Musica Para el Alma

jueves, 19 de octubre de 2023

LAS LECTURAS DEL VIERNES 20 DE OCTUBRE 2023


 

*Lecturas del Viernes de la 28ª semana del Tiempo Ordinario*

Viernes, 20 de octubre de 2023

Primera lectura

Lectura de la carta del apóstol san Pablo a los Romanos (4,1-8):

Veamos el caso de Abrahán, nuestro progenitor según la carne. ¿Quedó Abrahán justificado por sus obras? Si es así, tiene de qué estar orgulloso; pero, de hecho, delante de Dios no tiene de qué. A ver, ¿qué dice la Escritura?: «Abrahán creyó a Dios, y esto le valió la justificación.» Pues bien, a uno que hace un trabajo el jornal no se le cuenta como un favor, sino como algo debido; en cambio, a éste que no hace ningún trabajo, pero tiene fe en que Dios hace justo al impío, esa fe se le cuenta en su haber. También David llama dichoso al hombre a quien Dios otorga la justificación, prescindiendo de sus obras: «Dichoso el hombre que está absuelto de su culpa, a quien le han sepultado su pecado; dichoso el hombre a quien el Señor no le cuenta el pecado.»

Palabra de Dios

 

Salmo

Sal 31,1-2.5.11

R/.
 Tú eres mi refugio,
me rodeas de cantos de liberación


Dichoso el que está absuelto de su culpa,
a quien le han sepultado su pecado;
dichoso el hombre a quien el Señor
no le apunta el delito. R/.

Habla pecado, lo reconocí,
no te encubrí mi delito;
propuse: «Confesaré al Señor mí culpa»,
y tú perdonaste mi culpa y mi pecado. R/.

Alegraos, justos, y gozad con el Señor;
aclamadlo, los de corazón sincero. R/.

 

*Lecturas del Viernes de la 28ª semana del Tiempo Ordinario*

Viernes, 20 de octubre de 2023

Evangelio

*Lectura del santo evangelio según san Lucas (12,1-7)*

En aquel tiempo, miles y miles de personas se agolpaban hasta pisarse unos a otros.
Jesús empezó a hablar, dirigiéndose primero a sus discípulos: «Cuidado con la levadura de los fariseos, o sea, con su hipocresía. Nada hay cubierto que no llegue a descubrirse, nada hay escondido que no llegue a saberse. Por eso, lo que digáis de noche se repetirá a pleno día, y lo que digáis al oído en el sótano se pregonará desde la azotea. A vosotros os digo, amigos míos: no tengáis miedo a los que matan el cuerpo, pero no pueden hacer más. Os voy a decir a quién tenéis que temer: temed al que tiene poder para matar y después echar al infierno. A éste tenéis que temer, os lo digo yo. ¿No se venden cinco gorriones por dos cuartos? Pues ni de uno solo se olvida Dios. Hasta los pelos de vuestra cabeza están contados. Por lo tanto, no tengáis miedo: no hay comparación entre vosotros y los gorriones.»

Palabra del Señor

 

*Que la Paz del Señor llegue primero a vuestros corazones antes que mis palabras*

 

(No temáis a los que matan el cuerpo, y después de esto no pueden hacer más).

*Estas palabras vienen para traerme a mi alma sanación interior, porque siempre he vivido con miedo. En la escuela miedo a no pasar de curso, en la universidad miedo algunos profesores, en el trabajo miedo a los jefes y a que me cancelen, en el matrimonio miedo, miedo a la traición de algún amigo. El Señor me quiere sanar de ese miedo y me invita a reconocerme interiormente. Él, me acoge como soy, no para dejarme como soy sino para hacer de mí, alguien mucho mejor. El Señor sabe que puedo con su ayuda superar esos miedos y él ha puesto todo lo necesario en mi vida, él confía en mí, es por eso que me invita a confiar en él, y luego tendré las herramientas para confiar en mí. A lo único que debo tener miedo es, a no hacer la voluntad del Señor*. 

 

*El que desea y quiere amar, con el corazón según el Señor: llegará a ser, Santo*

 

V. El Señor nos bendiga, nos guarde de todo mal y nos lleve a la vida eterna.


R. Amén.