Lo que me dice: El Santo Evangelio:
Lunes, 19 de
diciembre de 2016 (« El Ángel Gabriel anuncia el nacimiento de Juan
Bautista: (Lucas
1,5-25) »). Hay dos cosas que
me llaman a la atención: 1ro. * “para convertir los corazones de los padres hacía los hijos”
* y la 2da. * «
¿Cómo estaré seguro de eso? Porque yo soy viejo, y mi mujer es de edad avanzada».*
En la 1ra. Enseñanza: Me queda muy claro como yo he distorsionado esta
enseñanza en mi familia, yo me preocupo por trabajar y trabajar para darle lo
mejor a mis hijos, que no pasen necesidades como yo pase, y esto me lleva a la
exigencia, les exijo para que valoren mi esfuerzo y es el al contrario, es mi
corazón el que tiene que convertirse hacia mis hijos, *y como puede ser esto* y
me pongo a pensar como niño, y puedo descubrir que cuando era pequeño, en mi
mente siempre estaba la idea *cuando sea grande quiero ser como mis padres*,
pero ellos no ven en mi la fe, sino mi afán por hacer dinero y darme buena
viada, por lo tanto entre más aprisa pida al Señor la fe, para la conversión
de mi corazón, sin duda alguna será un
paso gigantesco que estaré dando para la salud y el bienestar de mis hijos. Y
la segunda enseñanza que recibo con alegría es que yo también he cuestionado
seriamente el plan de DIOS en mi vida, como también la duda se ha apoderado
muchas veces de mi vida, como también he dicho (yo no puedo) (es que no me nace
de dentro) (imposible para mí) (ya yo no tengo solución) (y me he aferrado a un proverbio que no ayuda
en nada mi pequeña fe *genio y figura hasta la sepultura*). La gran enseñanza y
además hermosa esperanza está, en que el señor, que es mi Señor: *Nada absolutamente
nada, es imposible para DIOS *.
《 El que DESEA y QUIERE amar, con el corazón según EL
SEÑOR: llegará a ser,
SANTO 》