Lo
que me dice: El Santo Evangelio:
Lunes, 26 de marzo de 2018 (Juan 12,
1-11). («Lázaro era uno de los que
estaban con él a la mesa. María tomó una libra de perfume de nardo, auténtico y
costoso. Y la casa se llenó de la fragancia del perfume»). *Hoy me siento
muy seguro y con mucha esperanza. Lázaro fue un hombre declarado muerto, que ya
tenía mal olor, y la alegría que siento es grande, porque el Señor tiene el
poder de sacar de la muerte a uno declarado muerto y con mal olor, y luego se
sienta a la mesa con él. Mi alegría es que el Señor está haciendo con migo una
obra de misericordia, no solo me está sacando de la muerte, sino que no siente
asco de mí, ni se cubre la nariz para limpiar mi mal olor. Algo que me alegra
es que hay hermanas y hermanos, que tiene reservado para el Señor lo mejor, y
lo mejor de una hermana o un hermano de mi casa, de mi congregación, es que
tiene el poder de dar un olor tan grande, tan agradable al Señor, que a mí que
estaba con mal olor del pecado, me envuelven en esa fragancia de su perfume,
para mí no hay un perfume más caro y más auténtico, que las oraciones que hacen
mis hermanos por mí y por mi familia, me siento sumamente orgulloso de tener
hermanos, con este perfume ten agradable de la oración. Gracias Señor por
regalarme hermanos que con sus oraciones perfuman mi vida*.
《 *El que DESEA y QUIERE amar, con el
corazón según EL SEÑOR: llegará a ser, SANTO* 》