Musica Para el Alma

jueves, 21 de junio de 2018

MATEO 6,19-23. LO QUE ME DICE EL EVANGELIO


Viernes, 22 de junio de 2018
Lo que me dice: El Evangelio de: (Mateo 6,19-23).  («Donde está tu tesoro, allí está tu corazón»).  *Mis tesoros están puesto en aquello que se muere, y sin duda mi corazón va corriendo a la muerte. PERO si mis tesoro lo pongo en aquello que vive, y que nunca muere, que para mí es “La Palabra”, estaré  caminado a la vida eterna. Pero entender esto, para mí no es fácil, porque renunciar, a mi placer de murmurar, a mis juicios, quitarme los lente que me hacen ver que nada es nada, que me da lo mismo una hormiga que un elefante (claro siempre y cuando no este sobre mi cabeza). Puedo ver que el camino a la felicidad, está lleno de obstáculo, de sacrificio, de persecución, de humillaciones. Esto humanamente para mí no es fácil, dejar los placeres, la comodidad, los aplausos, los honores, y las gratificaciones que me brindan los placeres, y que me digan que esto es mentira. La pedagogía del amor del Señor, es sin medida, como me centra y me dice donde se acumulan todos mis problemas, y me lo hace ver diciéndome, sobre la luz. Y para esto es muy importante mi sinceridad, como debo ser sincero, con migo mismo, (como hay un dicho: “Que no hay más siego que aquel que No quiere ver”, que todo el mundo lo ve menos yo, porque no quiero). Me entristece como en muchas ocasiones yo no tengo la capacidad de reconocer lo realmente valioso, como los buenos consejos que, muchas personas me han dado y al final hago lo que se me viene en gana, cuantas persona, buenas y muy santas, han gastado su tiempo precioso, aconsejándome por mi bien. (Señor bendice con tu amor, a tantas persona, muy valiosas, que con amor y sabiduría, me han aconsejado y me aconsejan, para que mis tesoros, yo lo pueda colocar en ti, y que te coloque a ti, dentro de mí). Señor sana mis oídos, para yo pueda escuchar bien Tus Palabras, no para interpretar lo que a mí me parece o lo que yo crea. Y que se encienda dentro de mí, ese foco potente que es Tu Palabra y mis ojos puedan contemplar El Tesoro de Tu Amor*. 


*El que DESEA y QUIERE amar, con el corazón según EL SEÑOR: llegará a ser, SANTO*