*Lecturas
del Viernes de la 27ª semana del Tiempo Ordinario*
Viernes, 8 de octubre de 2021
Evangelio
*Lectura
del santo evangelio según san Lucas (11,15-26)*
En aquel tiempo, habiendo echado Jesús un demonio, algunos de entre la multitud
dijeron:«Si echa los demonios es por arte de Belzebú, el príncipe de los
demonios.»
Otros, para ponerlo a prueba, le pedían un signo en el cielo.
Él, leyendo sus pensamientos, les dijo: «Todo reino en guerra civil va a la
ruina y se derrumba casa tras casa. Si también Satanás está en guerra civil,
¿cómo mantendrá su reino? Vosotros decís que yo echo los demonios con el poder
de Belzebú; y, si yo echo los demonios con el poder de Belzebú, vuestros hijos,
¿por arte de quién los echan? Por eso, ellos mismos serán vuestros jueces.
Pero, si yo echo los demonios con el dedo de Dios, entonces es que el reino de
Dios ha llegado a vosotros. Cuando un hombre fuerte y bien armado guarda su
palacio, sus bienes están seguros. Pero, si otro más fuerte lo asalta y lo
vence, le quita las armas de que se fiaba y reparte el botín. El que no está
conmigo está contra mí; el que no recoge conmigo desparrama. Cuando un espíritu
inmundo sale de un hombre, da vueltas por el desierto, buscando un sitio para
descansar; pero, como no lo encuentra, dice: "Volveré a la casa de donde
salí." Al volver, se la encuentra barrida y arreglada. Entonces va a coger
otros siete espíritus peores que él, y se mete a vivir allí. Y el final de
aquel hombre resulta peor que el principio.»
Palabra del Señor
(Si yo echo
los demonios con el dedo de Dios)
*Es confortable saber que un solo dedo de mi Señor,
tiene mayor poder que todas las tinieblas de las fuerzas oscuras del príncipe
de las tinieblas el llamado diablo y Satanás. El Señor me pide que haga mío un
viejo refrán que dice: Que al que buen albor se arrima, buena sobra le da. Con
sus palabras me está mostrando que si hay en mí un hombre fuerte que esta
sujetando mi alma, llenándola de tristeza, angustia y miedo que no tema; porque
vendrá otro mucho más fuerte que él, y viene vestido y ceñido de majestad,
con la fuerza de un búfalo, y con el poder de cambiar mi tristeza, en danza,
con el poder de cambiar mi luto, en alegría y con el poder de cambiar mi miedo,
en seguridad*.
*El que desea y
quiere amar, con el corazón según el Señor: llegará a ser, Santo*
V. El Señor
nos bendiga, nos guarde de todo mal y nos lleve a la vida eterna.
R. Amén.