*Lecturas del San Ignacio de
Antioquía, obispo y mártir*
17 Oct 2024
Primera Lectura
Comienzo
de la carta del apóstol san Pablo a los Efesios (1,1-10):
Pablo,
apóstol de Cristo Jesús por designio de Dios, a los santos y fieles en Cristo
Jesús, que residen en Éfeso. Os deseo la gracia y la paz de Dios, nuestro
Padre, y del Señor Jesucristo. Bendito sea Dios, Padre de nuestro Señor
Jesucristo, que nos ha bendecido en la persona de Cristo con toda clase de
bienes espirituales y celestiales. Él nos eligió en la persona de Cristo, antes
de crear el mundo, para que fuésemos santos e irreprochables ante él por el
amor. Él nos ha destinado en la persona de Cristo, por pura iniciativa suya, a
ser sus hijos, para que la gloria de su gracia, que tan generosamente nos ha
concedido en su querido Hijo, redunde en alabanza suya. Por este Hijo, por su
sangre, hemos recibido la redención, el perdón de los pecados. El tesoro de su
gracia, sabiduría y prudencia ha sido un derroche para con nosotros, dándonos a
conocer el misterio de su voluntad. Éste es el plan que había proyectado
realizar por Cristo cuando llegase el momento culminante: recapitular en Cristo
todas las cosas del cielo y de la tierra.
Palabra
de Dios
Salmo
Sal
97,1.2-3ab.3cd-4.5-6
R/. El Señor da a conocer su
victoria
Cantad al
Señor un cántico nuevo,
porque ha hecho maravillas:
su diestra le ha dado la victoria,
su santo brazo. R/.
El Señor
da a conocer su victoria,
revela a las naciones su justicia:
se acordó de su misericordia
y su fidelidad en favor de la casa de Israel. R/.
Los
confines de la tierra han contemplado
la victoria de nuestro Dios.
Aclamad al Señor, tierra entera;
gritad, vitoread, tocad. R/.
Tañed la
cítara para el Señor,
suenen los instrumentos:
con clarines y al son de trompetas,
aclamad al Rey y Señor. R/.
*Lecturas del San Ignacio de
Antioquía, obispo y mártir*
17 Oct 2024
Evangelio
*Lectura del santo evangelio
según san Lucas (11,47-54)*
En aquel
tiempo, dijo el Señor: «¡Ay de vosotros, que edificáis mausoleos a los
profetas, después que vuestros padres los mataron! Así sois testigos de lo que
hicieron vuestros padres, y lo aprobáis; porque ellos los mataron, y vosotros
les edificáis sepulcros. Por algo dijo la sabiduría de Dios: «Les enviaré
profetas y apóstoles; a algunos los perseguirán y matarán»; y así, a esta
generación se le pedirá cuenta de la sangre de los profetas derramada desde la
creación del mundo; desde la sangre de Abel hasta la de Zacarías, que pereció
entre el altar y el santuario. Sí, os lo repito: se le pedirá cuenta a esta
generación. ¡Ay de vosotros, maestros de la Ley, que os habéis quedado con la
llave del saber; vosotros, que no habéis entrado y habéis cerrado el paso a los
que intentaban entrar!»
Al salir de allí, los escribas y fariseos empezaron a acosarlo y a tirarle de
la lengua con muchas preguntas capciosas, para cogerlo con sus propias
palabras.
Palabra del Señor
*Que la Paz del Señor llegue primero a
vuestros corazones antes que mis palabras*
(Sí, os aseguro que se pedirán
cuentas a esta generación).
*Esta palabra me golpea, porque al hablar de esta
generación me incluye a mí; yo sé lo que es bueno y no lo pongo en práctica, y
con mi forma de comportarme, con mi forma de hablar, y a veces con mi actitud
no permito que otros entren. Yo sé, que para entrar por el camino que conduce a
la vida eterna, se llama “La Cruz”, y a cada momento reniego de entrar en la
cruz, porque mi razón me dice, que para ser Cristiano no hay que sufrir tanto.
Sé, que el amor a la cruz, produce: alegría, esperanza y sanación. De que le
sirve un micrófono a un mudo, de que le sirven unos audífonos a un sordo, en
que me ayuda preocuparme, por el día de mañana, si no ha llegado; la llave del
secreto y del saber es el hoy; Si hoy escucho la voz del Señor, que no
endurezca mi corazón*.
*El que desea y quiere amar, con el corazón
según el Señor: llegará a ser, Santo*
V. El
Señor nos bendiga, nos guarde de todo mal y nos lleve a la vida eterna.
R. Amén.