Lecturas
del miércoles 23 de la XVI Semana del Tiempo Ordinario
Santa Brígida, Religiosa
*Evangelio según san Mateo: 13, 1-9*
Un día salió Jesús de la casa donde se
hospedaba y se sentó a la orilla del mar. Se reunió en torno suyo tanta gente,
que él se vio obligado a subir a una barca, donde se sentó, mientras la gente
permanecía en la orilla. Entonces Jesús les habló de muchas cosas en parábolas
y les dijo: "Una vez salió un sembrador a sembrar, y al ir arrojando la
semilla, unos granos cayeron a lo largo del camino; vinieron los pájaros y se
los comieron. Otros granos cayeron en terreno pedregoso, que tenía poca tierra;
ahí germinaron pronto, porque la tierra no era gruesa; pero cuando subió el
sol, los brotes se marchitaron, y como no tenían raíces, se secaron. Otros
cayeron entre espinos, y cuando los espinos crecieron, sofocaron las plantitas.
Otros granos cayeron en tierra buena y dieron fruto: unos, ciento por uno;
otros, sesenta; y otros, treinta. El que tenga oídos, que oiga".
Palabra
del Señor.
*Que la Paz del Señor llegue primero a vuestros corazones
antes que mis palabras*
(Cayó en tierra buena y dio grano).
*La semilla al borde del camino, hicieron una función y fue convertirse
en alimento para las aves. Las que cayeron en terreno pedregoso quisieron, pero
perecieron por falta de tierra y sol, ósea si dejo mi vida crecer sin la
palabra que es la tierra y sin el sol que es el mismo Dios, aunque yo quiera si
no lo intento, también voy a perecer. Otras cayeron entre espino y fueron
sofocadas, esta no tuvo la oportunidad que tengo yo, porque yo tengo la
oportunidad de parar algo o dejarlo seguir, yo tengo la oportunidad de hablar
mal de alguien o hablar bien yo soy quien decide, si me dejo sofocar o no. El deseo
del sembrado es que toda semilla de buen fruto, una forma de abonar la semilla
es: Escuchar, leer y meditar la palabra, cuando escucho, leo y medito, algo se
va quedando en mi y poco a poco va tocando mi vida y comienzo a crecer para
bien y mi corazón se ilumina y comiencen a salir de mis frutos de amor y de paz*
*El que desea y quiere amar, con el corazón
según el Señor: llegará a ser, Santo*
V. El
Señor nos bendiga, nos guarde de todo mal y nos lleve a la vida eterna.
R. Amén.