Musica Para el Alma
lunes, 12 de julio de 2021
EVANGELIO DE MATEO 11,20-24 CICLO B
*Lecturas del Martes de la 15ª semana del Tiempo Ordinario*
Martes, 13 de julio de 2021
Evangelio
*Lectura
del santo evangelio según san Mateo (11,20-24)*
En aquel tiempo, se puso Jesús a recriminar a las ciudades donde había hecho
casi todos sus milagros, porque no se habían convertido: «¡Ay de ti, Corozaín,
ay de ti, Betsaida! Si en Tiro y en Sidón se hubieran hecho los milagros que en
vosotras, hace tiempo que se habrían convertido, cubiertas de sayal y ceniza.
Os digo que el día del juicio les será más llevadero a Tiro y a Sidón que a
vosotras. Y tú, Cafarnaún, ¿piensas escalar el cielo? Bajarás al infierno.
Porque si en Sodoma se hubieran hecho los milagros que en ti, habría durado
hasta hoy. Os digo que el día del juicio le será más llevadero a Sodoma que a
ti.»
Palabra del Señor
*(Porque si en Sodoma se hubieran hecho los milagros que se han hecho en
ti, aún subsistiría el día de hoy)*
*Levantarme, respirar, ver la luz
del sol, es un milagro, pero estoy tan acostumbrado, que no me fijo que cada
día tiene un color totalmente diferente, y eso es un milagro, la vida es un
milagro, una sonrisa sincera, sin malicia es un milagro. Son innumerables las
cosas buenas, que está haciendo el Señor en mí. Más lo que a él le
interesa, es que me entere que el mayor milagro, es sentir que Dios me ama como
soy, pero no para dejarme como soy, sino para convertirme en algo mucho
mejor*.
*El que desea y
quiere amar, con el corazón según el Señor: llegará a ser, Santo*
V. El Señor
nos bendiga, nos guarde de todo mal y nos lleve a la vida eterna.
R. Amén.
LAS LAUDES Y LAS VÍSPERAS DEL MARTES 13. SANTA TERESA DE JESÚS DE LOS ANDES
*LAS LAUDES Y LAS VISPERAS*
Abre,
Señor, mi boca para bendecir tu santo nombre; limpia mi corazón de todos los
pensamientos vanos, perversos y ajenos; ilumina mi entendimiento y enciende mi
sentimiento para que, digna, atenta y devotamente pueda recitar este Oficio, y
merezca ser escuchado en la presencia de tu divina majestad. Por Cristo nuestro
Señor. Amén
*Santa Teresa de Jesús
de los Andes*
13 de Julio
TIEMPO
ORDINARIO
MARTES
DE LA SEMANA III
De la Feria. Salterio III
LAUDES
(Oración de la mañana)
INVITATORIO
V. Señor abre mis labios
R. Y mi boca proclamará tu alabanza
Ant. Al Señor, al gran Rey, venid, adorémosle.
Salmo 94 INVITACIÓN A LA ALABANZA DIVINA
Venid, aclamemos al Señor,
demos vítores a la Roca que nos salva;
entremos a su presencia dándole gracias,
aclamándolo con cantos.
Porque el Señor es un Dios grande,
soberano de todos los dioses:
tiene en su mano las simas de la tierra,
son suyas las cumbres de los montes;
suyo es el mar, porque él lo hizo,
la tierra firme que modelaron sus manos.
Venid, postrémonos por tierra,
bendiciendo al Señor, creador nuestro.
Porque él es nuestro Dios,
y nosotros su pueblo,
el rebaño que él guía.
Ojalá escuchéis hoy su voz:
«No endurezcáis el corazón como en Meribá,
como el día de Masá en el desierto;
cuando vuestros padres me pusieron a prueba
y dudaron de mí, aunque habían visto mis obras.
Durante cuarenta años
aquella generación me repugnó, y dije:
Es un pueblo de corazón extraviado,
que no reconoce mi camino;
por eso he jurado en mi cólera
que no entrarán en mi descanso»
Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.
Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.
Ant. Al Señor, al gran Rey, venid, adorémosle.
Himno: GRACIAS, SEÑOR POR EL DÍA
Gracias, Señor, por el día,
por tu mensaje de amor
que nos das en cada flor;
por esta luz de alegría,
te doy las gracias, Señor.
Gracias, Señor, por la espina
que encontraré en el sendero,
donde marcho pregonero
de tu esperanza divina;
gracias, por ser compañero.
Gracias, Señor, porque dejas
que abrase tu amor mi ser,
porque haces aparecer
tus flores a mis abejas,
tan sedientas de beber.
Gracias por este camino,
donde caigo y me levanto,
donde te entrego mi canto
mientras marcho peregrino,
Señor, a tu monte santo.
Gracias, Señor, por la luz
que ilumina mi existir;
por este dulce dormir
que me devuelve a tu cruz.
¡Gracias, Señor, por vivir! Amén.
SALMODIA
Ant 1. Señor, has sido bueno con tu tierra, has perdonado la culpa de tu
pueblo.
Salmo 84 - NUESTRA SALVACIÓN ESTA CERCA
Señor, has sido bueno con tu tierra,
has restaurado la suerte de Jacob,
has perdonado la culpa de tu pueblo,
has sepultado todos sus pecados,
has reprimido tu cólera,
has frenado el incendio de tu ira.
Restáuranos, Dios salvador nuestro;
cesa en tu rencor contra nosotros.
