*Lecturas del Miercoles de
la 31ª semana del Tiempo Ordinario*
Miércoles, 8 de noviembre de 2023
Primera lectura
Lectura de la carta del apóstol san Pablo a los
Romanos (13,8-10):
A nadie le debáis nada, más que amor; porque el que ama a su prójimo tiene
cumplido el resto de la ley. De hecho, el «no cometerás adulterio, no matarás,
no robarás, no envidiarás» y los demás mandamientos que haya, se resumen en
esta frase: «Amarás a tu prójimo como a ti mismo.» Uno que ama a su prójimo no
le hace daño; por eso amar es cumplir la ley entera.
Palabra de Dios
Salmo
Sal 111,1-2.4-5.9
R/. Dichoso el que se apiada y presta
Dichoso quien teme al Señor
y ama de corazón sus mandatos.
Su linaje será poderoso en la tierra,
la descendencia del justo será bendita. R/.
En las tinieblas brilla
como una luz el que es justo,
clemente y compasivo.
Dichoso el que se apiada y presta,
y administra rectamente sus asuntos. R/.
Reparte limosna a los pobres;
su caridad es constante, sin falta,
y alzará la frente con dignidad. R/.
*Lecturas del Miercoles de
la 31ª semana del Tiempo Ordinario*
Miércoles,
8 de noviembre de 2023
Evangelio
*Lectura del santo evangelio según san Lucas
(14,25-33)*
En aquel tiempo, mucha gente acompañaba a Jesús; él se volvió y les dijo: «Si
alguno se viene conmigo y no pospone a su padre y a su madre, y a su mujer y a sus
hijos, y a sus hermanos y a sus hermanas, e incluso a sí mismo, no puede ser
discípulo mío. Quien no lleve su cruz detrás de mí no puede ser discípulo mío.
Así, ¿quién de vosotros, si quiere construir una torre, no se sienta primero a
calcular los gastos, a ver si tiene para terminarla? No sea que, si echa los
cimientos y no puede acabarla, se pongan a burlarse de él los que miran,
diciendo: "Este hombre empezó a construir y no ha sido capaz de acabar. ¿O
qué rey, si va a dar la batalla a otro rey, no se sienta primero a deliberar si
con diez mil hombres podrá salir al paso del que le ataca con veinte mil? Y si
no, cuando el otro está todavía lejos, envía legados para pedir condiciones de
paz. Lo mismo vosotros: el que no renuncia a todos sus bienes no puede ser
discípulo mío.»
Palabra del Señor
*Que la Paz del Señor llegue primero
a vuestros corazones antes que mis palabras*
(El que no renuncia a todos sus bienes no puede ser discípulo
mío).
*Estas palabras no son para que me
ponga triste, es todo lo contrario, es para que sea el Señor, mi delicia, mi
seguridad, mi esperanza, es para que el Señor sea el centro de mi vida. He
podido darme cuenta que en algunas ocasiones cuando el Señor, es el centro de
mi vida, todo es diferente. Pensaba que mi vida no estaba apegada y me
encuentro con la sorpresa de que soy muy afectivo, que hay cosas que no uso y
están buenas y otras personas las necesitan, es por eso que esta palabra viene
en mi ayuda: (El que no renuncia a todos sus bienes no puede ser discípulo mío). El
Señor ya me ha elegido como uno de su discípulo, solo debo dejar el miedo y
aferrarme a una esperanza, que tiene promesas de vida eterna. Solo tengo que
ser paciente y practicar la misericordia e ir trabajando para que se construyan
caminos de paz*.
*El que desea y quiere amar, con el corazón según
el Señor: llegará a ser, Santo*
V. El
Señor nos bendiga, nos guarde de todo mal y nos lleve a la vida eterna.
R. Amén.