó imposible salir con vida. Allí, encadenado a un poste, rodeado de ratas, con el agua hasta las rodillas, desengañado, reza a San Francisco y hace voto de entrar en su Orden. El voto le salva, y la ciudad de Perusa, donde cursaba sus estudios de jurisconsulto, es testigo de su conversión total, hasta espectacular en su externidad.
Corría el año 1416. Ya franciscano, el de Capistrano se entrega en cuerpo y alma a la reforma espiritual del pueblo cristiano por medio de la predicación popular. Sigue las huellas y las enseñanzas de su hermano en religión, el gran San Bernardino de Siena. Lleva su mismo gorro e invocándole hará sus maravillosas curaciones. Va de pueblo en pueblo, acompañado de cuarenta caballeros, reúne a las multitudes en las plazas, pues no caben en los templos, y llega alguna vez a reunir el número de 20 000 oyentes. Así predica a Jesús, pero más con su figura que con las palabras. Pequeño, enjuto, apenas piel y huesos, vista corta, gesto austero, mas a la vez dulce y caritativo, semblante encendido, además sobrio y cálido. Aunque predicaba casi siempre en latín, sus oyentes no daban tiempo al intérprete y pedían a gritos confesión, prometiendo cambiar de vida, encendiendo hogueras con los objetos de sus pecados: dados, naipes, afeites, etc. Su característica era despertar vocaciones religiosas entre la juventud: en Leipzig 120 estudiantes siguen sus huellas, en Cracovia 130. Acabamos de nombrar dos ciudades no italianas, y es que lo extraordinario de la predicación de Juan de Capistrano, aquello en que supera a sus hermanos franciscanos misioneros como él, es su universalidad europea. En veinte años misiona por Alemania, Austria, Hungría, Polonia, Moravia y hasta por Saboya, Borgoña y Flandes. Ésta fue su lenta pero fundamental cooperación al mantenimiento de la unidad católica europea en el siglo XV.
Poseía dotes extraordinarias para la diplomacia. Trabajó en unir entre sí a los príncipes, recibió importantes misiones de cuatro Papas consecutivos, impugnó la naciente herejía husita, se relacionó con los griegos para tratar su unión con la Iglesia Romana, intervino en contener los perniciosos efectos del cisma de Basilea. Extendió la reforma de los "observantes" por los conventos de toda Europa, fundando muchos de ellos en Alemania.
Mas la ocasión culminante de su vida de "Santo de Europa" fue la Cruzada contra el turco, que empieza a predicar en el año 1453. El Papa Calixto III, español, de la familia Borja, le anima y le concede facultades omnímodas. Los príncipes cristianos no responden al llamamiento del Papa. El Papa nombra al cardenal español Juan de Carvajal su legado en Hungría. El mismo rey de Hungría huye, y tiene que ser Juan de Capistrano quien recluta a los campesinos húngaros para la Cruzada. Llegan a juntar a 7 000 cruzados. Mahomed ataca con 150 000 hombres y 300 cañones. Capistrano ha improvisado unos estandartes con la cruz y las figuras de San Francisco, San Antonio y San Bernardino. Anima a todos a la lucha al conjuro del nombre de Jesús, hace desistir a Huniades de su propósito de huir en retirada. Belgrado está rodeado por los turcos, y, contra toda previsión, los cruzados, animados por Capistrano desde la orilla, con la cruz, obtienen una victoria completa.
A los pocos días Mahomed vuelve al asalto con toda la rabia del león herido. Juan corre por las murallas, cuando la infantería turca escala el foso, y grita a los valientes húngaros que en sus manos está la cristiandad. Alzaba sus brazos a Dios, clamando misericordia por Europa. La derrota del turco fue completa.
Más admirable que la victoria en las armas, fue la victoria en los espíritus, que obtuvo Juan, convirtiendo a los cruzados en novicios. A diario celebraban misa él y sus frailes, y muchos soldados comulgaban. Políticamente no tuvo grandes consecuencias la victoria de Belgrado, pero quedaba el valor ejemplar de la conducta de un Santo, entregado a la defensa de la cristiandad.
Una peste declarada en el campamento de los cruzados acabará con la vida, ya agotada, de aquel campeón. El mensaje de Juan de Capistrano quedaba escrito en la Historia.

