Musica Para el Alma
miércoles, 10 de julio de 2024
MATEO 10,7-15 CICLO B
*Lecturas del Jueves de la 14ª semana del Tiempo
Ordinario*
Jueves, 11 de julio de 2024
Evangelio
*Lectura
del santo evangelio según san Mateo (10,7-15)*
En aquel tiempo, dijo Jesús a sus apóstoles: «Id y proclamad que el reino de
los cielos está cerca. Curad enfermos, resucitad muertos, limpiad leprosos,
echad demonios. Lo que habéis recibido gratis, dadlo gratis. No llevéis en la
faja oro, plata ni calderilla; ni tampoco alforja para el camino, ni túnica de
repuesto, ni sandalias, ni bastón; bien merece el obrero su sustento. Cuando
entréis en un pueblo o aldea, averiguad quién hay allí de confianza y quedaos
en su casa hasta que os vayáis. Al entrar en una casa saludad; si la casa se lo
merece, la paz que le deseáis vendrá a ella. Si no se lo merece, la paz volverá
a vosotros. Si alguno no os recibe o no os escucha, al salir de su casa o del
pueblo, sacudid el polvo de los pies. Os aseguro que el día del juicio les será
más llevadero a Sodoma y Gomorra que a aquel pueblo.»
Palabra del Señor
*Que la
Paz del Señor llegue primero a vuestros corazones antes que mis palabras*
*(Lo
que habéis recibido gratis, dadlo gratis)*
*Esta lectura me invita a ser sincero, y que me deje
de estar esforzándome, en vivir una vida falsa, porque dentro de mí, hay cosas
que he recibido que son muy importante. Y las he recibido gratis, dentro de lo
que he recibido gratis esta la vida, y dentro de la vida, el amor, el poder
sonreír, el poder trabajar para que otras personas puedan ser felices, también
he recibido la capacidad de poder hacer las cosas bien, y poder hacer esas son
cosas, que siempre me llevaran por el camino correcto. Poder sonreír mejora mi
salud, el poder amar me sana las heridas causada por el odio, la paz interior
me ayuda a expulsa los resentimientos, hacer el bien, alimenta y fortalece mi
alma. Y todas esas cosas la recibido gratis y el Señor, me invita a dar gratis,
lo que he recibido gratis, para mi propio bien y el beneficio de otros*.
*El que desea y quiere amar, con el corazón
según el Señor: llegará a ser, Santo*
V. El
Señor nos bendiga, nos guarde de todo mal y nos lleve a la vida eterna.
R. Amén.
LAS LAUDES Y LAS VISPERAS DEL JUEVES 11
*LAS LAUDES Y
LAS VISPERAS*
Abre, Señor, mi boca para bendecir tu santo nombre; limpia mi corazón de
todos los pensamientos vanos, perversos y ajenos; ilumina mi entendimiento y
enciende mi sentimiento para que, digna, atenta y devotamente pueda recitar este
Oficio, y merezca ser escuchado en la presencia de tu divina majestad. Por
Cristo nuestro Señor. Amén
*TIEMPO ORDINARIO JUEVES DE LA SEMANA XIV*
Del Común de santos varones para los santos religiosos. Salterio II.
11 de julio
*SAN BENITO ABAD*, patrono de Europa. (MEMORIA).
Nació en Nursia, región de Umbría, hacia el año 480. Después de haber recibido
en Roma una adecuada formación, comenzó a practicar la vida eremítica en
Subiaco, donde reunió a algunos discípulos; más tarde se trasladó a Casino.
Allí fundó el célebre monasterio de Montecasino y escribió la Regla, cuya
difusión le valió el título de patriarca del monaquismo occidental. Murió el 21
de marzo del año 547, pero ya desde finales del siglo VIII en muchos lugares
comenzó a celebrarse su memoria el día de hoy.
LAUDES
(Oración de la mañana)
INVITATORIO
(Si Laudes no es la primera oración del día
se sigue el esquema del Invitatorio explicado en el Oficio de Lectura)
V. Señor abre mis labios
R. Y mi boca proclamará tu alabanza
Ant. Aclamemos al Señor, en esta fiesta
de san Benito.
