Martes, 24 de noviembre de 2020
Evangelio
Lectura del
santo evangelio según san Lucas (21,5-11):
5 Como dijeran algunos,
acerca del Templo, que estaba adornado de bellas piedras y ofrendas votivas, él
dijo:
6 «Esto que veis, llegarán días en que no
quedará piedra sobre piedra que no sea derruida.»
7 Le preguntaron: «Maestro, ¿cuándo sucederá
eso? Y ¿cuál será la señal de que todas estas cosas están para ocurrir?»
8 El dijo: «Mirad, no os dejéis engañar.
Porque vendrán muchos usurpando mi nombre y diciendo: "Yo soy" y
"el tiempo está cerca". No les sigáis.
9 Cuando oigáis hablar de guerras y
revoluciones, no os aterréis; porque es necesario que sucedan primero estas
cosas, pero el fin no es inmediato.»
10 Entonces les dijo: «Se levantará nación
contra nación y reino contra reino.
11 Habrá grandes terremotos, peste y hambre
en diversos lugares, habrá cosas espantosas, y grandes señales del cielo.
Palabra del Señor
(Cuidado con que nadie os engañe. Porque muchos
vendrán usurpando mi nombre, diciendo: "Yo soy", o bien "El
momento está cerca"; no vayáis tras ellos).
*Hoy el Señor me hace una invitación a la perseverancia, que es la
capacidad de seguir adelante a pesar de los obstáculos o las cosas que me
impidan avanzar hacia la fe, sabiendo que encontrare dificultades y situaciones
difíciles que trataran de que no pueda avanzar. Tengo que cuidarme porque siempre hay alguien que me está asechando
para ponerme trampa, ese alguien normalmente se disfraza de: desánimo, falta de
fuerza, cansancio, aburrimiento y esa sensación de fatiga provocada por la
falta de interés y esa frase tan peligrosa (hasta aquí llegue, no doy mas). La
buena noticia para mi es que el Señor me ofrece la palabra perseverar y esto me
estimula a continuar a sacar de abajo y lograr lo que tanto deseo ser un
auténtico amigo del Señor y el Señor me regala la gran oportunidad de ser su
amigo es por eso que me dice que sea cuidadoso de que nadie me vaya a engañar
diciéndome los lugares equivocado donde no está el Señor*.
*El
que desea y quiere amar, con el corazón según el Señor: llegará a ser, Santo*
V. El Señor
nos bendiga, nos guarde de todo mal y nos lleve a la vida eterna.
R. Amén.