Miércoles, 16 de octubre de 2019
Lo que me dice el
Evangelio de Lucas 11,42-46. Ciclo
C («Maestro,
diciendo eso nos ofendes también a nosotros.» « ¡Ay de vosotros también,
maestros de la Ley, que abrumáis a la gente con cargas insoportables, mientras
vosotros no las tocáis ni con un dedo!») *Estas palabras del
Señor no son para herir a estas personas, es para amonestarlo para que puedan
despertar del sueño, de que todos hagan menos ellos. También esta lectura es
para despertarme a mí, que estoy muy cómodo exigiéndoles a los de más que me
quieran, que se preocupen por mí, que me traten bien. La buena noticia para mi
es que el Señor a mí también me habla no con dureza sino con rectitud para que
yo pueda entender que todo lo que quiero que me hagan los demás también ellos
esperan de mi eso mismo. El Señor me invita a no exigir sino que mi corazón
también esté dispuesto amar. Las personas están cansado de oír que yo les diga
Dios te ama, ellos prefieren mejor que yo ponga mi amor en práctica con ellos*
《
*El que DESEA y QUIERE amar, con el corazón según EL SEÑOR: llegará a ser,
SANTO* 》