Salmo 94 INVITACIÓN A LA ALABANZA DIVINA
Venid, aclamemos al Señor,
demos vítores a la Roca que nos salva;
entremos a su presencia dándole gracias,
aclamándolo con cantos.
Porque el Señor es un Dios grande,
soberano de todos los dioses:
tiene en su mano las simas de la tierra,
son suyas las cumbres de los montes;
suyo es el mar, porque él lo hizo,
la tierra firme que modelaron sus manos.
Venid, postrémonos por tierra,
bendiciendo al Señor, creador nuestro.
Porque él es nuestro Dios,
y nosotros su pueblo,
el rebaño que él guía.
Ojalá escuchéis hoy su voz:
«No endurezcáis el corazón como en Meribá,
como el día de Masá en el desierto;
cuando vuestros padres me pusieron a prueba
y dudaron de mí, aunque habían visto mis obras.
Durante cuarenta años
aquella generación me repugnó, y dije:
Es un pueblo de corazón extraviado,
que no reconoce mi camino;
por eso he jurado en mi cólera
que no entrarán en mi descanso»
Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.
Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.
Ant. Aclamemos al Señor, en esta fiesta
de san Benito.
Himno: VOSOTROS SOIS LUZ DEL MUNDO.
Vosotros sois luz del mundo
y ardiente sal de la tierra,
ciudad esbelta en el monte,
fermento en la masa nueva.
Vosotros sois los sarmientos,
y yo la Vid verdadera;
si el Padre poda las ramas,
más fruto llevan las cepas.
Vosotros sois la abundancia
del reino que ya está cerca,
los doce mil señalados
que no caerán en la siega.
Dichosos, porque sois limpios
y ricos en la pobreza,
y es vuestro el reino que sólo
se gana con la violencia. Amén.
SALMODIA
Ant 1. Despierta tu poder, Señor, y ven a salvarnos.
Salmo 79 - VEN A VISITAR TU VIÑA
Pastor de Israel, escucha,
tú que guías a José como a un rebaño;
tú que te sientas sobre querubines, resplandece
ante Efraím, Benjamín y Manasés;
despierta tu poder y ven a salvarnos.
¡Oh Dios!, restáuranos,
que brille tu rostro y nos salve.
Señor Dios de los ejércitos,
¿hasta cuándo estarás airado
mientras tu pueblo te suplica?
Le diste a comer llanto,
a beber lágrimas a tragos;
nos entregaste a las disputas de nuestros vecinos,
nuestros enemigos se burlan de nosotros.
Dios de los ejércitos, restáuranos,
que brille tu rostro y nos salve.
Sacaste una vid de Egipto,
expulsaste a los gentiles, y la trasplantaste;
le preparaste el terreno y echó raíces
hasta llenar el país;
su sombra cubría las montañas,
y sus pámpanos, los cedros altísimos;
extendió sus sarmientos hasta el mar,
y sus brotes hasta el Gran Río.
¿Por qué has derribado su cerca
para que la saqueen los viandantes,
la pisoteen los jabalíes
y se la coman las alimañas?
Dios de los ejércitos, vuélvete:
mira desde el cielo, fíjate,
ven a visitar tu viña,
la cepa que tu diestra plantó,
y que tú hiciste vigorosa.
La han talado y le han prendido fuego:
con un bramido hazlos perecer.
Que tu mano proteja a tu escogido,
al hombre que tú fortaleciste.
No nos alejaremos de ti:
danos vida, para que invoquemos tu nombre.
Señor Dios de los ejércitos, restáuranos,
que brille tu rostro y nos salve.
Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.
Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.
Ant. Despierta tu poder, Señor, y ven a
salvarnos.
Ant 2. Anunciad a toda la tierra que el
señor hizo proezas.
Cántico: ACCION DE GRACIAS DEL PUEBLO SALVADO - Is 12, 1-6
Te doy gracias, Señor,
porque estabas airado contra mí,
pero ha cesado tu ira
y me has consolado.
Él es mi Dios y salvador:
confiaré y no temeré,
porque mi fuerza y mi poder es el Señor,
él fue mi salvación.
Y sacaréis aguas con gozo
de las fuentes de la salvación.
Aquel día, diréis:
Dad gracias al Señor,
invocad su nombre,
contad a los pueblos sus hazañas,
proclamad que su nombre es excelso.
