Lo que me dice: El Santo Evangelio: Sábado, 11 de marzo de
2017
(Mateo
5,43-48). *Siempre he pensado que amar, es gozar de algo bueno, amar es
algo muy bonito, se siento como algo dulce, muy hermoso, para mi amar es un
espectáculo donde espero un bien, que me produce alegría, PERO esto que
me manda el Señor, me queda muy grande y es fuerte, amar aúna persona que goza
cuando me va mal, amar a una persona que se entristece, que hace pique, que
llora, cuando las cosas me están saliendo bien, y que no lo puede fingir, ¿y
porque estoy tan seguro de esto? porque yo he sentido todo esto en mí,
amargura, celo, envidia, soberbia, ira, calor, y algunas cosas más que no me
atrevo a escribir, cuando a una persona que me cae mal y quiero que le valla
mal y le está yendo de lo mas bien y yo deseando en mi corazón que le valla
mal. El Señor me hace una invitación formal, a pasar por el misterio de la
Cruz, y romper las frontera, que me he creado frente al otro, a que pueda ver,
mis limites, que el amor es algo muy serio, es algo, más para allá de mis
límites, de mis fuerza, de mis antojos, el amor, al cual el Señor me invita, es
un amor que supera todas mi fuerza, todas mis barreras, el Señor me invita, a
un amor, que rompe el odio en mil pedazo, a un amor que tiene todo el poder, de
destrozar mi razón, un amor que tiene la capacidad de descuartizar mi orgullo,
un amor que tiene la capacidad de traspasar todas mis fronteras y mis límites.
El Señor me necesita para amar, que no me importe la raza, ni el color de la
piel, que ame y haga el bien*. SEÑOR REGALAME, LA GRACIA, EL DON Y LA MISERICORDIA,
DE FIARME DE TI.
《 El que DESEA y QUIERE amar, con el corazón según EL
SEÑOR: llegará a ser,
SANTO 》