Viernes, 6 de julio de 2018
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Lo
que me dice: El Evangelio de: (Mateo
9,9-13). (: «No
tienen necesidad de médico los sanos, sino los enfermos) *Esta
palabra tiene el poder, de destruir, de aplastar, de hacer pasar vergüenza a la
muerte. Recuerdo los día, donde he estado sentado, en mi preocupaciones, esos
días que estoy triste o preocupado sin saber porque, o esos días que me levanto
furioso, guapo con todos, sin nadie hacerme nada. Y me que do sentado en mi
mesa donde le cobro los impuesto a todos, y hay persona que se sienten mal
con migo, porque tengo un día que me rio con todos y al otro día no le hablo a
nadie, por esa forma de ser que tengo y yo no quisiera ser así, a mí me
gustaría cambiar, pero no tengo fuerza. Hoy con esta palabra que me dice el
Señor (No tienen necesidad de médico los sanos, sino los enfermos)
siento como una fuerza especial que me invita a romper con ese muro de mi
indiferencia, de aquello que me hace ser esclavo. Y a la vez siento mía esa invitación de estar
sentado a la mesa con el Señor, y él me dará la medicina necesaria
para todas mis enfermedades y fortalecerá en mí, el amor, la alegría y el deseode vivir. Bendito sea el Señor, que
me invita a seguirlo con mis enfermedades, con mis dificultades, con todos mis problemas,
para usar con migo “La Misericordia”*.
《 *El que DESEA y QUIERE amar, con el
corazón según EL SEÑOR: llegará a ser, SANTO* 》