Lunes, 18 de junio de 2018
Lo
que me dice: El Evangelio de: (Mateo
5,38-42). («Yo les digo: No hagan frente
al que les agravia»). *Humanamente ver esta lectura en mi vida, es dejar
que el mal haga lo que le dé el deseo con migo. Pero mirándola desde otro punto
de vista, el Señor quiere que yo encuentre dentro de mí, la auténtica y
verdadera paz, el Señor quiere eliminar de mí, la violencia que llevo dentro,
que por ignorancias me inculcaron cuando pequeño, (recuerdo cuando estaba en la
escuela, y llegaba a casa con un golpe, un rasguño, o llorando, la catequesis
que me daban era, si usted vuelve aquí llorando porque un niño le pego, yo a
usted le daré una pela, si es más grande que usted, coja un palo o una piedra y
pártalo, no me llegue aquí a la casa golpeado, pegue usted y corra para su
casa). El Señor conociendo toda la violencia que creció, y está en mí desde ese
tiempo, me lleva al estreno de todo, para poder arrancar, destruir, ese monstruo que
está dentro de mí, que en cualquier momento despierta, cuando alguien me
enfrenta. Por eso me invita amar, a aquel que de una manera u otra quiere
despertar el monstruo que está dormido en mí, que si despierta, en un
momento equivocado, en un lugar equivocado, con una persona equivocada, yo
tengo la capacidad en un instante de hacer una terrible desgracia. Y hoy puedo
sentir, que el Señor no me habla como para darme un mandamiento nuevo, sino que
me habla como a un amigo, como me quiere esta aconsejado por mi bien, para que
yo no fracase. Gracias por amarme Señor, por la forma como tú, solo sabes
hacer*.
