Evangelio
Lectura del
santo evangelio según san Mateo (22,34-40):
33 Al oír esto, la gente se
maravillaba de su doctrina.
34 Mas los fariseos, al enterarse de que
había tapado la boca a los saduceos, se reunieron en grupo,
35 y uno de ellos le preguntó con ánimo de
ponerle a prueba:
36 «Maestro, ¿cuál es el mandamiento mayor
de la Ley?»
37 El le dijo: = «Amarás al Señor, tu Dios,
con todo tu corazón, con toda tu alma y con toda tu mente. =
38 Este es el mayor y el primer mandamiento.
39 El segundo es semejante a éste: = Amarás
a tu prójimo como a ti mismo. =
40 De estos dos mandamientos penden toda la
Ley y los Profetas.»
Palabra del Señor
(«Y uno
de ellos le preguntó con ánimo de ponerle a prueba: «Maestro, ¿cuál es el
mandamiento mayor de la Ley?»).
*A los niños judío lo primero que
le enseñan, es el primer mandamiento de la ley, y tienen que rezarlo todos los
días, ¿cuál es el veneno de esta pregunta? Para mi es someter al Señor bajo su
dominio, y el Señor cuando les responde se va mucho más lejos, y le dice que el
segundo mandamiento, es semejante, es como dos gemelos, es casi lo mismo, son
idéntico, muy parecido, amar al prójimo es amar al Señor. Y como se refleja
esto en mi vida, digo ser cristiano y hago muchas oraciones, muchas alabanzas,
mucho santo y gloria al Señor, mucho ayuno, mucho silicio, soy lo que más sabe
sitas de la biblia, le tengo una cita bíblica a todo, (en Juan 3.16 dice) Y eso
de que me sirve, si a mi alrededor hay personas que no son de mi agrado, que no
los soporto y en ocasiones hago lo posible para evitarlo, no hablarle, ni
saludarle, si esto es con las personas de mi alrededor, que no será con los demás.
El Señor es mi muy claro conmigo si deseo amar al Señor, la única manera de
entrar a ese amor es a través de las personas que están a mi lado y que no son
de mi agrado porque ellos son mi prójimo*.
*El
que desea y quiere amar, con el corazón según el Señor: llegará a ser, Santo*
V. El Señor
nos bendiga, nos guarde de todo mal y nos lleve a la vida eterna.
R. Amén.