Miércoles, 5 de diciembre de 2018
Lo
que me dice: El Evangelio de: (Mateo
15,29-37). (Acudió a él mucha gente llevando tullidos, ciegos,
lisiados, sordomudos y muchos otros; los echaban a sus pies, y él los curaba). *Esta
palabra me llenan de esperanza y alegría, el Señor tiene un lugar en sus pies
para los enfermos y los rechazados: la gente recogía, lo que les hacía sufrir,
e iban y se lo tiraban a los pies, como quien dice, ese problema es suyo resuélvalo,
y lo hermosa es que él, los curaba a todo. Yo también he hecho lo mismo con
algunos problemas, se lo he lanzado a los pies del Señor, porque ya estoy
cansado, harto de esa situación, me gustaría desgaritar me, coger un viaje muy
lejos, como dicen (tiró la toalla), no puedo más, no quiero seguir sufriendo. Y
el Señor es a mí, a quien él quiere curar, porque tengo dificultad para
escuchar, tengo parálisis para amar y aceptar al otro como es, el Señor, al que
está esperando es a mí, que me lance, que me arroje, que me tire, a sus pies,
que soy yo el que verdaderamente lo necesito, esto me da una gran esperanza,
porque el Señor está, en un lugar visible para mí, para que yo pueda llegar a
él, y que yo pueda ser curado de todas mis enfermedades que las tengo, de todas
mis miserias que las tengo, de todos mis sufrimientos que los tengo. Él quiere
darme de ese alimento que no perece, que es su propio cuerpo, para que no tenga
ya más hambre y pueda tener fuerza, para enfrentar mis debilidades y
dificultades*.
《 *El que DESEA y QUIERE amar, con el
corazón según EL SEÑOR: llegará a ser, SANTO* 》