Tañed para el Señor, que hizo proezas;
anunciadlas a toda la tierra;
gritad jubilosos, habitantes de Sión:
«¡Qué grande es en medio de ti
el Santo de Israel!».
Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.
Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.
Ant. Anunciad a toda la tierra que el
señor hizo proezas.
Ant 3. Aclamad a Dios, nuestra fuerza.
Salmo 80 - SOLEMNE RENOVACIÓN DE LA ALIANZA
Aclamad a Dios, nuestra fuerza;
dad vítores al Dios de Jacob:
acompañad, tocad los panderos,
las cítaras templadas y las arpas;
tocad la trompeta por la luna nueva,
por la luna llena, que es nuestra fiesta;
porque es una ley de Israel,
un precepto del Dios de Jacob,
una norma establecida para José
al salir de Egipto.
Oigo un lenguaje desconocido:
«Retiré sus hombros de la carga,
y sus manos dejaron la espuerta.
Clamaste en la aflicción, y te libré,
te respondí oculto entre los truenos,
te puse a prueba junto a la fuente de Meribá.
Escucha, pueblo mío, doy testimonio contra ti;
¡ojalá me escuchases, Israel!
No tendrás un dios extraño,
no adorarás un dios extranjero;
yo soy el Señor Dios tuyo,
que te saqué del país de Egipto;
abre tu boca y yo la saciaré.
Pero mi pueblo no escuchó mi voz,
Israel no quiso obedecer:
los entregué a su corazón obstinado,
para que anduviesen según sus antojos.
¡Ojalá me escuchase mi pueblo
y caminase Israel por mi camino!:
en un momento humillaría a sus enemigos
y volvería mi mano contra sus adversarios;
los que aborrecen al Señor te adularían,
y su suerte quedaría fijada;
te alimentaría con flor de harina,
te saciaría con miel silvestre.»
Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.
Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.
Ant. Aclamad a Dios, nuestra fuerza.
LECTURA BREVE Rm 12, 1-2
Os exhorto, por la misericordia de Dios, a presentar vuestros cuerpos como
hostia viva, santa, agradable a Dios; éste es vuestro culto razonable. Y no os
ajustéis a este mundo, sino transformaos por la renovación de la mente, para
que sepáis discernir lo que es la voluntad de Dios, lo bueno, lo que agrada, lo
perfecto.
RESPONSORIO BREVE
V. Lleva en el corazón la ley de su Dios.
R. Lleva en el corazón la ley de su Dios.
V. Y sus pasos no vacilan.
R. Lleva en el corazón la ley de su Dios.
V. Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu
Santo.
R. Lleva en el corazón la ley de su Dios.
V. Señor, ¿a quién vamos a ir?
R. Tú tienes palabras de vida eterna.
PRIMERA LECTURA
Del libró de los Proverbios 10, 6-32
SENTENCIAS DIVERSAS
La bendición del Señor desciende sobre la cabeza
del justo; la violencia cerrará la boca de los malvados. El recuerdo del justo
es bendito; el nombre del malvado se pudre. El hombre de corazón sabio acepta
el consejo; el hombre de labios insensatos corre a su ruina.
Quien camina honradamente camina seguro; el que sigue caminos tortuosos pronto
será descubierto. El que guiña el ojo causa desventuras; el que reprende con
franqueza trae la paz. La boca del justo es fuente de vida; la boca del malvado
es copa de vinagre. El odio provoca discusiones; el amor cubre todas las
faltas. La sabiduría se encuentra en los labios del prudente; el palo es para
la espalda del insensato.
El sabio atesora la ciencia; la boca del necio es un peligro a la vista. La
fortuna del rico es su baluarte; el terror del pobre es su miseria. El salario
del justo procura la vida; la ganancia del malvado trae la ruina. El que acepta
la corrección va por camino de vida; el que rechaza la reprensión se extravía.
Los labios del justo apagan el odio; los labios del necio difunden la calumnia.
En el mucho hablar no faltará pecado; el que frena sus labios es sensato. La
lengua del justo es plata probada; el corazón perverso vale bien poco. Los
labios del justo apacientan a muchos; los necios mueren por falta de juicio.
