*Lecturas
de la 11ª Semana del Tiempo Ordinario Ciclo B*
Martes, 15 de junio de 2021
Primera
lectura
Lectura de
la segunda carta del apóstol san Pablo a los Corintios (8,1-9):
Queremos que conozcáis, hermanos, la gracia que Dios ha dado a las Iglesias de
Macedonia: En las pruebas y desgracias creció su alegría; y su pobreza extrema
se desbordó en un derroche de generosidad. Con todas sus fuerzas y aún por
encima de sus fuerzas, os lo aseguro, con toda espontaneidad e insistencia nos
pidieron como un favor que aceptara su aportación en la colecta a favor de los
santos. Y dieron más de lo que esperábamos: se dieron a sí mismos, primero al
Señor y luego, como Dios quería, también a nosotros. En vista de eso, como fue
Tito quien empezó la cosa, le hemos pedido que dé el último toque entre
vosotros a esta obra de caridad. Ya que sobresalís en todo: en la fe, en la
palabra, en el conocimiento, en el empeño y en el cariño que nos tenéis,
distinguíos también ahora por vuestra generosidad. No es que os lo mande; os
hablo del empeño que ponen otros para comprobar si vuestro amor es genuino. Porque
ya sabéis lo generoso que fue nuestro Señor Jesucristo: siendo rico, se hizo
pobre por vosotros, para enriqueceros con su pobreza.
Palabra de Dios
Salmo
Sal
145,2.5-6.7.8-9a
R/. Alaba, alma mía, al
Señor
Dichoso a quien auxilia el Dios de Jacob,
el que espera en el Señor, su Dios,
que hizo el cielo y la tierra,
el mar y cuanto hay en él;
que mantiene su fidelidad perpetuamente. R/.
Que hace justicia a los oprimidos,
que da pan a los hambrientos.
El Señor liberta a los cautivos. R/.
El Señor abre los ojos al ciego,
el Señor endereza a los que ya se doblan,
el Señor ama a los justos.
El Señor guarda a los peregrinos. R/.
*Lecturas
de la 11ª Semana del Tiempo Ordinario Ciclo B*
Martes, 15 de junio de 2021
Evangelio
*Lectura
del santo evangelio según san Mateo (5,43-48)*
En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: «Habéis oído que se dijo: “Amarás
a tu prójimo” y aborrecerás a tu enemigo. Yo, en cambio, os digo: Amad a
vuestros enemigos, y rezad por los que os persiguen. Así seréis hijos de vuestro
Padre que está en el cielo, que hace salir su sol sobre malos y buenos, y manda
la lluvia a justos e injustos. Porque, si amáis a los que os aman, ¿qué premio
tendréis? ¿No hacen lo mismo también los publicanos? Y si saludáis sólo a
vuestros hermanos, ¿qué hacéis de extraordinario? ¿No hacen lo mismo también
los gentiles? Por tanto, sed perfectos, como vuestro Padre celestial es
perfecto.»
Palabra del Señor
*Sed
perfectos, como vuestro Padre celestial es perfecto*
*Siento alegría con esta palabra porque el Señor, me
invita a la perfección. El Señor, me quiere entregarte el amor, pero un amor verdadero
que tiene el poder de supera toda fuerza humana, que puede traspasar las
barreras del odio, destroza el resentimiento, de hacer quedar mal el miedo a
perdonar y al mismo tiempo que dentro de mi tenga espacio suficiente para la
paz y el perdón. El Señor me necesita
para amar, que no me importe la raza, ni el color de la piel, que ame. Porque
amar es hacer el bien sin esperar nada a cambio*.
*El
que desea y quiere amar, con el corazón según el Señor: llegará a ser, Santo*
V. El Señor
nos bendiga, nos guarde de todo mal y nos lleve a la vida eterna.
R. Amén.