¿Vas a estar siempre enojado,
o a prolongar tu ira de edad en edad?
¿No vas a devolvernos la vida,
para que tu pueblo se alegre contigo?
Muéstranos, Señor, tu misericordia
y danos tu salvación.
Voy a escuchar lo que dice el Señor:
«Dios anuncia la paz
a su pueblo y a sus amigos
y a los que se convierten de corazón.»
La salvación está ya cerca de sus fieles,
y la gloria habitará en nuestra tierra;
la misericordia y la fidelidad se encuentran,
la justicia y la paz se besan;
la fidelidad brota de la tierra,
y la justicia mira desde el cielo;
el Señor dará la lluvia,
y nuestra tierra dará su fruto.
La justicia marchará ante él,
la salvación seguirá sus pasos.
Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.
Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.
Ant. Señor, has sido bueno con tu tierra, has perdonado la culpa de tu
pueblo.
Ant 2. Mi alma te ansía de noche, Señor; mi espíritu madruga por ti.
Cántico: HIMNO DESPUÉS DE LA VICTORIA SOBRE EL ENEMIGO Is 26, 1-4.
7-9. 12
Tenemos una ciudad fuerte,
ha puesto para salvarla murallas y baluartes:
Abrid las puertas para que entre un pueblo justo,
que observa la lealtad;
su ánimo está firme y mantiene la paz,
porque confía en ti.
Confiad siempre en el Señor,
porque el Señor es la Roca perpetua:
La senda del justo es recta.
Tú allanas el sendero del justo;
en la senda de tus juicios, Señor, te esperamos,
ansiando tu nombre y tu recuerdo.
Mi alma te ansía de noche,
mi espíritu en mi interior madruga por ti,
porque tus juicios son luz de la tierra,
y aprenden justicia los habitantes del orbe.
Señor, tú nos darás la paz,
porque todas nuestras empresas
nos las realizas tú.
Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.
Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.
Ant. Mi alma te ansía de noche, Señor; mi espíritu madruga por ti.
Ant 3. Ilumina, Señor, tu rostro sobre nosotros.
Salmo 66 - QUE TODOS LOS PUEBLOS ALABEN AL SEÑOR.
El Señor tenga piedad y nos bendiga,
ilumine su rostro sobre nosotros;
conozca la tierra tus caminos,
todos los pueblos tu salvación.
¡Oh Dios!, que te alaben los pueblos,
que todos los pueblos te alaben.
Que canten de alegría las naciones,
porque riges el mundo con justicia,
riges los pueblos con rectitud
y gobiernas las naciones de la tierra.
¡Oh Dios!, que te alaben los pueblos,
que todos los pueblos te alaben.
La tierra ha dado su fruto,
nos bendice el Señor, nuestro Dios.
Que Dios nos bendiga; que le teman
hasta los confines del orbe.
Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.
Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.
Ant. Ilumina, Señor, tu rostro sobre nosotros.
LECTURA BREVE 1Jn 4, 14-15
Nosotros hemos visto y damos testimonio de que el Padre envió a su Hijo para
ser Salvador del mundo. Quien confiese que Jesús es el Hijo de Dios, Dios
permanece en él y él en Dios.
RESPONSORIO BREVE
V. Dios mío, mi escudo y peña en que me amparo.
R. Dios mío, mi escudo y peña en que me amparo.
V. Mi alcázar, mi libertador.
R. En que me amparo.
V. Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.
R. Dios mío, mi escudo y peña en que me amparo.
Primera Lectura
Del segundo libro de Samuel 4, 2-5, 7
DAVID REINA SOBRE TODO ISRAEL. TOMA DE JERUSALÉN
En aquellos días, estaban con Isbaal, hijo de Saúl, dos hombres,
jefes de banda, uno llamado Baaná y el otro Rekab, hijos de Rimmón de Beerot,
benjaminitas, porque también Beerot se consideraba de Benjamín. Los habitantes
de Beerot habían huido a Guittáyim, donde se han quedado hasta el día de hoy
como forasteros residentes.
Tenía Jonatán, hijo de Saúl, un hijo tullido de pies. Tenía cinco años cuando
llegó de Yizreel la noticia de lo de Saúl y Jonatán; su nodriza lo tomó y huyó
con él, pero con la precipitación de la huida, se le cayó y quedó cojo. Se
llamaba Meribaal. Rekab y Baaná, hijos de Rimmón de Beerot, se pusieron en
camino y llegaron a casa de Isbaal a la hora de más calor del día, cuando
dormía la siesta. Entraron en la casa. La portera se había dormido mientras
limpiaba el trigo. Rekab y su hermano Baaná se deslizaron cautelosamente y
entraron en la casa. Estaba Isbaal durmiendo en su lecho, en su recámara; lo
hirieron y lo mataron. Luego le cortaron la cabeza, la tomaron y caminaron toda
la noche por la ruta de la Araba. Llevaron la cabeza de Isbaal a David, a
Hebrón, y le dijeron: «Aquí tienes la cabeza de Isbaal, hijo de Saúl, tu enemigo,
el que buscó tu muerte. Hoy ha concedido Dios a mi señor, el rey, venganza
sobre Saúl y sobre su descendencia.» Respondió David a Rekab y a su hermano Baaná,
hijos de Rimmón de Beerot: «¡Vive el Señor, que ha librado mi alma de toda angustia!
