Musica Para el Alma

viernes, 17 de julio de 2020

LAS LECTURAS DEL SABADO 18 DE JULIO 2020


Lecturas de la 15º Semana del Tiempo Ordinario - Ciclo A

Sábado, 18 de julio de 2020

Primera lectura

Lectura de la profecía de Miqueas (2,1-5):

¡Ay de los que meditan maldades, traman iniquidades en sus camas; al amanecer las cumplen, ¡porque tienen el poder! Codician los campos y los roban, las casas, y se apoderan de ellas; oprimen al hombre y a su casa, al varón y a sus posesiones.
Por eso, dice el Señor: «Mirad, yo medito una desgracia contra esa familia. No lograréis apartar el cuello de ella, no podréis caminar erguidos, porque será un tiempo calamitoso. Aquel día entonarán contra vosotros una sátira, cantarán una elegía: "Han acabado con nosotros, venden la heredad de mi pueblo; nadie lo impedía, reparten a extraños nuestra tierra." Nadie os sortea los lotes en la asamblea del Señor.»

Palabra de Dios

 

Salmo

Sal 9,22-23.24-25.28-29.35

R/.
 No te olvides de los humildes, Señor

¿Por qué te quedas lejos, Señor,
y te escondes en el momento del aprieto?
La soberbia del impío oprime al infeliz
y lo enreda en las intrigas que ha tramado. R/.


R/. No te olvides de los humildes, Señor


El malvado se gloría de su ambición,
el codicioso, blasfema y desprecia al Señor.
El malvado dice con insolencia:
«No hay Dios que me pida cuentas.» R/.


R/. No te olvides de los humildes, Señor


Su boca está llena de maldiciones,
de engaños y de fraudes;
su lengua encubre maldad y opresión;
en el zaguán se sienta al acecho
para matar a escondidas al inocente. R/.


R/. No te olvides de los humildes, Señor


Pero tú ves las penas y los trabajos,
tú miras y los tomas en tus manos.
A ti se encomienda el pobre,
tú socorres al huérfano. R/.

 

R/. No te olvides de los humildes, Señor

 

Sábado, 18 de julio de 2020

Evangelio

Lectura del santo evangelio según san Mateo (12,14-21):

   14 Pero los fariseos, en cuanto salieron, se confabularon contra él para ver cómo eliminarle.

   15 Jesús, al saberlo, se retiró de allí. Le siguieron muchos y los curó a todos.

   16 Y les mandó enérgicamente que no le descubrieran;

   17 para que se cumpliera el oráculo del profeta Isaías:

   18 = He aquí mi Siervo, a quien elegí, mi Amado, en quien mi alma se complace. Pondré mi Espíritu sobre él, y anunciará el juicio a las naciones. =

   19 = No disputará ni gritará, ni oirá nadie en las plazas su voz. =

   20 = La caña cascada no la quebrará, ni apagará la mecha humeante, hasta que lleve a la victoria el juicio: =

   21 = en su nombre pondrán las naciones su esperanza. =



Palabra del Señor

 

(Jesús, al saberlo, se retiró de allí)

 

*El al saberlo se retiró, esta es una palabra que me hace una invitación a usar algo que el Señor me ha regalado que se llama Discernimiento. El Buen Discernimiento tiene que ver mucho, con desear siempre hacer las cosas bien y es por eso tengo que estar alerta, pendiente y despierto. También el Discernimiento me invita a tener mucho cuidado y a no confiar ni en mí mismo, porque mis pensamientos, mis ojos, mis oídos, mi nariz y mi boca pueden ser mis primeros enemigos. Ser fiel es un don, una gracia y un combate. Si una mujer me hace una propuesta, mis ojos se quedan contemplando y ven que esta buenísima, mis oídos escuchan esa vos melodiosa, mi nariz se deleita con el perfume, seguro que mi boca hará la invitación para ir a pecar. La buena noticia para mí en esta lectura es que el Señor me enseña mi ayuda es el discernimiento y las piernas para salir corriendo. Es una Bendición “El Discernimiento” que siempre está dentro de mi para ayudarme a retirarme con tiempo de en aquellos momentos y lugares donde el pecado me quiere atrapar*

   

*El que desea y quiere amar, con el corazón según el Señor: llegará a ser, Santo*

 

 

V. El Señor nos bendiga, nos guarde de todo mal y nos lleve a la vida eterna.


R. Amén.