*Lecturas del Miércoles de la 22ª semana del Tiempo Ordinario
Miércoles, 1 de septiembre de 2021*
Evangelio
*Lectura
del santo evangelio según san Lucas (4,38-44)*
En aquel tiempo, al salir Jesús de la sinagoga, entró en casa de
Simón. La suegra de Simón estaba con fiebre muy alta y le pidieron que hiciera
algo por ella. Él, de pie a su lado, increpó a la fiebre, y se le pasó; ella,
levantándose en seguida, se puso a servirles. Al ponerse el sol, los que tenían
enfermos con el mal que fuera se los llevaban; y él, poniendo las manos sobre
cada uno, los iba curando.
De muchos de ellos salían también demonios, que gritaban: «Tú eres el Hijo de
Dios.»
Los increpaba y no les dejaba hablar, porque sabían que él era el Mesías. Al
hacerse de día, salió a un lugar solitario. La gente lo andaba buscando; dieron
con él e intentaban retenerlo para que no se les fuese.
Pero él les dijo: «También a los otros pueblos tengo que anunciarles el reino
de Dios, para eso me han enviado.»
Y predicaba en las sinagogas de Judea.
Palabra del Señor
(También a otras
ciudades tengo que anunciar la Buena Nueva del Reino de Dios, porque a esto he
sido enviado).
*Es impresionante como el Señor limpia todas mis
maldades y me cura de mis dolencias. Si pudiera dar un gran suspiro y sentir
cuanto amor, cuanto consuelo, cuanta esperanza, hay para mí en el Señor.
Tendría siempre que bendecir y dar gracias en todo tiempo, porque el Señor no
se cansa de trabajar por mí. Siempre pendiente de mí, tiene tantas cosas que
hacer y al mismo tiempo está pendiente de cargar con mis dolencias, mis
angustias, mis miedos, mis enfermedades, y lo más hermoso siempre tiene tiempo,
para mostrarme su amor, su dulzura, y pendiente de todas mis entradas y
salidas*.
*El
que desea y quiere amar, con el corazón según el Señor: llegará a ser, Santo*
V. El Señor
nos bendiga, nos guarde de todo mal y nos lleve a la vida eterna.
R. Amén.