*Jueves, 30
de mayo de 2024*
*En la
Republica dominicana*
*Santísimo
Cuerpo y Sangre De Cristo*.
Evangelio
*Lectura
del santo evangelio según san Marcos (14,12-16.22-26)*
El primer día de los Ázimos, cuando se sacrificaba el cordero pascual, le
dijeron a Jesús sus discípulos: «¿Dónde quieres que vayamos a prepararte la
cena de Pascua?»
Él envió a dos discípulos, diciéndoles: «Id a la ciudad, encontraréis un hombre
que lleva un cántaro de agua; seguidlo y, en la casa en que entre, decidle al
dueño: "El Maestro pregunta: ¿Dónde está la habitación en que voy a comer
la Pascua con mis discípulos?" Os enseñará una sala grande en el piso de
arriba, arreglada con divanes. Preparadnos allí la cena.»
Los discípulos se marcharon, llegaron a la ciudad, encontraron lo que les había
dicho y prepararon la cena de Pascua.
Mientras comían. Jesús tomó un pan, pronunció la bendición, lo partió y se lo
dio, diciendo: «Tomad, esto es mi cuerpo.» Cogiendo una copa, pronunció la
acción de gracias, se la dio, y todos bebieron. Y les dijo: «Ésta es mi sangre,
sangre de la alianza, derramada por todos. Os aseguro que no volveré a beber
del fruto de la vid hasta el día que beba el vino nuevo en el reino de Dios.»
Después de cantar el salmo, salieron para el monte de los Olivos.
Palabra del Señor
*Que la
Paz del Señor llegue primero a vuestros corazones antes que mis palabras*
(Ésta
es mi sangre, sangre de la alianza, derramada por todos)
*En esta lectura estamos invitado de una manera
especial hacer testigo del gran desprendimiento de amor de parte de Jesús.
Jesús primero nos regaló su palabra, y luego
también su cuerpo y su sangre, signo de una nueva y eterna alianza, que desea
hacer con nosotros. Es triste sentir que dentro de nosotros existe una gran
miseria, porque nos cuesta reconocer tan gran regalo. Jesús no se reservó nada,
todo lo entrego por nosotros, y a nosotros cuanto nos cuenta hasta regalarle a
una persona dos palabras como: Buenos días, o Te quiero mucho. Jesús en esta
palabra viene a denunciar que en nosotros existen algunas oscuridades que nos
impiden entregarnos desinteresadamente. Es por eso que él, nos entrega su
cuerpo y su sangre, para que sean parte de nuestra vida y así nosotros podamos
ir poco a poco, haciendo lo que a él, le gusta, lo que a él, le agrada*
*El que desea y quiere amar, con el corazón
según el Señor: llegará a ser, Santo*
V. El
Señor nos bendiga, nos guarde de todo mal y nos lleve a la vida eterna.
R. Amén.