Si al que me anunció la muerte de Saúl, creyendo que me daba una buena noticia,
lo prendí y ordené matarlo en Siquelag, dándole este pago por su noticia,
¿cuánto más ahora que hombres malvados han dado muerte a un hombre justo en su
casa, sobre su lecho? ¿No deberé pediros cuenta de su sangre y exterminaros de
la tierra?» Y David dio una orden a sus servidores, que los mataron, les
cortaron las manos y los pies y los colgaron junto a la piscina de Hebrón. La cabeza
de Isbaal la tomaron y la sepultaron en el sepulcro de Abner en Hebrón.
Entonces vinieron todas las tribus de Israel hacia David en Hebrón y le
dijeron: «Hueso tuyo y carne tuya somos nosotros. Ya de antes, cuando Saúl era
nuestro rey, eras tú el que dirigías las entradas y salidas de Israel. El Señor
te ha dicho: "Tú apacentarás a mi pueblo Israel, tú serás caudillo de
Israel."»
Vinieron, pues, todos los ancianos de Israel a Hebrón y el rey David hizo ahí
un pacto con ellos ante el Señor, y ungieron a David como rey de Israel.
Treinta años tenía cuando comenzó a reinar y reinó cuarenta años. Reinó en
Hebrón sobre Judá siete años y seis meses. Reinó en Jerusalén sobre todo Israel
y sobre Judá treinta y tres años.
Marchó el rey sobre Jerusalén con todos sus hombres contra los yebuseos, que habitaban
aquella tierra. Dijeron éstos a David:
«No entrarás aquí, porque hasta los ciegos y cojos bastan para rechazarte.»
Querían decir: «No entrará David aquí.»
Pero David conquistó la fortaleza de Sión, que es la ciudad de David.
Responsorio Sal 2, 2. 6. 1
R. Se alían los reyes de la tierra, los príncipes conspiran
contra el Señor y contra su Mesías. * Pero yo mismo he establecido
a mi Rey en Sión, mi monte santo.
V. ¿Por qué se amotinan las naciones, y los pueblos planean un
fracaso?
R. Pero yo mismo he establecido a mi Rey en Sión, mi monte
santo.
Segunda Lectura
Del tratado de san Ambrosio, obispo, sobre los misterios
(Núms. 12-16. 19: SC 25 bis, 162-164)
TODO LES SUCEDÍA COMO UN EJEMPLO
Te enseña el Apóstol que nuestros padres estuvieron todos bajo la
nube, y todos atravesaron el mar y todos fueron bautizados en Moisés por la
nube y el mar. Y en el cántico de Moisés leemos: Sopló tu aliento y los cubrió
el mar. Te das cuenta de que el paso del mar Rojo por los hebreos era ya una
figura del santo bautismo, ya que en él murieron los egipcios y escaparon los
hebreos. Esto mismo nos enseña cada día este sacramento, a saber, que en él
queda sumergido el pecado y destruido el error, y en cambio la piedad y la
inocencia lo atraviesan indemnes.
Oyes cómo nuestros padres estuvieron bajo la nube, y una nube ciertamente beneficiosa,
ya que refrigeraba los ardores de las pasiones carnales; la nube que los cubría
era el Espíritu Santo. Él vino después sobre la Virgen María, y la virtud del
Altísimo la cubrió con su sombra, cuando engendró al Redentor del género
humano. Y aquel milagro en tiempo de Moisés aconteció en figura. Si, pues, en
la figura estaba el Espíritu, ¿no estará en la verdad, siendo así que la
Escritura te enseña que la ley se dio por medio de Moisés, la gracia y la
verdad vinieron por medio de Jesucristo? El agua de Mara era amarga, pero
Moisés echó en ella un madero y se volvió dulce. De modo semejante, el agua,
sin la proclamación de la cruz del Señor, no sirve en absoluto para la
salvación; pero cuando ha sido consagrada por el misterio de la cruz salvadora,
entonces se vuelve apta para el baño espiritual y para la bebida saludable.
Pues del mismo modo que Moisés, el profeta, echó un madero en aquella agua, así
ahora el sacerdote echa en ésta la proclamación de la cruz del Señor y el agua
se vuelve dulce para la gracia.
No creas, pues, solamente lo que ven tus ojos corporales; más segura es la
visión de lo invisible, porque lo que se ve es temporal, lo que no se ve eterno.
La visión interna de la mente es superior a la mera visión ocular.
Finalmente, aprende lo que te enseña una lectura del libro de los Reyes. Naamán
era sirio y estaba leproso, sin que nadie pudiera curarlo. Entonces, una
jovencita de entre los cautivos explicó que en Israel había un profeta que
podía limpiarlo de la infección de la lepra. Naamán, habiendo tomado oro y
plata, se fue a ver al rey de Israel. Éste, al saber el motivo de su venida,
rasgó sus vestiduras, diciendo que le buscaban querella al pedirle una cosa que
no estaba en su regio poder. Pero Eliseo mandó decir al rey que le enviase al sirio,
para que supiera que había un Dios en Israel. Y, cuando vino a él, le mandó que
se sumergiera siete veces en el río Jordán. Entonces Naamán empezó a decirse a
sí mismo que eran mejores las aguas de los ríos de su patria, en los cuales se
había bañado muchas veces sin que lo hubiesen limpiado de su lepra, y se marchaba
de allí sin hacer lo que le había dicho el profeta. Pero sus siervos lo
persuadieron por fin y se bañó, y, al verse curado, entendió al momento que lo
que purifica no es el agua sino el don de Dios.
