*Lecturas
de la 3ª Semana del Tiempo Cuaresma Ciclo B*
Miércoles, 10 de marzo de 2021
Primera lectura
Lectura del
libro del Deuteronomio (4,1.5-9):
Moisés habló al pueblo, diciendo:
«Ahora, Israel, escucha los mandatos y decretos que yo os enseño para que,
cumpliéndolos, viváis y entréis a tomar posesión de la tierra que el Señor,
Dios de vuestros padres, os va a dar.
Mirad: yo os enseño los mandatos y decretos, como me mandó el Señor, mi Dios,
para que los cumpláis en la tierra donde vais a entrar para tomar posesión de
ella.
Observadlos y cumplidlos, pues esa es vuestra sabiduría y vuestra inteligencia
a los ojos de los pueblos, los cuales, cuando tengan noticia de todos estos
mandatos, dirán:
“Ciertamente es un pueblo sabio e inteligente esta gran nación”.
Porque ¿dónde hay una nación tan grande que tenga unos dioses tan cercanos como
el Señor, nuestro Dios, siempre que lo invocamos?
Y ¿dónde hay otra nación tan grande que tenga unos mandatos y decretos tan
justos como toda esta ley que yo os propongo hoy?
Pero, ten cuidado y guárdate bien de olvidar las cosas que han visto tus ojos y
que no se aparten de tu corazón mientras vivas; cuéntaselas a tus hijos y a tus
nietos».
Palabra de Dios
Salmo
Sal
147,12-13.15-16.19-20
R/. Glorifica al Señor,
Jerusalén
V/. Glorifica al Señor, Jerusalén;
alaba a tu Dios, Sión.
Que ha reforzado los cerrojos de tus puertas,
y ha bendecido a tus hijos dentro de ti. R/.
V/. Él envía su mensaje a la tierra,
y su palabra corre veloz;
manda la nieve como lana,
esparce la escarcha como ceniza. R/.
V/. Anuncia su palabra a Jacob,
sus decretos y mandatos a Israel;
con ninguna nación obró así,
ni les dio a conocer sus mandatos. R/.
Miércoles, 10 de marzo de 2021
Evangelio
*Lectura
del santo evangelio según san Mateo (5,17-19)*
En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos:
«No creáis que he venido a abolir la Ley y los Profetas: no he venido a abolir,
sino a dar plenitud.
En verdad os digo que antes pasarán el cielo y la tierra que deje de cumplirse
hasta la última letra o tilde de la ley.
El que se salte uno solo de los preceptos menos importantes y se lo enseñe así
a los hombres será el menos importante en el reino de los cielos.
Pero quien los cumpla y enseñe será grande en el reino de los cielos».
Palabra del Señor
(No he venido a abolir, sino a
dar plenitud)
*En un buen banquete para mí, es
cuando esta mí comida favorita, cuando
están mis postres preferidos y luego un buen sofá, bien cómodo, para sentirme totalmente
satisfecho, y llegar a la plenitud. Eso es para mí la ley y los profetas.
La ley es la comida, para una buena vida y los profetas el postre, la palabra
que me alumbran e ilumina el camino, y el buen sofá es, el Señor es ese lugar donde
puedo descansar, donde me puedo recostar y a disfrutar de la plenitud. Esa plenitud
para mí es desear hacer la voluntad del Señor. Él es la plenitud; en él están la ley y los profetas*.
*El
que desea y quiere amar, con el corazón según el Señor: llegará a ser, Santo*
V. El Señor
nos bendiga, nos guarde de todo mal y nos lleve a la vida eterna.
R. Amén.