Sábado, 18 de agosto de 2018
Lo que me dice: El Evangelio de:
(Mateo
19,13-15). (En aquel tiempo,
le acercaron unos niños a Jesús para que les impusiera las manos y rezara por
ellos) *Es de sabio reconocer de donde procede la verdad y la vida. Todo padre
quiere lo mejor para sus hijos. Yo como padre también quiero lo mejor para mis
hijos, y sé que lo mejor que a mis hijos le pueda pasar es que estén cerca del
Señor, por eso selo presento diariamente, para que les imponga su mano y los
bendiga. Es muy importante para mí, reconocer que veían estos padres de estos
niños, en la figura de Jesús, que sentían por Jesús, que alegría que emoción
les invadía. Si un padre es un admirador de un gran deportista y el descubre
que su hijo también, dentro de sus posibilidades le gustaría tener un encuentro
con ese deportista, pero también ese deportista tiene un equipo de seguridad
que su misión es no permitir que nadie se acerque porque es muy famoso. Jesús a
pesar de su categoría de ser hijo de Dios, nunca hizo alarde de su categoría,
al contrario se humillo. Sus disimulo se llegaron a creer que eran su equipo de
seguridad, y Jesús les reprende con amor y les dice: «Dejadlos, no impidáis a los
niños acercarse a mí; de los que son como ellos es el reino de los
cielos.» Esta palabra viene en mi ayuda porque como estoy en la iglesia,
muchas veces trato de colocarme en ese equipo de seguridad y con mi actitud, mi
forma de ser y mi forma de comportarme les impido a muchas personas que se
acerquen a Jesús*.
《 *El que DESEA y QUIERE
amar, con el corazón según EL SEÑOR: llegará a ser, SANTO* 》