Musica Para el Alma

lunes, 7 de junio de 2021

LAS LECTURAS DEL MARTES 8 DE JUNIO 2021


 

*Lecturas de la 10ª Semana del Tiempo Ordinario Ciclo B*

Martes, 8 de junio de 2021

Primera lectura

Lectura de la segunda carta del apóstol san Pablo a los Corintios (1,18-22):

¡Dios me es testigo! La palabra que os dirigimos no fue primero «sí» y luego «no». Cristo Jesús, el Hijo de Dios, el que Silvano, Timoteo y yo os hemos anunciado, no fue primero «sí» y luego «no»; en él todo se ha convertido en un «sí»; en él todas las promesas han recibido un «sí». Y por él podemos responder: «Amén» a Dios, para gloria suya. Dios es quien nos confirma en Cristo a nosotros junto con vosotros. Él nos ha ungido, él nos ha sellado, y ha puesto en nuestros corazones, como prenda suya, el Espíritu.

Palabra de Dios

 

Salmo

Sal 118,129.130.131.132.133.135


R/.
 Haz brillar, Señor, tu rostro sobre tu siervo

Tus preceptos son admirables,
por eso los guarda mi alma. R/.

La explicación de tus palabras ilumina,
da inteligencia a los ignorantes. R/.

Abro la boca y respiro,
ansiando tus mandamientos. R/.

Vuélvete a mí y ten misericordia,
como es tu norma con los que aman tu nombre. R/.

Asegura mis pasos con tu promesa,
que ninguna maldad me domine. R/.

Haz brillar tu rostro sobre tu siervo,
enséñame tus leyes. R/.

 

*Lecturas de la 10ª Semana del Tiempo Ordinario Ciclo B*

Martes, 8 de junio de 2021

Evangelio

*Lectura del santo evangelio según san Mateo (5,13-18)*

En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: «Vosotros sois la sal de la tierra. Pero si la sal se vuelve sosa, ¿con qué la salarán? No sirve más que para tirarla fuera y que la pise la gente. Vosotros sois la luz del mundo. No se puede ocultar una ciudad puesta en lo alto de un monte. Tampoco se enciende una lámpara para meterla debajo del celemín, sino para ponerla en el candelero y que alumbre a todos los de casa. Alumbre así vuestra luz a los hombres, para que vean vuestras buenas obras y den gloria a vuestro Padre que está en el cielo.»

Palabra del Señor

 

*(Vosotros sois la luz del mundo)*

 

*El Señor, no me obliga, de mí depende si quiero ser luz. La verdad es dura y difícil; tengo que saber que lo que me espera. Cuando se enciende una linterna en la cueva donde viven los murciélagos, desde que ven la luz todos salen muy rápido. Lo mismo debe ser mi vida en este mundo. Pero el primero que tiene que someterse a la luz de la palabra soy yo, porque dentro tengo muchas oscuridades como: la hipocresía, la falta de sinceridad, los malos pensamientos. La buena noticia para mi es que el Señor elige lo que no sirve como a mí para manifestar su amor y su luz*

 

*El que desea y quiere amar, con el corazón según el Señor: llegará a ser, Santo*

 

V. El Señor nos bendiga, nos guarde de todo mal y nos lleve a la vida eterna.


R. Amén.