Él dudó antes de ser curado; pero tú, que ya estás curado, no debes dudar.
Responsorio Sal 77, 52. 53; 1 Co
10, 2
R. Sacó el Señor como un rebaño a su pueblo, los condujo
seguros, sin alarmas; * mientras el mar cubría a sus
enemigos.
V. Todos fueron bautizados en Moisés por la nube y el mar.
R. Mientras el mar cubría a sus enemigos.
*Lecturas del Martes de la 15ª semana del Tiempo Ordinario*
Martes, 13 de julio de 2021
Evangelio
*Lectura
del santo evangelio según san Mateo (11,20-24)*
En aquel tiempo, se puso Jesús a recriminar a las ciudades donde había hecho
casi todos sus milagros, porque no se habían convertido: «¡Ay de ti, Corozaín,
ay de ti, Betsaida! Si en Tiro y en Sidón se hubieran hecho los milagros que en
vosotras, hace tiempo que se habrían convertido, cubiertas de sayal y ceniza.
Os digo que el día del juicio les será más llevadero a Tiro y a Sidón que a
vosotras. Y tú, Cafarnaún, ¿piensas escalar el cielo? Bajarás al infierno.
Porque si en Sodoma se hubieran hecho los milagros que en ti, habría durado
hasta hoy. Os digo que el día del juicio le será más llevadero a Sodoma que a
ti.»
Palabra del Señor
CÁNTICO EVANGÉLICO
Ant. Nos ha suscitado el Señor una fuerza de salvación, según lo había
predicho por boca de sus santos profetas.
Cántico de Zacarías. EL MESÍAS Y SU PRECURSOR
Lc 1, 68-79
Bendito sea el Señor, Dios de Israel,
porque ha visitado y redimido a su pueblo.
suscitándonos una fuerza de salvación
en la casa de David, su siervo,
según lo había predicho desde antiguo
por boca de sus santos profetas:
Es la salvación que nos libra de nuestros enemigos
y de la mano de todos los que nos odian;
ha realizado así la misericordia que tuvo con nuestros padres,
recordando su santa alianza
y el juramento que juró a nuestro padre Abraham.
Para concedernos que, libres de temor,
arrancados de la mano de los enemigos,
le sirvamos con santidad y justicia,
en su presencia, todos nuestros días.
Y a ti, niño, te llamarán Profeta del Altísimo,
porque irás delante del Señor
a preparar sus caminos,
anunciando a su pueblo la salvación,
el perdón de sus pecados.
Por la entrañable misericordia de nuestro Dios,
nos visitará el sol que nace de lo alto,
para iluminar a los que viven en tiniebla
y en sombra de muerte,
para guiar nuestros pasos
por el camino de la paz.
Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.
Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.
Ant. Nos ha suscitado el Señor una fuerza de salvación, según lo había
predicho por boca de sus santos profetas.
PRECES
Adoremos a Cristo, que con su sangre ha adquirido el pueblo de la
nueva alianza, y digámosle suplicantes:
Acuérdate, Señor, de tu pueblo.
Rey y redentor nuestro, escucha la alabanza que te dirige tu Iglesia en el
comienzo de este día,
y haz que no deje nunca de glorificarte.
Que nunca, Señor, quedemos confundidos
los que en ti ponemos nuestra fe y nuestra esperanza.
Mira compasivo nuestra debilidad y ven en ayuda nuestra,
ya que sin ti nada podemos hacer.
Acuérdate de los pobres y desvalidos;
que este día que comienza les traiga solaz y alegría.
Se pueden añadir algunas intenciones libres
Ya que deseamos que la luz de Cristo ilumine a todos los hombres, pidamos al
Padre que a todos llegue el reino de su Hijo:
Padre nuestro...
ORACION
Dios todopoderoso, de quien dimana la bondad y hermosura de todo
lo creado; haz que comencemos este día con ánimo alegre, y que realicemos
nuestras obras movidos por el amor a ti y a los hermanos. Por nuestro Señor
Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina contigo en la unidad del Espíritu Santo y
es Dios, por los siglos de los siglos. Amén.
CONCLUSIÓN
V. El Señor nos bendiga, nos guarde de todo mal y nos lleve a la vida
eterna.
R. Amén.
*Santa Teresa de Jesús de los Andes*
Virgen, Carmelita Descalza Primera Santa chilena
La joven que hoy es glorificada en la Iglesia con el título de
Santa, es un profeta de Dios para los hombres y mujeres de nuestro tiempo.
TERESA DE JESUS DE LOS ANDES, con el ejemplo de su vida, pone ante
nuestros ojos el evangelio de Cristo, encarnado y llevado a la práctica hasta
las últimas exigencias.
Ella es para la humanidad una prueba indiscutible de que la
llamada de Cristo a ser santos, es actual, posible y verdadera.
Ella se levanta ante nuestros ojos para demostrar que la
radicalidad del seguimiento de Cristo es lo único que vale la pena y lo único
que hace feliz al hombre.
Teresa de Los Andes, con el lenguaje de su intensa vida, nos
confirma que Dios existe, que Dios es amor y alegría, que El es nuestra
plenitud.
