*Lecturas del Viernes de la 14ª semana del
Tiempo Ordinario*
Viernes, 8 de julio de 2022
Primera lectura
Lectura de la profecía de Oseas (14,2-10):
Así dice el Señor: «Israel,
conviértete al Señor Dios tuyo, porque tropezaste por tu pecado. Preparad
vuestro discurso, volved al Señor y decidle: "Perdona del todo la
iniquidad, recibe benévolo el sacrificio de nuestros labios. No nos salvará
Asiria, no montaremos a caballo, no volveremos a llamar Dios a la obra de
nuestras manos. En ti encuentra piedad el huérfano." Yo curaré sus
extravíos, los amaré sin que lo merezcan, mi cólera se apartará de ellos. Seré
para Israel como rocío, florecerá como azucena, arraigará como el Líbano.
Brotarán sus vástagos, será su esplendor como un olivo, su aroma como el
Líbano. Vuelven a descansar a su sombra: harán brotar el trigo, florecerán como
la viña; será su fama como la del vino del Líbano. Efraín, ¿qué te importan los
ídolos? Yo le respondo y le miro: yo soy como un ciprés frondoso: de mí
proceden tus frutos. ¿Quién es el sabio que lo comprenda, el prudente que lo
entienda? Rectos son los caminos del Señor: los justos andan por ellos, los
pecadores tropiezan en ellos.»
Palabra de Dios
Salmo
Sal 50
R/. Mi
boca proclamará tu alabanza, Señor
Misericordia, Dios mío, por tu bondad,
por tu inmensa compasión borra mi culpa;
lava del todo mi delito,
limpia mi pecado. R/.
Te gusta un corazón sincero,
y en mi interior me inculcas sabiduría.
Rocíame con el hisopo: quedaré limpio;
lávame: quedaré más blanco que la nieve. R/.
Oh Dios, crea en mí un corazón puro,
renuévame por dentro con espíritu firme;
no me arrojes lejos de tu rostro,
no me quites tu santo espíritu. R/.
Devuélveme la alegría de tu salvación,
afiánzame con espíritu generoso.
Señor, me abrirás los labios,
y mi boca proclamará tu alabanza. R/.
*Lecturas del Viernes de la 14ª semana del
Tiempo Ordinario*
Viernes, 8 de julio de 2022
Evangelio
*Lectura del santo evangelio según san Mateo (10,16-23)*
En aquel tiempo, dijo Jesús a sus
apóstoles: «Mirad que os mando como ovejas entre lobos; por eso, sed sagaces
como serpientes y sencillos como palomas. Pero no os fiéis de la gente, porque
os entregarán a los tribunales, os azotarán en las sinagogas y os harán comparecer
ante gobernadores y reyes, por mi causa; así daréis testimonio ante ellos y
ante los gentiles. Cuando os arresten, no os preocupéis de lo que vais a decir
o de cómo lo diréis: en su momento se os sugerirá lo que tenéis que decir; no
seréis vosotros los que habléis, el Espíritu de vuestro Padre hablará por
vosotros. Los hermanos entregarán a sus hermanos para que los maten, los padres
a los hijos; se rebelarán los hijos contra sus padres, y los matarán. Todos os
odiarán por mi nombre; el que persevere hasta el final se salvará. Cuando os
persigan en una ciudad, huid a otra. Porque os aseguro que no terminaréis con
las ciudades de Israel antes de que vuelva el Hijo del hombre.»
Palabra del Señor
*Que la Paz del Señor llegue primero a vuestros
corazones antes que mis palabras*
*(Sed,
pues, prudentes como las serpientes, y sencillos como las palomas)*.
*Ver la alegría o la dulzura en esta palabra produce
descanso y llama a la paz. Pero entrar dentro de esta palabra lleva un
desprendimiento y una entrega. Tengo que revestirme de lo que me ofrece el
Señor, que sea sagas, que sea hábil, inteligente, que sea astuto, prudente y al
mismo tiempo sencillo. El Señor, quiere que aprenda, que el otro sufre cuando
se entera que hablo mal de él, que se siente mal cuando le hablo mentiras,
cuando le desprecio. Por eso el Señor, como buen maestro que es, me instruye en
su sabiduría atreves de sus palabras y me invita a escuchar primera prestando
atención y a pensar ante de hablar, para no hacer daño*.
*El que desea y quiere amar, con el corazón
según el Señor: llegará a ser, Santo*
V. El Señor nos bendiga, nos guarde de todo mal y nos lleve a
la vida eterna.
R. Amén.