*Lecturas
de la 5ª Semana del Tiempo Pascua Ciclo B*
Martes,
30 de abril de 2024
Primera
lectura
Lectura
del libro de los Hechos de los apóstoles (14,19-28):
En aquellos días, llegaron unos judíos de Antioquía
y de Iconio y se ganaron a la gente; apedrearon a Pablo y lo arrastraron fuera
de la ciudad, dejándolo ya por muerto. Entonces lo rodearon los discípulos; él
se levantó y volvió a la ciudad.
Al día siguiente, salió con Bernabé para Derbe. Después de predicar el
Evangelio en aquella ciudad y de ganar bastantes discípulos, volvieron a
Listra, a Iconio y a Antioquia, animando a los discípulos y exhortándolos a perseverar
en la fe, diciéndoles que hay que pasar muchas tribulaciones para entrar en el
reino de Dios.
En cada Iglesia designaban presbíteros, oraban, ayunaban y los encomendaban al
Señor, en quien habían creído. Atravesaron Pisidia y llegaron a Panfilia. Y
después de predicar la Palabra en Perge, bajaron a Atalía y allí se embarcaron
para Antioquia, de donde los habían encomendado a la gracia de Dios para la
misión que acababan de cumplir. Al llegar, reunieron a la Iglesia, les contaron
lo que Dios había hecho por medio de ellos y cómo había abierto a los gentiles
la puerta de la fe. Se quedaron allí bastante tiempo con los discípulos.
Palabra de Dios
Salmo
Sal
144,10-11.12-13ab.21
R/. Que
tus fieles, Señor, proclamen la gloria de tu reinado
Que todas tus criaturas te den gracias, Señor,
que te bendigan tus fieles.
Que proclamen la gloria de tu reinado,
que hablen de tus hazañas. R/.
Explicando tus hazañas a los hombres,
la gloria y majestad de tu reinado.
Tu reinado es un reinado perpetuo,
tu gobierno va de edad en edad. R/.
Pronuncie mi boca la alabanza del Señor,
todo viviente bendiga su santo nombre
por siempre jamás. R/.
*Lecturas
de la 5ª Semana del Tiempo Pascua Ciclo B*
Martes,
30 de abril de 2024
Evangelio
*Lectura
del santo evangelio según san Juan (14,27-31a)*
En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos:
«La paz os dejo, mi paz os doy; no os la doy yo como la da el mundo. Que no
turbe vuestro corazón ni se acobarde. Me habéis oído decir: “Me voy y vuelvo a
vuestro lado”. Si me amarais, os alegraríais de que vaya al Padre, porque el
Padre es más que yo. Os lo he dicho ahora, antes de que suceda, para que cuando
suceda creáis.
Ya no hablaré mucho con vosotros, pues se acerca el príncipe del mundo; no es
que él tenga poder sobre mí, pero es necesario que el mundo comprenda que yo
amo al Padre, y que, como el Padre me ha ordenado, así actúo yo».
Palabra del Señor
*Que la
Paz del Señor llegue primero a vuestros corazones antes que mis palabras*
*(«Os dejo la paz, mi paz os doy; no os la doy como la da el
mundo.»)*.
*El Señor me invita a una paz verdadera, pero tengo
que saber la diferencia entre la paz que me da el Señor y la paz que me ofrece
el mundo. El mundo lo que me ofrece es una paz impuesta por sugestión u obligación
mediática a cambio de algo, entendiendo por tranquilidad, no paz, usted se
mantiene tranquilo, sin opinar, sin meterse en nada, calladito que así se ve más
bonito y así tendré la ausencia de algunos problema; yo me porto bien, para que
me vaya bien, queriéndome hacer entender, que una persona está en paz cuando se
porta bien, esa es la paz que me ofrece el mundo. Pero el Señor hoy me habla de
una Paz, que puede vencer el miedo, que me ayuda a avanzar en las dificultades
y al mismo tiempo hacer caminar hacia la esperanza*.
*El que desea y quiere amar, con el corazón
según el Señor: llegará a ser, Santo*
V. El
Señor nos bendiga, nos guarde de todo mal y nos lleve a la vida eterna.
R. Amén.