El evangelio de hoy: Mateo 21, 23-27. «¿Con qué autoridad haces esto? ¿Quién te ha dado semejante autoridad?» Esta lectura me da una gran esperanza, y es que el Señor no tiene que esperar mi decisión para entrar al templo de mi alma, sino que entra y punto, y cuando yo me doy cuenta y vengo con todo mi orgullo, con toda mi soberbia, y lleno de ira, a cuestionarlo porque el está actuando en mi vida, el también me responde con otra pregunta, ¿ Yo te pedí permiso para darte la vida ? Y me quedo pensando que decir o que responder, solo se una cosa el Señor me ha dado la vida y he hecho con ella lo que me a dado el deseo, y e rellenado todo mi ser, de envidia, de soberbia, de ira, de orgullo, de lujuria, de muchos malos pensamiento, pensamientos de muerte, y el Señor viendo que estoy haciendo de mi vida un infierno, entra en ella sin pedir permiso, a salvar y rescatar mi vida que va en picada, precipitándose al infierno, y por su amor y gran misericordia se impone por encima de mi autoridad, para que yo cambie de conducta y me convierta a el con toda el alma, con toda mi mente y con todo el corazón. Señor por tu amor y tu gran misericordia no abandone la obra de tus manos en mi.
《 El que DESEA y QUIERE amar, con el corazón según EL SEÑOR: llegará a ser, SANTO 》
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