LO QUE ME DICE
EL SANTO EVANGELIO
Viernes, 24 de junio de 2016
Lucas (1, 56-66.80) 《El nacimiento de Juan Bautista. Juan es su nombre》. Para
mi resalta chocante en la forma en que la mujer, siempre es un ser, de no
creencia, como si no tuviera ningún tipo de autoridad, especialmente cuando
está el silencio del marido, cuando la mujer habla es signo de que hay que contradecir
o poner entre dicho sus palabras, pero cuando aparece el apoyo del esposo, todo
se extrañan, pero nadie de la que la ofendió o pensó mar de ella pide perdón, (me
ha pasado a mí, cuando ando acelerado y manejando de forma imprudente, y me
encuentro delante un vehículo, conduciendo con todas las de la ley, y en mi
brutalidad digo, seguro que la que va conduciendo, es una mujer, *pero son
pocas la veces, que pido perdón a DIOS*, *por ese juicio perverso, lleno de ira,
y soberbia, contra una persona*, que está conduciendo según las leyes de mi
país, *Señor perdóname por ser un idiota*). Y puedo ver, que con las cosas que
se refieren; a las palabras del Señor, es la mujer la que provoca que el hombre
reciba la capacidad, de hablar, de bendecir, de predicar. Nota: detrás de cada
buen predicador de la palabra de DIOS, hay una mujer, que es la que da la
fuerza, y que es al mismo tiempo, a la que más, se le reclama, a la que muchos
tratan de callar, de silenciar y esa mujer es la IGLESIA. Señor que yo pueda
hacer realidad en mi vida algún día las palabras sapientísimas de Zacarías, en
mi boca, en mi alma y en todo mi ser. Bendito sea el Señor, DIOS de Israel,
porque ha visitado y redimido a su pueblo, suscitándonos una fuerza de
salvación……..
《 El
que DESEA y QUIERE amar, con el corazón según EL SEÑOR: llegará a ser, SANTO 》