La bendición de Dios es la que hace prosperar, y nada le añade nuestra fatiga.
Es un juego para el necio hacer maldades; es un gozo para el sabio adquirir
sabiduría. Al malvado le sucede lo que teme; pero al justo se le da lo que
desea. Como pasa la tormenta, así pasan los impíos; mas el justo permanece para
siempre. Vinagre en los dientes, humo en los ojos, eso es el mensajero perezoso
para quien lo envía.
El temor del Señor prolonga la vida; los años del impío son acortados. La
esperanza del justo termina en alegría; la ilusión del malhechor termina en un
fracaso. El camino de Dios es refugio para el honrado; y es terror para el
malvado. El justo jamás vacilará; los impíos no habitarán la tierra. De la boca
del justo brotará sabiduría; de la lengua tramposa brotará el engaño. Los labios
del justo saben de benevolencia; la boca del malvado sabe de perversidad.
RESPONSORIO Sal 36, 30. 31; 111,
6. 7
R. La boca del
justo expone la sabiduría, su lengua explica el derecho; * porque
lleva en el corazón la ley de su Dios.
V. El recuerdo del justo será perpetuo; no temerá
las malas noticias.
R. Porque lleva en el corazón la ley de su Dios.
SEGUNDA LECTURA
De la Regla de san Benito, abad
(Prólogo, 4-22; cap. 72, 1-12: CSEL 75, 2-5. 162-163)
NO ANTEPONGAN NADA ABSOLUTAMENTE A CRISTO
Cuando emprendas alguna obra buena, lo primero que
has de hacer es pedir constantemente a Dios que sea él quien la lleve a
término, y así nunca lo contristaremos con nuestras malas acciones, a él, que
se ha dignado contarnos en el número de sus hijos, ya que en todo tiempo
debemos someternos a él en el uso de los bienes que pone a nuestra disposición,
no sea que algún día, como un padre que se enfada con sus hijos, nos desherede,
o, como un amo temible, irritado por nuestra maldad, nos entregue al castigo
eterno, como a servidores perversos que han rehusado seguirlo a la gloria.
Por lo tanto, despertémonos ya de una vez, obedientes a la llamada que nos hace
la Escritura: Ya es hora que despertéis del sueño. Y, abiertos nuestros ojos a
la luz divina, escuchemos bien atentos la advertencia que nos hace cada día la
voz de Dios: Hoy, si escucháis su voz, no endurezcáis el corazón; y también: El
que tenga oídos oiga lo que el Espíritu dice a las Iglesias.
¿Y qué es lo que dice? Venid, hijos, escuchadme: os instruiré en el temor del
Señor. Caminad mientras tenéis luz, para que las tinieblas de la muerte no os
sorprendan.
Y el Señor, buscando entre la multitud de los hombres a uno que realmente
quisiera ser operario suyo, dirige a todos esta invitación: ¿Hay alguien que
ame la vida y desee días de prosperidad? Y si tú, al oír esta invitación,
respondes: «Yo», entonces Dios te dice: «Si amas la vida verdadera y eterna,
guarda tu lengua del mal, tus labios de la falsedad; apártate del mal, obra el
bien, busca la paz y corre tras ella. Si así lo hacéis, mis ojos estarán sobre
vosotros y mis oídos atentos a vuestras plegarias; y, antes de que me
invoquéis, os diré: Aquí estoy.»
¿Qué hay para nosotros más dulce, hermanos muy amados, que esta voz del Señor
que nos invita? Ved cómo el Señor, con su amor paternal, nos muestra el camino
de la vida.
Ceñida, pues, nuestra cintura con la fe y la práctica de las buenas obras,
avancemos por sus caminos, tomando por guía el Evangelio, para que alcancemos a
ver a aquél que nos ha llamado a su reino. Porque, si queremos tener nuestra
morada en las estancias de su reino, hemos de tener presente que para llegar
allí hemos de caminar aprisa por el camino de las buenas obras.