Nació en Santiago de Chile el 13 de julio de 1900. En la pila
bautismal fue llamada Juana Enriqueta Josefina de los Sagrados Corazones
Fernández Solar. Familiarmente se la conocía, y todavía se la conoce hoy, con
el nombre de Juanita.
Su niñez se desarrolló normalmente en el seno familiar: sus
padres, don Miguel Fernández y Lucía Solar; sus tres hermanos y dos hermanas;
el abuelo materno, tíos, tías y primos.
La familia gozaba de muy buena posición económica y conservaba
fielmente la fe cristiana, viviéndola con sinceridad y constancia.
Juana recibió su formación escolar en el colegio de las monjas
francesas del Sagrado Corazón. Entre la vida estudiantil y la vida familiar se
desarrolló su corta e intensa historia. A los catorce años de edad, inspirada
por Dios, decidió consagrarse a El como religiosa, en concreto, como carmelita
descalza.
Su deseo se realizó el 7 de mayo de 1919, cuando ingresó en el
pequeño monasterio del Espíritu Santo en el pueblo de Los Andes, a unos 90 kms.
de Santiago.
El 14 de octubre de ese mismo año vistió el hábito de carmelita,
iniciando así su noviciado con el nombre de Teresa de Jesús. Sabía desde mucho
antes que moriría joven. Más aún, el Señor se lo había revelado, pues ella
misma lo comunicó a su confesor un mes antes de su partida.
Asumió esa realidad con alegría, serenidad y confianza. Segura de
que continuaría en la eternidad su misión de hacer conocer y amar a Dios.
Después de muchas tribulaciones interiores e indecibles
padecimientos físicos, causados por un violento ataque de tifus que acabó con
su vida, pasó de este mundo al Padre al atardecer del 12 de abril de 1920.
Había recibido con sumo fervor los santos sacramentos de la Iglesia y el 7 de
abril había hecho la profesión religiosa en el artículo de la muerte. Aún le
faltaban 3 meses para cumplir los 20 años de edad y 6 meses para acabar su
noviciado canónico y poder emitir jurídicamente su profesión religiosa. Murió
como novicia carmelita descalza.
Esa es toda la trayectoria externa de esta joven santiaguina.
Desconcierta, y crece en nosotros el gran interrogante: ¿y qué hizo? Para tal
pregunta hay una respuesta igualmente desconcertante: Vivir, creer, amar.
Cuando los discípulos preguntaron a Jesús qué debían hacer para
vivir según Dios quiere, El respondió: "La obra de Dios es que creáis en
quien El ha enviado" (Jn. 6, 28-29). Por lo tanto, para conocer el valor
de la vida de Juanita, es necesario mirar hacia dentro, donde está el Reino de
Dios.
Ella despertó a la vida de la gracia siendo todavía muy niñita.
Asegura que a los seis años atraída por Dios empezó a volcar su afectividad
totalmente en El.
"Cuando vino el terremoto de 1906, al poco tiempo fue cuando
Jesús principió a tomar mi corazón para sí" (Diario, n. 3, p. 26). Juanita
poseyó una enorme capacidad de amar y ser amada junto con una extraordinaria
inteligencia. Dios le hizo experimentar su presencia, la cautivó con su
conocimiento y la hizo suya a través de las exigencias de la cruz.
Conociéndolo, lo amó; y amándolo se entregó a El con radicalidad.
Desde niña comprendió que el amor se demuestra con obras más que
con palabras, por eso lo tradujo en todos los actos de su vida, empezando por
la raíz. Se miró con ojos sinceros y sabios y comprendió que para ser de Dios
era necesario morir a sí misma y a todo lo que no fuera El.
Su naturaleza era totalmente contraria a la exigencia evangélica:
orgullosa, egoísta, terca, con todos los defectos que esto supone. Como nos
sucede a todos. Pero lo que ella hizo, a diferencia nuestra, fue librar batalla
encarnizada contra todo impulso que no naciera del amor.
A los 10 años era una persona nueva. La motivación inmediata fue
el Sacramento de la Eucaristía que iba a recibir. Comprendiendo que nada menos
que Dios iba a morar dentro de ella, trabajó en adquirir todas las virtudes que
la harían menos indigna de esta gracia, consiguiendo en poquísimo tiempo
transformar su carácter por completo.
En la celebración de este sacramento recibió de Dios gracias
místicas de locuciones interiores que luego se mantuvieron a lo largo de su
vida. La inclinación natural hacia Dios, desde ese día se transformó en
amistad, en vida de oración.
Cuatro años más tarde recibió interiormente la revelación que
determinó la orientación de su vida: Jesucristo le dijo que la quería carmelita
y que su meta debía ser la santidad.
Con la abundante gracia de Dios y con la generosidad de joven
enamorada se dio a la oración, a la adquisición de las virtudes y a la práctica
de la vida según el evangelio, de tal modo que en cortos años llegó a un alto
grado de unión con Dios.
Cristo fue su ideal, su único ideal. Se enamoró de El, y fue
consecuente hasta crucificarse en cada minuto por El. La invadió el amor
esponsal y, por tanto, el deseo de unirse plenamente al que la había cautivado.
Por eso a los 15 años hizo el voto de virginidad por 9 días, renovándolo
después continuamente.
La santidad de su vida resplandeció en los actos de cada día en
los ambientes donde se desarrolló su vida: la familia, el colegio, las amigas,
los inquilinos con quienes compartía sus vacaciones y a quienes, con celo
apostólico, catequizó y ayudó.
