*Mi casa y yo serviremos al Señor*
*Oración dominical*
*Como hacer “La Oración Dominical” en familia*
1. *Reunida la familia se inicia con una oración*
2. *A continuación se lee el Evangelio del Domingo*
3. *Invitar a que comente algo sobre la lectura del Evangelio*
4. *El padre o la Madre les explica un poco la lectura según sus
posibilidades*
Lecturas de La Sagrada
Familia: Jesús, María y José - Ciclo B
Domingo, 27 de diciembre de 2020
Evangelio
Lectura del
Santo Evangelio según san Lucas (2,22-40):
22 Cuando se cumplieron los días de la
purificación de ellos, según la Ley de Moisés, llevaron a Jesús a Jerusalén
para presentarle al Señor,
23 como está escrito en la Ley del Señor: =
Todo varón primogénito será consagrado al Señor =
24 y para ofrecer en sacrificio = un par de
tórtolas o dos pichones =, conforme a lo que se dice en la Ley del Señor.
25 Y he aquí que había en Jerusalén un
hombre llamado Simeón; este hombre era justo y piadoso, y esperaba la
consolación de Israel; y estaba en él el Espíritu Santo.
26 Le había sido revelado por el Espíritu
Santo que no vería la muerte antes de haber visto al Cristo del Señor.
27 Movido por el Espíritu, vino al Templo; y
cuando los padres introdujeron al niño Jesús, para cumplir lo que la Ley
prescribía sobre él,
28 le tomó en brazos y bendijo a Dios
diciendo:
29 «Ahora, Señor, puedes, según tu palabra,
dejar que tu siervo se vaya en paz;
30 porque han visto mis ojos tu salvación,
31 la que has preparado a la vista de todos
los pueblos,
32 luz para iluminar a los gentiles y gloria
de tu pueblo Israel.»
33 Su padre y su madre estaban admirados de
lo que se decía de él.
34 Simeón les bendijo y dijo a María, su
madre: «Este está puesto para caída y elevación de muchos en Israel, y para ser
señal de contradicción -
35 ¡y a ti misma una espada te atravesará el
alma! - a fin de que queden al descubierto las intenciones de muchos
corazones.»
36 Había también una profetisa, Ana, hija de
Fanuel, de la tribu de Aser, de edad avanzada; después de casarse había vivido
siete años con su marido,
37 y permaneció viuda hasta los ochenta y
cuatro años; no se apartaba del Templo, sirviendo a Dios noche y día en ayunos
y oraciones.
38 Como se presentase en aquella misma hora,
alababa a Dios y hablaba del niño a todos los que esperaban la redención de
Jerusalén.
39 Así que cumplieron todas las cosas según
la Ley del Señor, volvieron a Galilea, a su ciudad de Nazaret.
40 El niño crecía y se fortalecía,
llenándose de sabiduría; y la gracia de Dios estaba sobre él.
Palabra del
Señor
(«Ahora, Señor, puedes, según tu palabra,
dejar que tu siervo se vaya en paz»).
*Esta palabra me llenan de esperanza, me hace sentir dichoso y a la vez
alegre. Las cosas que puedo tener y conseguir atreves de un niño, cuya misión
es traer luz a mi vida, y penetrando esta luz en mí, comienza a crecer dentro
de mí lo que más me hace falta siempre la Paz, y esta Paz dentro de mí,
iniciara mi liberación y mi sanación, para que pueda siempre sentir la cercanía
del Señor y entrar en sus descanso. Esta palabra me invita a un encuentro de
amor con la palabra del Señor, para que pueda experimentar y sentir la
presencia del Señor en mi vida*
*El
que desea y quiere amar, con el corazón según el Señor: llegará a ser, Santo*
V. El Señor nos bendiga, nos guarde de todo mal y nos lleve a la vida
eterna.
R. Amén.
*Recuerda la bendición a los hijos*