Miércoles, 3 de febrero de 2021
Evangelio
*Lectura
del santo evangelio según san Marcos (6,1-6)*:
1 Salió de allí y vino a su patria, y sus
discípulos le siguen.
2
Cuando llegó el sábado se puso a enseñar en la sinagoga. La multitud, al oírle,
quedaba maravillada, y decía: «¿De dónde le viene esto? y ¿qué sabiduría es
ésta que le ha sido dada? ¿Y esos milagros hechos por sus manos?
3
¿No es éste el carpintero, el hijo de María y hermano de Santiago, José, Judas
y Simón? ¿Y no están sus hermanas aquí entre nosotros?» Y se escandalizaban a
causa de él.
4
Jesús les dijo: «Un profeta sólo en su patria, entre sus parientes y en su casa
carece de prestigio.»
5
Y no podía hacer allí ningún milagro, a excepción de unos pocos enfermos a
quienes curó imponiéndoles las manos.
6
Y se maravilló de su falta de fe. Y recorría los pueblos del contorno
enseñando.
Palabra del Señor
*(No pudo
hacer allí ningún milagro, sólo curó algunos enfermos imponiéndoles las manos)*.
*Puedo
sentir el gran amor del Señor por mí, que bien me queda esta lectura. Es impresiónate
como quiere llevarme a su encuentro atreves de la luz de su palabra. El Señor
quiere arrancarme del dominio de las tinieblas; para que irradie en mí la luz
de su palabra, la luz de su amor. El Señor se pone a mi lado para vencer mis enemigos
que se ocultan de tras de la oscuridades que tengo. El Señor me dice una
palabra, que es muy cierta y me duele mucho y es que me cuesta mucho confiar
plenamente en él; por eso no puede hacer ningún milagro importa en mi vida,
solo me sana de algunas cosas. Si confiara en el Señor, no me costaría tanto
perdona y pedir perdón, y desear ser el último*.
*El que desea y
quiere amar, con el corazón según el Señor: llegará a ser, Santo*
V. El Señor
nos bendiga, nos guarde de todo mal y nos lleve a la vida eterna.
R. Amén.