Siendo una joven igual a sus amigas, éstas la sabían distinta. La
tomaron por modelo, apoyo y consejera. Juanita sufrió y gozó intensamente, en
Dios, todas las penas y alegrías con que se encuentra el hombre.
Jovial, alegre, simpática, atractiva, deportista, comunicativa. En
los años de su adolescencia alcanzó el perfecto equilibrio síquico y
espiritual, fruto de su ascesis y de su oración. La serenidad de su rostro era
reflejo de Aquel que en ella vivía.
Su vida monacal desde el 7 de mayo de 1919 hasta su muerte fue el
último peldaño de su ascensión a la cumbre de la santidad. Sólo once meses
fueron suficientes para consumar su vida totalmente cristificada.
Muy pronto la comunidad descubrió en ella un paso de Dios por su
historia. En el estilo de vida carmelitano-teresiano, la joven encontró
plenamente el cauce para derramar más eficazmente el torrente de vida que ella
quería dar a la Iglesia de Cristo. Era el estilo de vida que, a su modo, había
vivido entre los suyos, y para el cual había nacido. La Orden de la Virgen
María del Monte Carmelo colmó los deseos de Juanita al comprobar que la Madre
de Dios, a quien amó desde niña, la había traído a formar parte de ella.
Fue beatificada en Santiago de Chile por Su Santidad Juan Pablo
II, el día 3 de abril de 1987. Ha sido solemnemente canonizada por el mismo
Sumo Pontífice en Roma el 21 de marzo de 1993.
Sus restos son venerados en el Santuario de Auco-Rinconada de Los
Andes por miles de peregrinos que buscan y encuentran en ella el consuelo, la
luz y el camino recto hacia Dios.
SANTA TERESA DE JESÚS DE LOS ANDES es la primera Santa chilena, la
primera Santa carmelita descalza fuera de las fronteras de Europa y la cuarta
Santa Teresa del Carmelo tras las Santas Teresas de Avila, de Florencia y de
Lisieux.
Sus Milagros El Bombero Resucitado
El día 4 de diciembre de 1983, el voluntario de la Sexta Compañía
de Bomberos de Santiago, Héctor Uribe Carrasco, cae desde una techumbre durante
un incendio. Sufre un golpe eléctrico de un cable de 380 voltios, quedando
completamente inconsciente y según decían los médicos, con un edema pulmonar,
un edema cerebral y ninguna posibilidad de vida, pues estaba clínicamente
muerto.
Ante esta angustiosa situación, su madre, Señora Olga Carrasco de
La Vega, aconsejada por un voluntario amigo del accidentado, decidió ir hasta
la Cripta de Sor Teresa, para implorar por la vida de su hijo. La súplica la
hizo en la Capilla, acompañada de varios voluntarios y amigos de Héctor, el día
7 de diciembre, es decir, 3 días después del accidente.
Según testimonio de la mamá y de los amigos, desde entonces empezó
a dar señal de recuperación hasta quedar totalmente restablecido.
Los médicos están sorprendidos. El joven vive. Es un resucitado a
instancias de Teresita.
Los antecedentes del caso son enviados a Roma. De miles de
milagros y favores concedidos y adjudicados a la intercesión de Sor Teresita,
es éste el que el consejo de teólogos aprueba en el paso final del proceso y
que llevó a Teresita a la gloria de los altares.
Para iniciar el proceso de Canonización, debe producirse otro
milagro después de la Beatificación.
La Estudiante Resucitada
El día 7 de diciembre de 1988, varias alumnas del Colegio Las
Condes, Institución Teresiana, en el paseo de fin de año escolar, se reunieron
para pasar el día. La alumna Marcela Antúnez Riveros, bañándose en la piscina
del estadio del Banco Chile sufrió asfixia por inmersión. Fue sacada del agua
después de al menos 5 minutos cianótica y sin ningún signo vital.
Mientras la someten a la prácticas de reanimación, dos apoderados
y un grupo de alumnas piden fervorosamente la intervención de Santa Teresa y,
con asombro de los médicos de la clínica Alemana, que a la vista de la ficha
médica temían daño cerebral irreversible, se recuperó rápidamente.
Por precaución la retienen 3 días más en la clínica, saliendo de
ella sin la más mínima lesión cerebral, ni traumas, siendo -los años
siguientes- una alumna destacada en sus estudios.
Realizado canónicamente el proceso en el Arzobispado de Santiago
con las declaraciones de los testigos y de los médicos y llevada a Roma las
actas del proceso, los médicos peritos del Vaticano declararon que la
recuperación total de la niña no tiene explicación científica. Por eso, la
Congregación de los Santos aprobó el milagro para proceder a la Canonización.
VÍSPERAS
(Oración de la tarde)
INVOCACIÓN INICIAL
V. Dios mío, ven en mi auxilio
R. Señor, date prisa en socorrerme. Gloria al Padre, y al Hijo, y al
Espíritu Santo.
Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.
Aleluya.
Himno: COMO EL NIÑO QUE NO SABE DORMIRSE
Como el niño que no sabe dormirse
sin cogerse a la mano de su madre,
así mi corazón viene a ponerse
sobre tus manos, al caer la tarde.
Como el niño que sabe que alguien vela
su sueño de inocencia y esperanza,
así descansará mi alma segura
sabiendo que eres tú quien nos aguarda.
