LO
QUE ME DICE
EL
SANTO EVANGELIO
Viernes, 2 de septiembre de 2016
SAN Lucas (5,33-39):
(«Llegará el día en que se lo lleven, y entonces
ayunarán »). Esta
pregunta trae en el fondo un juicio, que yo también uso ¿pero fulano y fulano
hacen los que a ellos les vienen en gana y usted a ello no les dice nada? Es
muy interesante darme cuenta como realmente no sé dónde está el Señor. Si el
Señor esta en el sagrario, ¿porque soy tan irrespetuoso dentro del templo?, con
un habladero, con una bulla, con una risa, como si estuviera, en una plaza o en
un mercado, (porque si estoy dentro de una obra teatral, si estoy hablando me
mandan a callar o me sacan, y si estoy afuera, de la obra comiendo o chismeando
y comienza la obra no me dejan entrar), ¿No sé dónde está el Señor? Si esta en
el hermano, ¿porque meda tanta rabia, y tanto pique?, que un hermano me busque
conversación o me hable pendejada en plena eucaristía, eso a mí me prende, o un
hermano hablándome disparate en plena eucaristía. Si el Señor está en la biblia,
¿porque mu duela pagar tanto dinero para tener una buena biblia para estudio? (mi
biblia cuando nueva tenia las paginas blanca ahora son amarillas de lo vieja). Si
el Señor está en la liturgia de las horas, ¿porque no tengo tiempo?, o lo hago
simplemente por cumplir con lo catequista como sacrificio.(¿porque no lo
disfruto? como un buen vaso de agua cuando tengo mucha sed y calor) Si puedo
sentir al Señor, en los misterios del rosario, ¿para qué tengo un rosario de lujo en el retrovisor del carro o en el
cuello si no lo uso? El Señor me invita a dejar de estar remendando mi vida de
cristiano, que si lo tengo a él, mi vida, debo reflejar la alegría la belleza del
resucitado. Porque el Señor está conmigo como un héroe valeroso, es tiempo de
algo nuevo, lo antiguo ha pasado. Amor
con amor se paga.
《 El que DESEA y QUIERE amar,
con el corazón según EL SEÑOR: llegará a ser, SANTO 》