LAS LECTURAS DEL MIÉRCOLES 23 DE OCTUBRE 2019


Lecturas del Tiempo Ordinario. Ciclo C.
Miércoles, 23 de octubre de 2019
Primera lectura
Lectura de la carta del apóstol san Pablo a los romanos (6,12-18):

Que el pecado no siga dominando vuestro cuerpo mortal, ni seáis súbditos de los deseos del cuerpo. No pongáis vuestros miembros al servicio del pecado, como instrumentos para la injusticia; ofreceos a Dios como hombres que de la muerte han vuelto a la vida, y poned a su servicio vuestros miembros, como instrumentos para la justicia. Porque el pecado no os dominará: ya no estáis bajo la Ley, sino bajo la gracia. Pues, ¿qué? ¿Pecaremos porque no estamos bajo la Ley, sino bajo la gracia? ¡De ningún modo! ¿No sabéis que, al ofreceros a alguno como esclavos para obedecerle, os hacéis esclavos de aquel a quien obedecéis: bien del pecado, para la muerte, bien de la obediencia, para la justicia? Pero, gracias a Dios, vosotros, que erais esclavos del pecado, habéis obedecido de corazón a aquel modelo de doctrina al que fuisteis entregados y, liberados del pecado, os habéis hecho esclavos de la justicia.

Palabra de Dios

Miércoles, 23 de octubre de 2019
Salmo
Sal 123,1-3.4-6.7-8

R/.
 Nuestro auxilio es el nombre del Señor

Si el Señor no hubiera estado de nuestra parte
–que lo diga Israel–,
si el Señor no hubiera estado de nuestra parte,
cuando nos asaltaban los hombres,
nos habrían tragado vivos:
tanto ardía su ira contra nosotros. R/.

R/. Nuestro auxilio es el nombre del Señor

Nos habrían arrollado las aguas,
llegándonos el torrente hasta el cuello;
nos habrían llegado hasta el cuello las aguas espumantes.
Bendito el Señor, que no nos entregó en presa a sus dientes. R/.

R/. Nuestro auxilio es el nombre del Señor

Hemos salvado la vida,
como un pájaro de la trampa del cazador;
la trampa se rompió, y escapamos.
Nuestro auxilio es el nombre del Señor,
que hizo el cielo y la tierra. R/.

R/. Nuestro auxilio es el nombre del Señor

Miércoles, 23 de octubre de 2019
Evangelio
Lectura del santo evangelio según san Lucas (12,39-48):

En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: «Comprended que si supiera el dueño de casa a qué hora viene el ladrón, no le dejaría abrir un boquete. Lo mismo vosotros, estad preparados, porque a la hora que menos penséis viene el Hijo del hombre.»
Pedro le preguntó: «Señor, ¿has dicho esa parábola por nosotros o por todos?»
El Señor le respondió: « ¿Quién es el administrador fiel y solícito a quien el amo ha puesto al frente de su servidumbre para que les reparta la ración a sus horas? Dichoso el criado a quien su amo, al llegar, lo encuentre portándose así. Os aseguro que lo pondrá al frente de todos sus bienes. Pero si el empleado piensa: "Mi amo tarda en llegar", y empieza a pegarles a los mozos y a las muchachas, a comer y beber y emborracharse, llegará el amo de ese criado el día y a la hora que menos lo espera y lo despedirá, condenándolo a la pena de los que no son fieles. El criado que sabe lo que su amo quiere y no está dispuesto a ponerlo por obra recibirá muchos azotes; el que no lo sabe, pero hace algo digno de castigo, recibirá pocos. Al que mucho se le dio, mucho se le exigirá; al que mucho se le confió, más se le exigirá.»

Palabra del Señor