Tú endulzarás mi última amargura,
tú aliviarás el último cansancio,
tú cuidarás los sueños de la noche,
tú borrarás las huellas de mi llanto.
Tú nos darás mañana nuevamente
la antorcha de la luz y la alegría,
y, por las horas que te traigo muertas,
tú me darás una mañana viva. Amén.
SALMODIA
Ant 1. El Señor rodea a su pueblo.
Salmo 124 - EL SEÑOR VELA POR SU PUEBLO.
Los que confían en el Señor son como el monte Sión:
no tiembla, está asentado para siempre.
Jerusalén está rodeada de montañas,
y el Señor rodea a su pueblo
ahora y por siempre.
No pesará el cetro de los malvados
sobre el lote de los justos,
no sea que los justos extiendan
su mano a la maldad.
Señor, concede bienes a los buenos,
a los sinceros de corazón;
y a los que se desvían por sendas tortuosas,
que los rechace el Señor con los malhechores.
¡Paz a Israel!
Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.
Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.
Ant. El Señor rodea a su pueblo.
Ant 2. Si no volvéis a ser como niños, no entraréis en el reino de los
cielos.
Salmo 130 - COMO UN NIÑO, ISRAEL SE ABANDONÓ EN LOS BRAZOS DE DIOS
Señor, mi corazón no es ambicioso,
ni mis ojos altaneros;
no pretendo grandezas
que superan mi capacidad;
sino que acallo y modero mis deseos,
como un niño en brazos de su madre.
Espere Israel en el Señor
ahora y por siempre.
Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.
Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.
Ant. Si no volvéis a ser como niños, no entraréis en el reino de los
cielos.
Ant 3. Has hecho de nosotros, Señor, un reino de sacerdotes para nuestro
Dios.
Cántico: HIMNO A DIOS CREADOR Ap 4, 11; 5, 9-10. 12
Eres digno, Señor Dios nuestro, de recibir la gloria,
el honor y el poder,
porque tú has creado el universo;
porque por tu voluntad lo que no existía fue creado.
Eres digno de tomar el libro y abrir sus sellos,
porque fuiste degollado
y por tu sangre compraste para Dios
hombres de toda raza, lengua, pueblo y nación;
y has hecho de ellos para nuestro Dios
un reino de sacerdotes
y reinan sobre la tierra.
Digno es el Cordero degollado
de recibir el poder, la riqueza y la sabiduría,
la fuerza y el honor, la gloria y la alabanza.
Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.
Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.
Ant. Has hecho de nosotros, Señor, un reino de sacerdotes para nuestro
Dios.
LECTURA BREVE Rm 12, 9-12
Que vuestra caridad sea sincera. Aborreced el mal y aplicaos al bien. En punto a
caridad fraterna, amaos entrañablemente unos a otros. En cuanto a la mutua
estima, tened por más dignos a los demás. Nada de pereza en vuestro celo,
sirviendo con fervor de espíritu al Señor. Que la esperanza os tenga alegres;
estad firmes en la tribulación, sed asiduos en la oración.
RESPONSORIO BREVE
V. Tu palabra, Señor, es eterna, más estable que el cielo.
R. Tu palabra, Señor, es eterna, más estable que el cielo.
V. Tu fidelidad de generación en generación.
R. Más estable que el cielo.
V. Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.
R. Tu palabra, Señor, es eterna, más estable que el cielo.
CÁNTICO EVANGÉLICO
Ant. Se alegra mi espíritu en Dios mi salvador.
Cántico de María. ALEGRÍA DEL ALMA EN EL SEÑOR Lc 1, 46-55
Proclama mi alma la grandeza del Señor,
se alegra mi espíritu en Dios, mi salvador;
porque ha mirado la humillación de su esclava.
Desde ahora me felicitarán todas las generaciones,
porque el Poderoso ha hecho obras grandes por mí:
su nombre es santo,
y su misericordia llega a sus fieles
de generación en generación.
El hace proezas con su brazo:
dispersa a los soberbios de corazón,
derriba del trono a los poderosos
y enaltece a los humildes,
a los hambrientos los colma de bienes
y a los ricos los despide vacíos.
Auxilia a Israel, su siervo,
acordándose de su misericordia
—como lo había prometido a nuestros padres—
en favor de Abraham y su descendencia por siempre.
Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.
Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.
Ant. Se alegra mi espíritu en Dios mi salvador.
PRECES
Invoquemos a Dios, esperanza de su pueblo, diciendo:
Escúchanos, Señor.
Te damos gracias, Señor, porque hemos sido enriquecidos en todo por Cristo, tu
Hijo;
haz que por él crezcamos en todo conocimiento.
En tus manos, Señor, están el corazón y la mente de los que gobiernan;
dales, pues, acierto en sus decisiones para que te sean gratos en su pensar y
obrar.
Tú que a los artistas concedes inspiración para plasmar la belleza que de ti procede,
haz que con sus obras aumente el gozo y la esperanza de los hombres.
Tú que no permites que seamos tentados por encima de nuestras fuerzas,
da fortaleza a los débiles, levanta a los caídos.
Se pueden añadir algunas intenciones libres
Tú que nos has prometido la resurrección en el último día,
no te olvides de tus hijos que ya han dejado el cuerpo mortal.
Unidos fraternalmente como hermanos de una misma familia, invoquemos al Padre
común:
Padre nuestro...
