Musica Para el Alma

jueves, 16 de junio de 2016

VIERNES 17 LO QUE ME DICE EL EVANGELIO

LO QUE ME DICE
EL SANTO EVANGELIO
Viernes, 17 de junio de 2016
Mateo (6,19-23):Donde está tu tesoro, allí está tu corazón»).  MIS TESOROS están puesto en aquello que se muere, sin duda mi corazón va corriendo a la muerte. PERO SI MIS TESOROS están en aquello que vive, que nunca muere, que para mí es la palabra, estoy caminado a la vida eterna. Pero entender esto, para mí no es fácil, que renunciar, a mi gusto, a mi placer de murmurar, a mis juicios, quitarme los lente que me hacen ver que nada es nada, que me da lo mismo una hormiga que un elefante (claro siempre y cuando no este sobre mi cabeza). Ver que el camino a la felicidad, está lleno de obstáculo, de sacrificio, de persecución, de humillaciones, para mí no es fácil, dejar los placeres, la comodidad, los aplausos, los honores, y las gratificaciones que me brindan los placeres, y que me digan que esto es mentira. La pedagogía del amor del Señor, es sin medida, como me centra y me dice donde se acumulan todos mis problemas, y me lo hace ver diciéndome, sobre la luz. Y para esto es muy importante mi sinceridad, como debo ser sincero, con migo mismo, ( como hay un dicho: *que no hay más siego que yo, cuando no quiero ver, ni aceptar algo malo, que hay en mi* que todo el mundo lo ve meno yo, porque no quiero) yo no tengo la capacidad de reconocer lo realmente valioso, como los consejos, que muchas persona, me han dado, y al final hago lo que se me viene en gana, cuantas persona, buenas y muy santas, han gastado su tiempo precioso, aconsejándome por mi bien.  Señor bendice con tu amor, a tantas persona, muy valiosas, que con amor y su sabiduría, me han aconsejado y me aconsejan, para que mi tesoro, yo lo pueda colocar en ti, y que te coloque a ti, dentro de mí, Señor sana mis oído, para yo escuchar bien tu palabra, no para interpretar lo que a mí me dé la gana, y que se encienda dentro de mí, ese foco potente que es tu palabra y mis ojos puedan ver el tesoro de tu amor.



El que DESEA y QUIERE amar, con el corazón según EL SEÑOR: llegará a ser, SANTO