Miércoles, 12 de septiembre de 2018
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Lo que me dice: El Evangelio de:(Lucas
6,20-26). (Dichosos
vosotros, cuando os odien los hombres, y os excluyan, y os insulten, y
proscriban vuestro nombre como infame, por causa del Hijo del hombre. Alegraos
ese día y saltad de gozo). *Estas bienaventuranzas son las puertas sin duda alguna para que
mi vida pueda entrar donde reside la misericordia, son las llaves del verdadero
éxito en la vida. También me queda claro que entrar por el camino de las
bienaventuranzas implica un grado de desprendimiento, de esfuerzo y dolor.
Cuando a una serpiente le llega el tiempo de cambiar su piel, la serpiente frota
su cuerpo o cabeza contra algo muy duro y a la misma vez que sea cortante y así
con su esfuerzo, en medio de este proceso muy doloroso, se va arrancando esa
piel vieja y mala, y después de todo un tiempo, ella mira atrás y ve todo eso
que ella tenía, que ya eran un estorbo, y que no le serbia. Y ahora la
serpiente esta lista y muy feliz porque empieza una nueva vida. Las bienaventuranzas
son ese lugar muy estrecho y afilado, donde tengo que ir frotado e introduciendo,
mi vida vieja sin amor. Porque del otro lado de la bienaventuranza, me está
esperando una nueva vida, en la libertad, en el amor. La vida de “Bendeciré al
Señor en todo tiempo, en mi boca siempre su alabanza”*.
《 *El que DESEA y QUIERE amar, con el
corazón según EL SEÑOR: llegará a ser, SANTO* 》
