*Lecturas de Santiago
apóstol*
Lunes, 25 de julio de 2022
Primera lectura
Lectura del libro de los Hechos de los apóstoles
(4,33;5,12.27-33;12,2):
En aquellos días, los apóstoles daban
testimonio de la resurrección del Señor Jesús con mucho valor y hacían muchos
signos y prodigios en medio del pueblo. Los condujeron a presencia del Sanedrín
y el sumo sacerdote los interrogó: «¿No os habíamos prohibido formalmente
enseñar en nombre de ése? En cambio, habéis llenado Jerusalén con vuestra
enseñanza y queréis hacernos responsables de la sangre de ese hombre.»
Pedro y los apóstoles replicaron: «Hay que obedecer a Dios antes que a los
hombres. El Dios de nuestros padres resucitó a Jesús, a quien vosotros
matasteis, colgándolo de un madero. La diestra de Dios lo exaltó, haciéndolo
jefe y salvador, para otorgarle a Israel la conversión con el perdón de los
pecados. Testigos de esto somos nosotros y el Espíritu Santo, que Dios da a los
que le obedecen.» Esta respuesta los exasperó, y decidieron acabar con ellos.
Más tarde, el rey Herodes hizo pasar a cuchillo a Santiago, hermano de Juan.
Palabra de Dios
Salmo
Sal 66
R/. Oh Dios, que te alaben los pueblos,
que todos los pueblos te alaben
El Señor tenga piedad y nos bendiga,
ilumine su rostro sobre nosotros;
conozca la tierra tus caminos,
todos los pueblos tu salvación. R/.
Que canten de alegría las naciones,
porque riges el mundo con justicia,
riges los pueblos con rectitud
y gobiernas las naciones de la tierra. R/.
La tierra ha dado su fruto,
nos bendice el Señor, nuestro Dios.
Que Dios nos bendiga; que le teman
hasta los confines del orbe. R/.
Segunda lectura
Lectura de la segunda carta del apóstol san Pablo a
los Corintios (4,7-15):
Este tesoro del ministerio lo llevamos en vasijas de barro, para que se vea que
una fuerza tan extraordinaria es de Dios y no proviene de nosotros. Nos
aprietan por todos lados, pero no nos aplastan; estamos apurados, pero no
desesperados; acosados, pero no abandonados; nos derriban, pero no nos rematan;
en toda ocasión y por todas partes, llevamos en el cuerpo la muerte de Jesús,
para que también la vida de Jesús se manifieste en nuestro cuerpo. Mientras
vivimos, continuamente nos están entregando a la muerte, por causa de Jesús;
para que también la vida de Jesús se manifieste en nuestra carne mortal. Así,
la muerte está actuando en nosotros, y la vida en vosotros. Teniendo el mismo
espíritu de fe, según lo que está escrito: «Creí, por eso hablé», también
nosotros creemos y por eso hablamos; sabiendo que quien resucitó al Señor Jesús
también con Jesús nos resucitará y nos hará estar con vosotros. Todo es para
vuestro bien. Cuantos más reciban la gracia, mayor será el agradecimiento, para
gloria de Dios.
Palabra de Dios
*Lecturas de Santiago
apóstol*
Lunes, 25
de julio de 2022
Evangelio
*Lectura del santo evangelio según san Mateo
(20,20-28)*
En aquel tiempo, se acercó a Jesús la madre de los Zebedeos con sus hijos y se
postró para hacerle una petición. Él le preguntó: «¿Qué deseas?»
Ella contestó: «Ordena que estos dos hijos míos se sienten en tu reino, uno a
tu derecha y el otro a tu izquierda.»
Pero Jesús replicó: «No sabéis lo que pedís. ¿Sois capaces de beber el cáliz
que yo he de beber?»
Contestaron: «Lo somos.»
Él les dijo: «Mi cáliz lo beberéis; pero el puesto a mi derecha o a mi
izquierda no me toca a mí concederlo, es para aquellos para quienes lo tiene
reservado mi Padre.»
Los otros diez, que lo habían oído, se indignaron contra los dos hermanos. Pero
Jesús, reuniéndolos, les dijo: «Sabéis que los jefes de los pueblos los
tiranizan y que los grandes los oprimen. No será así entre vosotros: el que
quiera ser grande entre vosotros, que sea vuestro servidor, y el que quiera ser
primero entre vosotros, que sea vuestro esclavo. Igual que el Hijo del hombre
no ha venido para que le sirvan, sino para servir y dar su vida en rescate por
muchos.»
Palabra del Señor
*Que la Paz del Señor llegue primero a
vuestros corazones antes que mis palabras*
*«No
sabéis lo que pedís. ¿Podéis beber la copa que yo voy a beber?» Dícenle: «Sí,
podemos.»*
*Me llena de esperanza saber el
poder que tiene una madre cuando se acerca al corazón del Señor. Esta madre
está muy segura de cómo ha formado y educado a sus hijos, que con tanta
autoridad, hace esta petición al Señor. Enseguida el Señor les hace un
examen, para saber si la enseñanza que han recibido de su madre es
auténtica, la pregunta tiene su origen y su fundamento en “La Fidelidad”. ¿Sois capaces de beber el cáliz que yo he de beber? Y la respuesta fue segura y
convincente. Es la madre quien a temprana edad tiene la misión de preparar el
corazón de los hijos al Señor. Me siento alegre de estar en mi madre la
iglesia, que de igual manera está preparando mi corazón para ser fiel al
Señor*.
*El que desea y quiere amar, con el corazón
según el Señor: llegará a ser, Santo*
V. El Señor
nos bendiga, nos guarde de todo mal y nos lleve a la vida eterna.
R. Amén.