Lo
que me dice: El Santo Evangelio:
Miércoles, 7 de marzo de 2018 (Mateo 5,
17-19). («No he venido a abolir,
sino a dar plenitud »). *El Señor me habla, como si él fuera mi abuelo y
yo su nieto, muy querido y consentido y me dice que él no ha venido, a mi casa,
para abolirme o a quitarme las ordenes, mandatos y reglas que ha implantado mi
padre en mi casa, al contrario, el me lo va a explicar bien, de una forma tan
clara, tan pedagógica, que la ley y los mandamiento, se convertirán en mí, en
una herramienta, y un medio tan perfecto que arán de mí, una persona muy alegre y totalmente
libre y esa alegría llegara a una plenitud tan alta, que ni la angustia, ni la
muerte, ni la persecución, ni el miedo, me la podrán quitar. Y podré contemplar
lo impórtate y útil que son los mandamientos y la ley en mi vida, porque ellos
son los que me mostraran el camino que me llevará a la plenitud. Y para mí la plenitud total, es que yo un
día, pueda amar, con todo mi corazón, con toda mi alma, con toda mi mente, y
con todo mi ser y con todas mis fuerzas la voluntad de Dios. Y amar a mi
prójimo, y orar sin cansarme por aquellas personas, que yo de una manera u
otra, queriendo o tal vez sin querer les
he hecho daño, y les he causado heridas interiores muy dolorosas, y muy difícil
de curar y de olvidar*.
《 *El que DESEA y QUIERE amar, con el
corazón según EL SEÑOR: llegará a ser, SANTO* 》
