*Lecturas de Los Santos Joaquín
y Ana, padres de la bienaventurada Virgen María*
26 Jul 2024
Evangelio
*Lectura del santo evangelio
según san Mateo (13,18-23)*
En aquel
tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: «Vosotros oíd lo que significa la parábola
del sembrador: Si uno escucha la palabra del reino sin entenderla, viene el
Maligno y roba lo sembrado en su corazón. Esto significa lo sembrado al borde
del camino. Lo sembrado en terreno pedregoso significa el que la escucha y la
acepta en seguida con alegría; pero no tiene raíces, es inconstante, y, en
cuanto viene una dificultad o persecución por la palabra, sucumbe. Lo sembrado
entre zarzas significa el que escucha la palabra; pero los afanes de la vida y
la seducción de las riquezas la ahogan y se queda estéril. Lo sembrado en
tierra buena significa el que escucha la palabra y la entiende; ése dará fruto
y producirá ciento o sesenta o treinta por uno.»
Palabra del Señor
*Que la Paz del Señor llegue primero a
vuestros corazones antes que mis palabras*
(El que
escucha la palabra y la entiende; ése dará fruto)
*Constantemente Jesús siempre invita a sus discípulos a escuchar poniendo
atención, y poniendo todo su interés para que pueda luego decir lo que dijo
Jesús. Cuando escucho sin interés, terminare sin entender nada, luego
el maligno me interpretará a su manera, y poco a poco me ira robando las
gracias que Jesús ha depositado en mí corazón. Cuando estoy lleno de odio, de
rabia, de soberbia o de tristeza, en ese momento soy un terreno pedregoso, por
lo cual es muy difícil que la palabra pueda penetrar dentro de mí, no tengo
raíces, soy inconstante, y, en cuanto viene una dificultad o persecución por la
palabra, me seco. Cuando estoy lleno de afanes tampoco puedo escuchar la
palabra, porque mis pensamiento están enfocado en los afanes de ese momento,
estoy ahogado. Solo la reconciliación y la entrega al Señor, me permite escucha
la palabra y entenderla; es ahí cuando daré fruto que producirán cientos de
cosas buenas y productivas para los demás*
*El que desea y quiere amar, con el corazón
según el Señor: llegará a ser, Santo*
V. El
Señor nos bendiga, nos guarde de todo mal y nos lleve a la vida eterna.
R. Amén.