Sábado, 14 de julio de 2018
Lo
que me dice: El Evangelio de: (Mateo
10,24-33). (Lo que os digo de noche decidlo en pleno día, y lo que escuchéis al
oído, pregonadlo desde la azotea). *Dos palabras (Noche y Día) La noche es
aquel lugar donde el Señor me fue a buscar porque sintió lastima de mi pobre
alma, que es tan valiosa para él. El príncipe de las tiniebla, el dueño de la
oscuridad, se estaba dando banquete torturando mi pobre alma, con sus
herramientas favoritas como son; la tristeza, la angustia, el miedo, el odio y
tantas cosas más que él tiene para hacer daño en medio de la espesa noche. De
ahí me está sacando el Señor para adentrarme en la luz del pleno día. Que
hermoso saber que en la luz, en el día puedo hablar, porque el día me regala su
claridad, me hace estar lucido y verme tal como soy. Pero la noche que
terrible, en la oscuridad solo se escucha el maullar de los lobos, y el rumiar
del resentimiento. En la segunda dice: (Y lo que escuchéis al oído, pregonadlo
desde la azotea). ¿Dónde dice el amado las palabras más bellas y hermosas a su
amada? en el oído, en la intimidad. El Señor me hace una invitación a no
resistirme, que él me está abriendo el oído para decirme cuanto me ama*.
《 *El que DESEA y
QUIERE amar, con el corazón según EL SEÑOR: llegará a ser, SANTO* 》