Musica Para el Alma

martes, 24 de marzo de 2020

LAS LECTURAS DEL MIÉRCOLES 25 SOLEMNIDAD DE LA ANUNCIACIÓN


Oración, lecturas del día y reflexión
Lecturas de la semana 4º de Cuaresma - Ciclo A

Solemnidad de la Anunciación
Miércoles, 25 de marzo de 2020

Oración Colecta

Oh Dios y Padre nuestro:
Tú sigues buscándonos,
con un amor tan apasionado como el de una madre,
aun cuando te hayamos abandonado.
Danos esperanza y valor,
especialmente cuando nos sentimos inseguros.
Danos la seguridad de que tú quieres que vivamos
en la certeza y convencimiento de tu amor
y de que tú permaneces siempre con nosotros
por medio de Jesucristo, tu Hijo, nuestro Señor.

Miércoles, 25 de marzo de 2020
Primera lectura Isaías 7,10-14;8-10 

Volvió el Señor a hablar a Ajaz diciendo: «Pide para ti una señal al Señor tu Dios en lo profundo del seol o en lo más alto.» Dijo Ajaz: «No la pediré, no tentaré al Señor.» Dijo Isaías: «Oíd, pues, casa de David: ¿Os parece poco cansar a los hombres, que cansáis también a mi Dios? Pues bien, el Señor mismo va a daros una señal: He aquí que una doncella está encinta y va a dar a luz un hijo, y le pondrá por nombre Emmanuel. Trazad un plan: fracasará. Decid una palabra: no se cumplirá. Porque con nosotros está Dios.

Salmo 40,7-11

R. Aquí estoy Señor para hacer tu voluntad
Ni sacrificio ni oblación querías, pero el oído me has abierto; no pedías holocaustos ni víctimas, dije entonces: Heme aquí, que vengo.
R. Aquí estoy Señor para hacer tu voluntad

Se me ha prescrito en el rollo del libro hacer tu voluntad. Oh Dios mío, en tu ley me complazco en el fondo de mi ser. He publicado la justicia en la gran asamblea; mira, no he contenido mis labios, tú lo sabes.
R. Aquí estoy Señor para hacer tu voluntad
No he escondido tu justicia en el fondo de mi corazón, he proclamado tu lealtad, tu salvación, no he ocultado tu amor y tu verdad a la gran asamblea.
R. Aquí estoy Señor para hacer tu voluntad

Segunda lectura Hebreo 10,4-10
Pues es imposible que sangre de toros y machos cabríos borre pecados. Por eso, al entrar en este mundo, dice: Sacrificio y oblación no quisiste; pero me has formado un cuerpo. Holocaustos y sacrificios por el pecado no te agradaron. Entonces dije: ¡He aquí que vengo - pues de mí está escrito en el rollo del libro - a hacer, oh Dios, tu voluntad!  Dice primero: Sacrificios y oblaciones y holocaustos y sacrificios por el pecado no los quisiste ni te agradaron - cosas todas ofrecidas conforme a la Ley - entonces - añade -: He aquí que vengo a hacer tu voluntad. Abroga lo primero para establecer el segundo. Y en virtud de esta voluntad somos santificados, merced a la oblación de una vez para siempre del cuerpo de Jesucristo.

Palabra de Dios

Miércoles, 25 de marzo de 2020
Evangelio y Reflexión  según san Lucas 1,26-38

Al sexto mes fue enviado por Dios el ángel Gabriel a una ciudad de Galilea, llamada Nazaret, a una virgen desposada con un hombre llamado José, de la casa de David; el nombre de la virgen era María. Y entrando, le dijo: «Alégrate, llena de gracia, el Señor está contigo.» Ella se conturbó por estas palabras, y discurría qué significaría aquel saludo. El ángel le dijo: «No temas, María, porque has hallado gracia delante de Dios; vas a concebir en el seno y vas a dar a luz un hijo, a quien pondrás por nombre Jesús. El será grande y será llamado Hijo del Altísimo, y el Señor Dios le dará el trono de David, su padre; reinará sobre la casa de Jacob por los siglos y su reino no tendrá fin.» María respondió al ángel: « ¿Cómo será esto, puesto que no conozco varón?» El ángel le respondió: «El Espíritu Santo vendrá sobre ti y el poder del Altísimo te cubrirá con su sombra; por eso el que ha de nacer será santo y será llamado Hijo de Dios. Mira, también Isabel, tu pariente, ha concebido un hijo en su vejez, y este es ya el sexto mes de aquella que llamaban estéril, porque ninguna cosa es imposible para Dios.» Dijo María: «He aquí la esclava del Señor; hágase en mí según tu palabra.» Y el ángel dejándola se fue.

Palabra del Señor

(El Espíritu Santo vendrá sobre ti, y la fuerza del Altísimo te cubrirá con su sombra).
*Yo me quedo pensando ¿Cómo utilizaba María su tiempo? Porque ella comía y toma va agua lo mismo o meno que yo. Pienso que ella, no malgastaba su tiempo y si algo no entendía lo guardaba en su corazón. En ocasiones malgasto mi tiempo, compartiendo malas noticias a otras personas sin saber todo el daño que estoy haciendo. El Señor me invita a descubrir que también sobre mí se posa el Espíritu Santo. Es bueno que utilice mi tiempo llevando tranquilidad, y buenas informaciones a las personas que sienten que en mi tienen un amigo*   

*El que desea y quiere amar, con el corazón según el Señor: llegará a ser, Santo*

Oración después de la Comunión

Oh Dios y Padre nuestro:
En esta eucaristía
tu Hijo Jesús ha renovado con su sangre
tu Alianza de vida y amor con nosotros
y hecho más profundo el lazo de amor contigo
y con todos los miembros del pueblo escogido.
Haz que escuchemos atentamente sus palabras de vida,
para que pasemos de la muerte a la vida
y crezcamos hasta la plena madurez
del mismo Jesucristo, Hijo tuyo y Señor nuestro,
que vive y reina por los siglos de los siglos.

V. El Señor nos bendiga, nos guarde de todo mal y nos lleve a la vida eterna.
R. Amén.