Lecturas
del Lunes de la XVII Semana del Tiempo Ordinario
28 Jul 2025
Primera Lectura
Lectura del libro del Éxodo (32,15-24.30-34):
En aquellos días, Moisés se volvió y bajó del
monte con las dos tablas de la alianza en la mano. Las tablas estaban escritas
por ambos lados; eran hechura de Dios, y la escritura era escritura de Dios,
grabada en las tablas.
Al oír Josué el griterío del pueblo, dijo a Moisés: «Se oyen gritos de guerra
en el campamento.»
Contestó él: «No es grito de victoria, no es grito de derrota, que son cantos
lo que oigo.»
Al acercarse al campamento y ver el becerro y las danzas, Moisés, enfurecido,
tiró las tablas y las rompió al pie del monte. Después agarró el becerro que
habían hecho, lo quemó y lo trituró hasta hacerlo polvo, que echó en agua,
haciéndoselo beber a los israelitas.
Moisés dijo a Aarón: «¿Qué te ha hecho este pueblo, para que nos acarreases tan
enorme pecado?»
Contestó Aarón: «No se irrite mi señor. Sabes que este pueblo es perverso. Me
dijeron: «Haznos un Dios que vaya delante de nosotros, pues a ese Moisés que
nos sacó de Egipto no sabemos qué le ha pasado.» Yo les dije: «Quien tenga oro
que se desprenda de él y me lo dé»; yo lo eché al fuego, y salió este becerro.»
Al día siguiente, Moisés dijo al pueblo: «Habéis cometido un pecado gravísimo;
pero ahora subiré al Señor a expiar vuestro pecado.»
Volvió, pues, Moisés al Señor y le dijo: «Este pueblo ha cometido un pecado
gravísimo, haciéndose dioses de oro. Pero ahora, o perdonas su pecado o me
borras del libro de tu registro.»
El Señor respondió: «Al que haya pecado contra mí lo borraré del libro. Ahora
ve y guía a tu pueblo al sitio que te dije; mi ángel irá delante de ti; y cuando
llegue el día de la cuenta, les pediré cuentas de su pecado.»
Palabra de Dios
Salmo
Sal 105,19-20.21-22.23
R/. Dad gracias al Señor porque es
bueno
En Horeb se hicieron un becerro,
adoraron un ídolo de fundición;
cambiaron su gloria por la imagen de un toro
que come hierba. R/.
Se olvidaron de Dios, su salvador,
que había hecho prodigios en Egipto,
maravillas en el país de Cam,
portentos junto al mar Rojo. R/.
Dios hablaba ya de aniquilarlos;
pero Moisés, su elegido,
se puso en la brecha frente a él,
para apartar su cólera del exterminio. R/.
Lecturas
del Lunes de la XVII Semana del Tiempo Ordinario
28 Jul 2025
Evangelio
*Lectura del santo evangelio según san Mateo (13,31-35)*
En aquel tiempo, Jesús propuso esta otra parábola
a la gente: «El reino de los cielos se parece a un grano de mostaza que uno
siembra en su huerta; aunque es la más pequeña de las semillas, cuando crece es
más alta que las hortalizas; se hace un arbusto más alto que las hortalizas, y
vienen los pájaros a anidar en sus ramas.»
Les dijo otra parábola: «El reino de los cielos se parece a la levadura; una
mujer la amasa con tres medidas de harina, y basta para que todo fermente.»
Jesús expuso todo esto a la gente en parábolas y sin parábolas no les exponía
nada. Así se cumplió el oráculo del profeta: «Abriré mi boca diciendo
parábolas, anunciaré lo secreto desde la fundación del mundo.»
Palabra del Señor
*Que la
Paz del Señor llegue primero a vuestros corazones antes que mis palabras*
«El reino de los cielos se parece a la
levadura; una mujer la amasa con tres medidas de harina, y basta para que todo
fermente.»
*La levadura por sí
sola no produce ningún efecto, ella necesita de otros elementos para poderse
mezclar, pienso que la mujer quien está mesclando es la Santa Iglesia. Lo
fundamenta pienso que es el esfuerzo lleno de amor que se hace para que la
levadura pueda ser mesclada y se pueda confundir entra los demás elementos, al
punto de desaparecer por completo, y ya cuando ha desaparecido, hay que esperar
un tiempo prudente para que todo pueda fermentar. La Levadura para mí es, “La
Palabra del Señor” que su misión es entrar en mi corazón, en mi alma y en mi
mente, el amor es quien mescla todos los elementos y el Espíritu Santo es quien
hace fermentar todo, y cuando llegue el tiempo prudente, ya no seré yo quien
aparezca sino “La Palabra” hecha carne en mi*.
*El que desea y quiere amar, con el corazón
según el Señor: llegará a ser, Santo*
V. El
Señor nos bendiga, nos guarde de todo mal y nos lleve a la vida eterna.
R. Amén.