Lunes, 5 de noviembre de 2018
Lo que
me dice: El Evangelio de: (Lucas
14,12-14). (No invites a tus
amigos, sino a pobres y lisiados). *Esta enseñanza es como una puerta, el
Señor que me conoce y sabe cómo pienso, me invita abril una nueva puerta en mi
vida, la puerta de la humildad, en lo general cuando hago una celebración en mi
casa, lo normal es que yo siempre pienso en invitar personas que en cierto
momento yo pueda obtener algo de ello o en el fondo quiero dar para recibir. Y
el Señor me invita a dar un banquete. Preparar un banquete, es dar lo
mejor de mí, pero para invitado que yo no conozco, ni ellos tienen con que devolverme
todo el gasto que he hecho, y me hace saber que una persona que no tiene nada,
lo que brota del corazón de ese tipo de persona, es una palabra maravillosa,
con mucha fuerza y mucho poder: Señor bendice ese hombre, que sin
conocerme, me ha hecho un bien inmenso, ha cubierto mi necesidad, sin esperar
nada a cambio y sin pedirme ningún favor, y lo ha hecho con amor y a lo mejor
nunca más lo vuelva a ver en este mundo. Señor te pido que lo bendiga, dándole
lo que realmente necesita tu amor. El Señor quiere abrir una puerta nueva, la
puerta de la humildad y al mismo tiempo quiere romper en mí las barreras que me
impiden ser sincero*.
《 *El que DESEA y QUIERE amar, con el
corazón según EL SEÑOR: llegará a ser, SANTO* 》