Así como hay un celo malo, lleno de amargura, que separa de Dios y lleva al
infierno, así también hay un celo bueno, que separa de los vicios y lleva a
Dios y a la vida eterna. Éste es el celo que han de practicar con ferviente
amor los monjes, esto es: tengan por más dignos a los demás; soporten con una paciencia
sin límites sus debilidades, tanto corporales como espirituales; pongan todo su
empeño en obedecerse los unos a los otros; procuren todos el bien de los demás,
antes que el suyo propio; pongan en práctica un sincero amor fraterno; vivan
siempre en el temor y amor de Dios; amen a su abad con una caridad sincera y
humilde; no antepongan nada absolutamente a Cristo, el cual nos lleve a todos
juntos a la vida eterna.
RESPONSORIO S. Gregorio Magno,
Diálogos, lib. 2, prólogo; 3
R. El
bienaventurado Benito, habiendo dejado su casa y sus bienes familiares y
queriendo agradar sólo a Dios, buscó la manera de llevar una vida santa, * y
habitó en la soledad, ante los ojos del Altísimo, que todo lo ve.
V. Sabiamente indocto, se retiró, consciente de su
ignorancia.
R. Y habitó en la soledad, ante los ojos del
Altísimo, que todo lo ve.
*Lecturas del Jueves de la 14ª semana del Tiempo
Ordinario*
Jueves, 11 de julio de 2024
Evangelio
*Lectura
del santo evangelio según san Mateo (10,7-15)*
En aquel tiempo, dijo Jesús a sus apóstoles: «Id y proclamad que el reino de
los cielos está cerca. Curad enfermos, resucitad muertos, limpiad leprosos,
echad demonios. Lo que habéis recibido gratis, dadlo gratis. No llevéis en la
faja oro, plata ni calderilla; ni tampoco alforja para el camino, ni túnica de
repuesto, ni sandalias, ni bastón; bien merece el obrero su sustento. Cuando
entréis en un pueblo o aldea, averiguad quién hay allí de confianza y quedaos
en su casa hasta que os vayáis. Al entrar en una casa saludad; si la casa se lo
merece, la paz que le deseáis vendrá a ella. Si no se lo merece, la paz volverá
a vosotros. Si alguno no os recibe o no os escucha, al salir de su casa o del
pueblo, sacudid el polvo de los pies. Os aseguro que el día del juicio les será
más llevadero a Sodoma y Gomorra que a aquel pueblo.»
Palabra del Señor
CÁNTICO
EVANGÉLICO
Ant. Hubo un hombre, venerable por su vida, Benito, que, como ya su
propio nombre lo insinúa, fue bendecido por Dios con los dones de su gracia.
Cántico de Zacarías. EL MESÍAS Y SU PRECURSOR
Lc 1, 68-79
Bendito sea el Señor, Dios de Israel,
porque ha visitado y redimido a su pueblo.
suscitándonos una fuerza de salvación
en la casa de David, su siervo,
según lo había predicho desde antiguo
por boca de sus santos profetas:
Es la salvación que nos libra de nuestros enemigos
y de la mano de todos los que nos odian;
ha realizado así la misericordia que tuvo con nuestros padres,
recordando su santa alianza
y el juramento que juró a nuestro padre Abraham.
Para concedernos que, libres de temor,
arrancados de la mano de los enemigos,
le sirvamos con santidad y justicia,
en su presencia, todos nuestros días.
Y a ti, niño, te llamarán Profeta del Altísimo,
porque irás delante del Señor
a preparar sus caminos,
anunciando a su pueblo la salvación,
el perdón de sus pecados.
Por la entrañable misericordia de nuestro Dios,
nos visitará el sol que nace de lo alto,
para iluminar a los que viven en tiniebla
y en sombra de muerte,
para guiar nuestros pasos
por el camino de la paz.
Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.
Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.
Ant. Hubo un hombre, venerable por su
vida, Benito, que, como ya su propio nombre lo insinúa, fue bendecido por Dios
con los dones de su gracia.
PRECES
Adoremos, hermanos, a Cristo, el Dios santo, y, pidiéndole que nos
enseñe a servirle con santidad y justicia en su presencia todos nuestros días,
aclamémosle diciendo:
Tú solo eres santo, Señor.
Señor Jesús, probado en todo exactamente como nosotros, menos en el pecado,
compadécete de nuestras debilidades.
Señor Jesús, que a todos nos llamas a la perfección del amor,
danos el progresar por caminos de santidad.
