Martes, 25 de agosto de 2020Evangelio
Lectura del
santo evangelio según san Mateo (23,23-26):
23 «¡Ay de vosotros, escribas y
fariseos hipócritas, que pagáis el diezmo de la menta, del aneto y del comino,
y descuidáis lo más importante de la Ley: la justicia, la misericordia y la fe!
Esto es lo que había que practicar, aunque sin descuidar aquello.
24 ¡Guías ciegos, que coláis el mosquito y
os tragáis el camello!
25 «¡Ay de vosotros, escribas y fariseos
hipócritas, que purificáis por fuera la copa y el plato, mientras por dentro
están llenos de rapiña e intemperancia!
26 ¡Fariseo ciego, purifica primero por
dentro la copa, para que también por fuera quede pura!
Palabra del Señor
(«Esto es lo que
habría que practicar, aunque sin descuidar aquello »).
*El derecho, La compasión, La sinceridad. Estas palabras
no son para que las personas las usen con migo, al contrario esta son las
palabra que debo usar con las persona cercana a mí, en mi casa porque yo sea el
padre, eso no meda derecho a entrar a las habitaciones de mis hijos sin ante
tocar y luego preguntar si se puede pasar, tengo que respetar. La compasión, si
le hago un trabajo a una persona, si está en una situación difícil no puedo
explotarlo (ej. Si soy el dueño de una ambulancia y el costo por el servicio
son 3000 pesos, y yo veo que la persona le urgen el servicio y yo le pido 9000 pesos)
donde está mi compasión con el otro. La sinceridad; esta es una palabra que me queda
grande, porque no soy sincero, ni con migo mismo, cuantas promesas yo he hecho
y no la cumplo, es tan solo por salir del paso. El Señor me invita a reconocer
donde estoy fallado, que deje de ser un hipócrita y que le pida al Señor que me
limpie por dentro*.
*El
que desea y quiere amar, con el corazón según el Señor: llegará a ser, Santo*
V. El Señor
nos bendiga, nos guarde de todo mal y nos lleve a la vida eterna.
R. Amén.
