Lecturas del Martes de la XXIV
Semana del Tiempo Ordinario
16 Sep 2025
Evangelio
*Lectura del santo Evangelio según san Lucas (7,11-17)*
En aquel tiempo, se dirigía Jesús a una población llamada Naín,
acompañado de sus discípulos y de mucha gente. Al llegar a la entrada de la
población, se encontró con que sacaban a enterrar a un muerto, hijo único de
una viuda, a la que acompañaba una gran muchedumbre.
Cuando el Señor la vio, se compadeció de ella y le dijo: «No llores.»
Acercándose al ataúd, lo tocó y los que lo llevaban se detuvieron. Entonces
dijo Jesús: «Joven, yo te lo mando: levántate.»
Inmediatamente el que había muerto se levantó y comenzó a hablar. Jesús se lo
entregó a su madre.
Al ver esto, todos se llenaron de temor y comenzaron a glorificar a Dios,
diciendo: «Un gran profeta ha surgido entre nosotros. Dios ha visitado a su
pueblo.»
La noticia de este hecho se divulgó por toda Judea y por las regiones
circunvecinas.
Palabra del Señor
*Que la
Paz del Señor llegue primero a vuestros corazones antes que mis palabras*
(«¡Muchacho, a ti te lo digo, levántate!»).
*El
Señor viene a consolarme porque es muy cierto que paso el día caminado detrás
de un ataúd, me paso más tiempo lamentándome y dando grito que buscando la
manera de sonreír, me preocupo más por estar triste, que, por estar alegre, y
lo malo de todo esto es que le paso todas mis angustias a otras personas,
aunque no me conozcan o nunca me hayan visto. Hoy el Señor me dice «No llores»
porque todos los días, el me regala un día nuevo, lo que tengo es que aprender a
decir: Dios mío, concédeme la
serenidad para aceptar las cosas que no puedo cambiar, dame el valor y quítame
el miedo para poder cambiar las cosas que, si puedo cambiar, y dame la
sabiduría para hacer lo que te agrada*
*El que desea y quiere amar, con el corazón
según el Señor: llegará a ser, Santo*
V. El
Señor nos bendiga, nos guarde de todo mal y nos lleve a la vida eterna.
R. Amén.