Señor Jesús, que nos quieres sal de la tierra y luz del mundo,
ilumina nuestras vidas con tu propia luz.
Señor Jesús, que viniste al mundo no para que te sirvieran, sino para servir,
haz que sepamos servir con humildad a ti y a nuestros hermanos.
Señor Jesús, reflejo de la gloria del Padre e impronta de su ser,
haz que un día podamos contemplar la claridad de tu gloria.
Se pueden añadir algunas intenciones libres
Oremos ahora al Padre, como nos enseñó el mismo Jesús:
Padre nuestro...
ORACION
Dios nuestro, que constituiste al abad san Benito como un insigne
maestro para los que quieren entregarse a tu servicio, concédenos que,
anteponiendo tu amor a todas las cosas, corramos con un amor generoso por el
camino de tus mandamientos. Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que vive y
reina contigo en la unidad del Espíritu Santo y es Dios, por los siglos de los
siglos. Amén
CONCLUSIÓN
V. El Señor nos bendiga, nos guarde de todo mal y nos lleve a la vida
eterna.
R. Amén.
VÍSPERAS
(Oración de la tarde)
INVOCACIÓN INICIAL
V. Dios mío, ven en mi auxilio
R. Señor, date prisa en socorrerme. Gloria al
Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.
Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.
Aleluya.
Himno: FELIZ QUIEN HA ESCUCHADO LA LLAMADA
Feliz quien ha escuchado la llamada
al pleno seguimiento del Maestro,
feliz porque él, con su mirada,
lo eligió como amigo y compañero.
Feliz el que ha abrazado la pobreza
para llenar de Dios su vida toda,
para servirlo a él con fortaleza,
con gozo y con amor a todas horas.
Feliz el mensajero de verdades
que marcha por caminos de la tierra,
predicando bondad contra maldades,
pregonando la paz contra las guerras. Amén.
SALMODIA
Ant 1. Te hago luz de las naciones, para que seas mi salvación hasta el
fin de la tierra.
Salmo 71 I - PODER REAL DEL MESÍAS
Dios mío, confía tu juicio al rey,
tu justicia al hijo de reyes,
para que rija a tu pueblo con justicia,
a tus humildes con rectitud.
Que los montes traigan paz,
y los collados justicia;
que él defienda a los humildes del pueblo,
socorra a los hijos del pobre
y quebrante al explotador.
Que dure tanto como el sol,
como la luna, de edad en edad;
que baje como lluvia sobre el césped,
como llovizna que empapa la tierra.
Que en sus días florezca la justicia
y la paz hasta que falte la luna.
Que domine de mar a mar,
del Gran Río al confín de la tierra.
Que en su presencia se inclinen sus rivales;
que sus enemigos muerdan el polvo;
que los reyes de Tarsis y de las islas
le paguen tributo.
Que los reyes de Saba y de Arabia
le ofrezcan sus dones;
que se postren ante él todos los reyes,
y que todos los pueblos le sirvan.
Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.
Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.
Ant. Te hago luz de las naciones, para
que seas mi salvación hasta el fin de la tierra.
Ant 2. Socorrerá el Señor a los hijos del
pobre; rescatará sus vidas de la violencia.
Salmo 71 II
Él librará al pobre que clamaba,
al afligido que no tenía protector;
él se apiadará del pobre y del indigente,
y salvará la vida de los pobres;
él rescatará sus vidas de la violencia,
su sangre será preciosa a sus ojos.
Que viva y que le traigan el oro de Saba;
él intercederá por el pobre
y lo bendecirá.
Que haya trigo abundante en los campos,
y ondee en lo alto de los montes,
den fruto como el Líbano,
y broten las espigas como hierba del campo.
Que su nombre sea eterno,
y su fama dure como el sol;
que él sea la bendición de todos los pueblos,
y lo proclamen dichoso todas las razas de la tierra.
Bendito sea el Señor, Dios de Israel,
el único que hace maravillas;
bendito por siempre su nombre glorioso,
que su gloria llene la tierra.
¡Amén, amén!
Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.
Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.
Ant. Socorrerá el Señor a los hijos del
pobre; rescatará sus vidas de la violencia.
Ant 3. Ahora se estableció la salud y el
reinado de nuestro Dios.
