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miércoles, 20 de agosto de 2025

LAS LECTURAS DEL JUEVES 21 DE AGOSTO 2025


 

Lecturas del Jueves de la XX Semana del Tiempo Ordinario

21 Ago 2025

Primera Lectura

Lectura del libro de los Jueces (11,29-39a):

 

En aquellos días, el espíritu del Señor vino sobre Jefté, que atravesó Galaad y Manasés, pasó a Atalaya de Galaad, de allí marchó contra los amonitas, e hizo un voto al Señor: «Si entregas a los amonitas en mi poder, el primero que salga a recibirme a la puerta de mi casa, cuando vuelva victorioso de la campaña contra los amonitas, será para el Señor, y lo ofreceré en holocausto.»
Luego marchó a la guerra contra los amonitas. El Señor se los entregó; los derrotó desde Aroer hasta la entrada de Minit (veinte pueblos) y hasta Pradoviñas. Fue una gran derrota, y los amonitas quedaron sujetos a Israel. Jefté volvió a su casa de Atalaya. Y fue precisamente su hija quien salió a recibirlo, con panderos y danzas; su hija única, pues Jefté no tenía más hijos o hijas.
En cuanto la vio, se rasgó la túnica, gritando: «¡Ay, hija mía, qué desdichado soy! Tú eres mi desdicha, porque hice una promesa al Señor y no puedo volverme atrás.»
Ella le dijo: «Padre, si hiciste una promesa al Señor, cumple lo que prometiste, ya que el Señor te ha permitido vengarte de tus enemigos.»
Y le pidió a su padre: «Dame este permiso: déjame andar dos meses por los montes, llorando con mis amigas, porque quedaré virgen.»
Su padre le dijo: «Vete.»
Y la dejó marchar dos meses, y anduvo con sus amigas por los montes, llorando porque iba a quedar virgen. Acabado el plazo de los dos meses, volvió a casa, y su padre cumplió con ella el voto que había hecho.

 

Palabra de Dios

 

Salmo

Sal 39,5.7-8a.8b-9.10

 

R/. Aquí estoy, Señor, para hacer tu voluntad

 

Dichoso el hombre que ha puesto
su confianza en el Señor,
y no acude a los idólatras,
que se extravían con engaños. R/.

 

Tú no quieres sacrificios ni ofrendas,
y, en cambio, me abriste el oído;
no pides sacrificio expiatorio,
entonces yo digo: «Aquí estoy.» R/.

 

–Como está escrito en mi libro–
«para hacer tu voluntad».
Dios mío, lo quiero,
y llevo tu ley en las entrañas. R/.

 

He proclamado tu salvación
ante la gran asamblea;
no he cerrado los labios:
Señor, tú lo sabes. R/.

 

Lecturas del Jueves de la XX Semana del Tiempo Ordinario

21 Ago 2025

Evangelio

*Lectura del santo evangelio según san Mateo (22,1-14)*

 

En aquel tiempo, de nuevo tomó Jesús la palabra y habló en parábolas a los sumos sacerdotes y a los ancianos del pueblo: «El reino de los cielos se parece a un rey que celebraba la boda de su hijo. Mandó criados para que avisaran a los convidados a la boda, pero no quisieron ir. Volvió a mandar criados, encargándoles que les dijeran: «Tengo preparado el banquete, he matado terneros y reses cebadas, y todo está a punto. Venid a la boda.» Los convidados no hicieron caso; uno se marchó a sus tierras, otro a sus negocios; los demás les echaron mano a los criados y los maltrataron hasta matarlos. El rey montó en cólera, envió sus tropas, que acabaron con aquellos asesinos y prendieron fuego a la ciudad. Luego dijo a sus criados: «La boda está preparada, pero los convidados no se la merecían. Id ahora a los cruces de los caminos, y a todos los que encontréis, convidadlos a la boda.» Los criados salieron a los caminos y reunieron a todos los que encontraron, malos y buenos. La sala del banquete se llenó de comensales. Cuando el rey entró a saludar a los comensales, reparó en uno que no llevaba traje de fiesta y le dijo: «Amigo, ¿cómo has entrado aquí sin vestirte de fiesta?» El otro no abrió la boca. Entonces el rey dijo a los camareros: «Atadlo de pies y manos y arrojadlo fuera, a las tinieblas. Allí será el llanto y el rechinar de dientes.» Porque muchos son los llamados y pocos los escogidos.»

 

Palabra del Señor

 

*Que la Paz del Señor llegue primero a vuestros corazones antes que mis palabras*

 

*("Amigo, ¿cómo has entrado aquí sin traje de boda?")*  

*Jesús con su gran pedagogía para enseñar, utiliza una parábola: Un rey que celebraba la boda de su hijo. Mandó criados para que avisaran a todos los invitados, que todo está preparado, y todos sus invitados se justificaron con distintas cosas para no asistir, el rey se sintió mal, porque las personas que él quería, ellos a él no le querían. Entonces dijo el rey, ellos no se merecen este banquete y tomo otra decisión, dijo a sus criados: Id ahora a los cruces de los caminos, y a todos los que encuentren, invítenlo a la boda; y los criados invitaron a todos, malos y buenos. Así es el amor de Dios, es un lugar donde cabemos todos malos y buenos. Pero luego vendrá el amor de Dios a visitarnos, y si somos agradecido disfrutaremos de él, pero si no somos agradecido, es porque no tenemos el traje de fiesta, y todo aquel que no tengan traje de fiesta le van a preguntar: «Amigo, ¿cómo has entrado aquí sin vestirte de fiesta? Entonces el rey dirá: Atenlo de pies y manos y arrójenlo fuera, a las tinieblas. Es triste que si vamos a una fiesta nos saquen por no disfrutar. Nosotros somos los criados del rey y nuestro trabajo es amar y servir; disfrutemos de nuestro trabajo*. 

 

*El que desea y quiere amar, con el corazón según el Señor: llegará a ser, Santo*

 

V. El Señor nos bendiga, nos guarde de todo mal y nos lleve a la vida eterna.


R. Amén.