Martes, 20 de octubre de 2020
Evangelio
Lectura del santo evangelio según san Lucas (12,35-38):
35 «Estén ceñidos vuestros lomos y las
lámparas encendidas,
36 y sed como hombres que esperan a que su
señor vuelva de la boda, para que, en cuanto llegue y llame, al instante le
abran.
37 Dichosos los siervos, que el señor al
venir encuentre despiertos: yo os aseguro que se ceñirá, los hará ponerse a la
mesa y, yendo de uno a otro, les servirá.
38 Que venga en la segunda vigilia o en la
tercera, si los encuentra así, ¡dichosos de ellos!
Palabra del Señor
*(Tened ceñida la cintura y encendidas las lámparas)*
*El Señor me hace una invitación a estar alerta, a estar
preparado, porque no se en que momento tengo que abrir al Señor para que entre.
Algo que me gusta es que él no quiere llegar como un inoportuno, por eso siempre
me está avisando que esté preparado, que este pendiente. La buena noticia para
mi es que el Señor se alegra cuando encuentra en mí el deseo de estar pendiente
de él. Para mi estar pendiente es: Estar siempre dispuesto y preparado para
hacer el bien, tener en mi cuerpo la disposición y el deseo de obedecer a la
palabra del Señor, y que mi corazón siempre este a disposición para dar razón
de mi fe en cualquier momento y en cualquier lugar*
*El
que desea y quiere amar, con el corazón según el Señor: llegará a ser, Santo*
V. El Señor
nos bendiga, nos guarde de todo mal y nos lleve a la vida eterna.
R. Amén.