Musica Para el Alma

lunes, 19 de agosto de 2024

MATEO 20,1-16 CICLO B

*Lecturas del miércoles de la XX Semana del Tiempo Ordinario*.

21 Agosto 2024

Evangelio

*Lectura del santo evangelio según san Mateo (20,1-16)*

 

En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos esta parábola: «El reino de los cielos se parece a un propietario que al amanecer salió a contratar jornaleros para su viña. Después de ajustarse con ellos en un denario por jornada, los mandó a la viña. Salió otra vez a media mañana, vio a otros que estaban en la plaza sin trabajo, y les dijo: «Id también vosotros a mi viña, y os pagaré lo debido.» Ellos fueron. Salió de nuevo hacia mediodía y a media tarde e hizo lo mismo. Salió al caer la tarde y encontró a otros, parados, y les dijo: «¿Cómo es que estáis aquí el día entero sin trabajar?» Le respondieron: «Nadie nos ha contratado.» Él les dijo: «Id también vosotros a mi viña.» Cuando oscureció, el dueño de la viña dijo al capataz: «Llama a los jornaleros y págales el jornal, empezando por los últimos y acabando por los primeros.» Vinieron los del atardecer y recibieron un denario cada uno. Cuando llegaron los primeros, pensaban que recibirían más, pero ellos también recibieron un denario cada uno. Entonces se pusieron a protestar contra el amo: «Estos últimos han trabajado sólo una hora, y los has tratado igual que a nosotros, que hemos aguantado el peso del día y el bochorno. Él replicó a uno de ellos: «Amigo, no te hago ninguna injusticia. ¿No nos ajustamos en un denario? Toma lo tuyo y vete. Quiero darle a este último igual que a ti. ¿Es que no tengo libertad para hacer lo que quiera en mis asuntos? ¿O vas a tener tú envidia porque yo soy bueno?» Así, los últimos serán los primeros y los primeros los últimos.»

 

Palabra del Señor

 

*Que la Paz del Señor llegue primero a vuestros corazones antes que mis palabras*

 

(« ¿Vas a tener tú envidia porque yo soy bueno? »).  

*El Señor y yo nos ajustamos en que él, me daría una sola vida, y que tengo que vivir mi vida, según los trabajos de su viña, en ningún momento me dijo que tenía que recibir más que los demás, y mucho menos estoy autorizado a adueñarme de la vida de los demás. He cometido un gran error en pesar, que esta vida es mía y puedo hacer con ella lo que quiera, todo lo quiero para mí. El Señor me invita a reconocer que él es el dueño y él, se despoja de su propia vida para darme de comer a mí, para que yo me alimente de él, y así no perezca*  

 

*El que desea y quiere amar, con el corazón según el Señor: llegará a ser, Santo*

 

V. El Señor nos bendiga, nos guarde de todo mal y nos lleve a la vida eterna.


R. Amén.