*Lecturas del Lunes de la
30ª semana del Tiempo Ordinario*
Lunes, 30
de octubre de 2023
Evangelio
*Lectura del santo evangelio según san Lucas (13,10-17)*
Un sábado, enseñaba Jesús en una sinagoga. Había una mujer que desde hacía
dieciocho años estaba enferma por causa de un espíritu, y andaba encorvada, sin
poderse enderezar.
Al verla, Jesús la llamó y le dijo: «Mujer, quedas libre de tu enfermedad.» Le
impuso las manos, y en seguida se puso derecha. Y glorificaba a Dios.
Pero el jefe de la sinagoga, indignado porque Jesús había curado en sábado,
dijo a la gente: «Seis días tenéis para trabajar; venid esos días a que os
curen, y no los sábados.»
Pero el Señor, dirigiéndose a él, dijo: «Hipócritas: cualquiera de vosotros,
¿no desata del pesebre al buey o al burro y lo lleva a abrevar, aunque sea
sábado? Y a ésta, que es hija de Abrahán, y que Satanás ha tenido atada
dieciocho años, ¿no había que soltarla en sábado?»
A estas palabras, sus enemigos quedaron abochornados, y toda la gente se
alegraba de los milagros que hacía.
Palabra del Señor
*Que la Paz del Señor llegue primero
a vuestros corazones antes que mis palabras*
(Mujer, quedas libre de tu
enfermedad).
*Me llama mucho a la atención dos
gestos de amor que el Señor realiza con esta mujer que lleva 18 años enferma.
El primer gesto de amor fue cuando la libera, y le quita la carga, que sostenía
durante 18 años. El segundo gesto de amor fue cuando les impuso sus manos para
enderezarle la vida. Esto me lleva a cuestionarme ¿Qué estoy cargando en mi
vida, que me impide sentir la presencia del Señor? ¿Qué cosas tengo, que me
hacen andar doblado? El Señor, me hace una invitación para que no me esconda o
disimule mi enfermedad. El Señor, se acerca a mí, me habla al oído y me dice:
que soy libre, y que quiere imponer su mano sobre mí para enderezar mi vida. El
Señor me perdona y me invita a dejar el miedo, porque él sabe que tengo miedo y
la única manera de vencer mis miedos, es dejando que él me toque y entregarle
mi alma a su amor*
*El que desea y quiere amar, con el corazón
según el Señor: llegará a ser, Santo*
V. El
Señor nos bendiga, nos guarde de todo mal y nos lleve a la vida eterna.
R. Amén.