Cántico: EL JUICIO DE DIOS Ap 11, 17-18; 12,
10b-12a
Gracias te damos, Señor Dios omnipotente,
el que eres y el que eras,
porque has asumido el gran poder
y comenzaste a reinar.
Se encolerizaron las naciones,
llegó tu cólera,
y el tiempo de que sean juzgados los muertos,
y de dar el galardón a tus siervos los profetas,
y a los santos y a los que temen tu nombre,
y a los pequeños y a los grandes,
y de arruinar a los que arruinaron la tierra.
Ahora se estableció la salud y el poderío,
y el reinado de nuestro Dios,
y la potestad de su Cristo;
porque fue precipitado
el acusador de nuestros hermanos,
el que los acusaba ante nuestro Dios día y noche.
Ellos le vencieron en virtud de la sangre del Cordero
y por la palabra del testimonio que dieron,
y no amaron tanto su vida que temieran la muerte.
Por esto, estad alegres, cielos,
y los que moráis en sus tiendas.
Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.
Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.
Ant. Ahora se estableció la salud y el
reinado de nuestro Dios.
LECTURA BREVE Rm 8, 28-30
Sabemos que a los que aman a Dios todo les sirve
para el bien: a los que ha llamado conforme a su designio. A los que había
escogido, Dios los predestinó a ser imagen de su Hijo, para que él fuera el
primogénito de muchos hermanos. A los que predestinó, los llamó; a los que
llamó, los justificó; a los que justificó, los glorificó.
RESPONSORIO BREVE
V. El Señor es justo y ama la justicia.
R. El Señor es justo y ama la justicia.
V. Los buenos verán su rostro.
R. El Señor es justo y ama la justicia.
V. Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu
Santo.
R. El Señor es justo y ama la justicia.
CÁNTICO EVANGÉLICO
Ant. Este hombre recibió la bendición del Señor, la misericordia del
Dios de salvación; él es del grupo que busca al Señor.
Cántico de María. ALEGRÍA DEL ALMA EN EL SEÑOR Lc 1, 46-55
Proclama mi alma la grandeza del Señor,
se alegra mi espíritu en Dios, mi salvador;
porque ha mirado la humillación de su esclava.
Desde ahora me felicitarán todas las generaciones,
porque el Poderoso ha hecho obras grandes por mí:
su nombre es santo,
y su misericordia llega a sus fieles
de generación en generación.
El hace proezas con su brazo:
dispersa a los soberbios de corazón,
derriba del trono a los poderosos
y enaltece a los humildes,
a los hambrientos los colma de bienes
y a los ricos los despide vacíos.
Auxilia a Israel, su siervo,
acordándose de su misericordia
—como lo había prometido a nuestros padres—
en favor de Abraham y su descendencia por siempre.
Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo.
Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.
Ant. Este hombre recibió la bendición
del Señor, la misericordia del Dios de salvación; él es del grupo que busca al
Señor.
PRECES
Pidamos a Dios Padre, fuente de toda santidad, que con la
intercesión y el ejemplo de los santos nos ayude, y digamos:
Haz que seamos santos, porque tú, Señor, eres santo.
Padre santo, que has querido que nos llamemos y seamos hijos tuyos,
haz que la Iglesia santa, extendida por los confines de la tierra, cante tus
grandezas.
Padre santo, que deseas que vivamos de una manera digna, buscando siempre tu
beneplácito,
ayúdanos a dar fruto de buenas obras.
Padre santo, que nos reconciliaste contigo por medio de Cristo,
guárdanos en tu nombre para que todos seamos uno.
Padre santo, que nos convocas al banquete de tu reino,
haz que comiendo el pan que ha bajado del cielo alcancemos la perfección del
amor.
Se pueden añadir algunas intenciones libres
Padre santo, perdona a los pecadores sus delitos
y admite a los difuntos en tu reino para que puedan contemplar tu rostro.
Porque nos llamamos y somos hijos de Dios, nos atrevemos a decir:
Padre nuestro...
ORACION
Dios nuestro, que constituiste al abad san Benito como un insigne
maestro para los que quieren entregarse a tu servicio, concédenos que,
anteponiendo tu amor a todas las cosas, corramos con un amor generoso por el
camino de tus mandamientos. Por nuestro Señor Jesucristo, tu Hijo, que vive y
reina contigo en la unidad del Espíritu Santo y es Dios, por los siglos de los
siglos. Amén
CONCLUSIÓN
V. El Señor nos bendiga, nos guarde de todo mal y nos lleve a la vida
eterna.