ORACION
Nuestra oración vespertina suba hasta ti, Padre de clemencia, y
descienda sobre nosotros tu bendición; así, con tu ayuda seremos salvados ahora
y por siempre. Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que vive y reina contigo
en la unidad del Espíritu Santo y es Dios, por los siglos de los siglos. Amén.
CONCLUSIÓN
V. El Señor nos bendiga, nos guarde de todo mal y nos lleve a la vida
eterna.
R. Amén.
LAS LECTURAS DEL MARTES 13 JULIO 2021
*Lecturas del Martes de la 15ª semana del Tiempo Ordinario*
Martes, 13 de julio de 2021
Primera
lectura
Lectura del
libro del Éxodo (2,1-15a):
En aquellos días, un hombre de la tribu de Leví se casó con una mujer de la
misma tribu; ella concibió y dio a luz un niño. Viendo qué hermoso era, lo tuvo
escondido tres meses. No pudiendo tenerlo escondido por más tiempo, tomó una
cesta de mimbre, la embadurnó de barro y pez, colocó en ella a la criatura, y
la depositó entre los juncos, junto a la orilla del Nilo. Una hermana del niño
observaba a distancia para ver en qué paraba. La hija del Faraón bajó a bañarse
en el Nilo, mientras sus criadas la seguían por la orilla. Al descubrir la
cesta entre los juncos, mandó a la criada a recogerla. La abrió, miró dentro, y
encontró un niño llorando.
Conmovida, comentó: «Es un niño de los hebreos.»
Entonces, la hermana del niño dijo a la hija del Faraón: «¿Quieres que vaya a
buscarle una nodriza hebrea que críe al niño?»
Respondió la hija del Faraón: «Anda.»
La muchacha fue y llamó a la madre del niño.
La hija del Faraón le dijo: «Llévate al niño y críamelo, y yo te pagaré.»
La mujer tomó al niño y lo crió.
Cuando creció el muchacho, se lo llevó a la hija del Faraón, que lo adoptó como
hijo y lo llamó Moisés, diciendo: «Lo he sacado del agua.»
Pasaron los años, Moisés creció, fue adonde estaban sus hermanos, y los
encontró transportando cargas. Y vio cómo un egipcio maltrataba a un hebreo,
uno de sus hermanos. Miró a un lado y a otro, y, viendo que no había nadie,
mató al egipcio y lo enterró en la arena.
Al día siguiente, salió y encontró a dos hebreos riñendo, y dijo al culpable:
«¿Por qué golpeas a tu compañero?»
Él le contestó: «¿Quién te ha nombrado jefe y juez nuestro? ¿Es que pretendes
matarme como mataste al egipcio?»
Moisés se asustó pensando: «La cosa se ha sabido.» Cuando el Faraón se enteró
del hecho, buscó a Moisés para darle muerte; pero Moisés huyó del Faraón y se
refugió en el país de Madián.
Palabra de Dios
Salmo
Sal
68,3.14.30-31.33-34
R/. Humildes, buscad al
Señor,
y revivirá vuestro corazón
Me estoy hundiendo en un cieno profundo
y no puedo hacer pie;
he entrado en la hondura del agua,
me arrastra la corriente. R/.
Pero mi oración se dirige a ti, Dios mío,
el día de tu favor;
que me escuche tu gran bondad,
que tu fidelidad me ayude. R/.
Yo soy un pobre malherido;
Dios mío, tu salvación me levante.
Alabaré el nombre de Dios con cantos,
proclamaré su grandeza con acción de gracias. R/.
Miradlo, los humildes, y alegraos,
buscad al Señor, y revivirá vuestro corazón.
Que el Señor escucha a sus pobres,
no desprecia a sus cautivos. R/.
*Lecturas del Martes de la 15ª semana del Tiempo Ordinario*
Martes, 13 de julio de 2021
Evangelio
*Lectura
del santo evangelio según san Mateo (11,20-24)*
En aquel tiempo, se puso Jesús a recriminar a las ciudades donde había hecho
casi todos sus milagros, porque no se habían convertido: «¡Ay de ti, Corozaín,
ay de ti, Betsaida! Si en Tiro y en Sidón se hubieran hecho los milagros que en
vosotras, hace tiempo que se habrían convertido, cubiertas de sayal y ceniza.
Os digo que el día del juicio les será más llevadero a Tiro y a Sidón que a
vosotras. Y tú, Cafarnaún, ¿piensas escalar el cielo? Bajarás al infierno.
Porque si en Sodoma se hubieran hecho los milagros que en ti, habría durado
hasta hoy. Os digo que el día del juicio le será más llevadero a Sodoma que a
ti.»
Palabra del Señor
*(Porque si en Sodoma se hubieran hecho los milagros que se han hecho en
ti, aún subsistiría el día de hoy)*
*Levantarme, respirar, ver la luz
del sol, es un milagro, pero estoy tan acostumbrado, que no me fijo que cada
día tiene un color totalmente diferente, y eso es un milagro, la vida es un
milagro, una sonrisa sincera, sin malicia es un milagro. Son innumerables las
cosas buenas, que está haciendo el Señor en mí. Más lo que a él le
interesa, es que me entere que el mayor milagro, es sentir que Dios me ama como
soy, pero no para dejarme como soy, sino para convertirme en algo mucho
mejor*.
*El que desea y
quiere amar, con el corazón según el Señor: llegará a ser, Santo*
V. El Señor
nos bendiga, nos guarde de todo mal y nos lleve a la vida eterna.
R. Amén.