El evangelio de hoy Lucas, 18, 35-43. «¡Jesús, hijo de David, ten compasión de mí!» pero él gritaba más fuerte:«¡Hijo de David, ten compasión de mi!» Jesús le preguntó:«¿Qué quieres que haga por ti?»«Señor, que vea otra vez.» Jesús le contestó«Recobra la vista, tu fe te ha curado.» En seguida recobró la vista. Esta palabra del ciego yo las repito, pero no la grito con fuerza, porque me da vergüenza, gritar lo que soy y que la gente lo escuche ! Jesús hijo de David, ten piedad de mi: que soy un odioso con la gente, un orgulloso, un mentiroso, iracundo, un soberbio, uno que está sentado en el borde del camino, pidiendo un cariño a las personas, para caerles bien, un cariño al jefe del trabajo para que no me vote y si tengo que hacer lo mal hecho no importa, y otras cosas malas, que son muy fea a los ojos del Señor. El Señor quiere, desea, le interesa que yo sienta y me de cuenta, que El, se está hacercado a mi, que le grite de corazón, que tenga piedad de mi, que soy un ciego y necio que no quiero reconocer que estoy ciego, por eso sufro, porque creo que veo, no tengo fe y el Señor quiere que yo descubra cuanto el me ama y me dice que quieres, Señor yo quiero ver, haz una limpieza en mi corazón, porque bienaventurados los limpio de corazón, porque ellos verán a DIOS, y yo quiero seguirte de todo corazón, sin miedo y sin vergüenza.! Jesús hijo de David ten compasión de mi que soy un pecador ¡
《 El que DESEA y QUIERE amar, con el corazón según EL SEÑOR: llegará a ser, SANTO 》