R. Amén.
LAS LECTURAS DEL JUEVES 11 DE JULIO 2024
*San
Benito Abad, memoria obligatoria*
*Lecturas del Jueves de la 14ª semana del Tiempo
Ordinario*
Jueves, 11 de julio de 2024
Primera
lectura
Lectura
de la profecía de Oseas (11,1-4.8c-9):
Así dice el Señor: «Cuando Israel era joven, lo amé, desde Egipto llamé a mi
hijo. Cuando lo llamaba, él se alejaba, sacrificaba a los Baales, ofrecía
incienso a los ídolos. Yo enseñé a andar a Efraín, lo alzaba en brazos; y él no
comprendía que yo lo curaba. Con cuerdas humanas, con correas de amor lo
atraía; era para ellos como el que levanta el yugo de la cerviz, me inclinaba y
le daba de comer. Se me revuelve el corazón, se me conmueven las entrañas. No
cederé al ardor de mi cólera, no volveré a destruir a Efraín; que soy Dios, y
no hombre; santo en medio de ti, y no enemigo a la puerta.»
Palabra de Dios
Salmo
Sal
79
R/. Que
brille tu rostro, Señor, y nos salve
Pastor de Israel, escucha,
tú que te sientas sobre querubines, resplandece;
despierta tu poder y ven a salvarnos. R/.
Dios de los ejércitos, vuélvete:
mira desde el cielo, fíjate,
ven a visitar tu viña,
la cepa que tu diestra plantó,
y que tú hiciste vigorosa. R/.
*Lecturas del Jueves de la 14ª semana del Tiempo
Ordinario*
Jueves, 11 de julio de 2024
Evangelio
*Lectura
del santo evangelio según san Mateo (10,7-15)*
En aquel tiempo, dijo Jesús a sus apóstoles: «Id y proclamad que el reino de
los cielos está cerca. Curad enfermos, resucitad muertos, limpiad leprosos,
echad demonios. Lo que habéis recibido gratis, dadlo gratis. No llevéis en la
faja oro, plata ni calderilla; ni tampoco alforja para el camino, ni túnica de
repuesto, ni sandalias, ni bastón; bien merece el obrero su sustento. Cuando
entréis en un pueblo o aldea, averiguad quién hay allí de confianza y quedaos
en su casa hasta que os vayáis. Al entrar en una casa saludad; si la casa se lo
merece, la paz que le deseáis vendrá a ella. Si no se lo merece, la paz volverá
a vosotros. Si alguno no os recibe o no os escucha, al salir de su casa o del
pueblo, sacudid el polvo de los pies. Os aseguro que el día del juicio les será
más llevadero a Sodoma y Gomorra que a aquel pueblo.»
Palabra del Señor
*Que la
Paz del Señor llegue primero a vuestros corazones antes que mis palabras*
*(Lo
que habéis recibido gratis, dadlo gratis)*
*Esta lectura me invita a ser sincero, y que me deje
de estar esforzándome, en vivir una vida falsa, porque dentro de mí, hay cosas
que he recibido que son muy importante. Y las he recibido gratis, dentro de lo
que he recibido gratis esta la vida, y dentro de la vida, el amor, el poder
sonreír, el poder trabajar para que otras personas puedan ser felices, también
he recibido la capacidad de poder hacer las cosas bien, y poder hacer esas son
cosas, que siempre me llevaran por el camino correcto. Poder sonreír mejora mi
salud, el poder amar me sana las heridas causada por el odio, la paz interior
me ayuda a expulsa los resentimientos, hacer el bien, alimenta y fortalece mi
alma. Y todas esas cosas la recibido gratis y el Señor, me invita a dar gratis,
lo que he recibido gratis, para mi propio bien y el beneficio de otros*.
*El que desea y quiere amar, con el corazón
según el Señor: llegará a ser, Santo*
V. El
Señor nos bendiga, nos guarde de todo mal y nos lleve a la vida eterna.
R. Amén.